
La misión de la Agencia Espacial Europea ha detectado 26 millones de galaxias en su primer gran barrido espacial
19 mar 2025 . Actualizado a las 15:47 h.La misión Euclid de la Agencia Espacial Europea ha detectado 26 millones de galaxias en el primer barrido a las tres zonas del cielo a las que dedicará observaciones en profundidad en los próximos años, algunas de las cuales se sitúan a 10,5 billones de años luz.
El dato habla de «la extraordinaria resolución del telescopio y las zonas de visionado tan amplias que abarca», lo que ha permitido identificar en poco tiempo 10 veces más galaxias barradas (las que tienen una banda central de estrellas brillantes) que en más de 20 años con los telescopios espaciales Hubble y James Webb, ha explicado, Francisco Castander, investigador del Instituto de Ciencias del Espacio del CSIC y del Instituto de Estudios Espaciales de Cataluña.
«Es increíble cómo una sola observación (de apenas tres días) ha podido proporcionar esta gran cantidad de datos que serán un filón de oro para la investigación astronómica», ha señalado Valeria Pettorino, científica de Euclid, en una rueda de prensa para presentar el primer lote de datos que ha cartografiado la misión y que aparece descrito en 34 artículos científicos.
La sonda Euclid, lanzada en julio de 2023 con el objetivo de lograr el mapa más preciso del Universo hasta la fecha, ha explorado las tres zonas contiguas del cielo en las que, posteriormente, hará visionados más en profundidad, echando un primer vistazo de 63 grados cuadrados, el equivalente a más de 300 veces la Luna llena, el área más amplia observada jamás con un telescopio espacial.
«En los seis años que dure la misión observaremos cada una de esas áreas entre 30 y 52 veces, mejorando la resolución progresivamente y ampliando cada vez más los objetivos a observar. Nos esperan grandes descubrimientos», ha añadido Pettorino.
Las imágenes muestran cientos de miles de galaxias, de diferentes formas, tamaños y luminosidad, distribuidas a gran escala en la red cósmica. «Son de una profundidad y un detalle tan impresionante que permitirán a los astrónomos familiarizarse con los datos que va a generar la misión y programar su explotación científica más allá de los objetivos cosmológicos que se ha marcado el consorcio”, ha apuntado otro de los investigadores españoles en la misión, Rafael Toledo, de la Politécnica de Cartagena.