Las estafas que trajo el apagón: tu tarjeta está desactivada y si nos pagas te reponemos el suministro
SOCIEDAD
La Policía Nacional y los Mossos d'Esquadra han advertido de la proliferación de nuevos timos, que intentan aprovecharse del desconocimiento de las víctimas. El mensaje es el habitual, nunca proporcionar datos a terceros si nos los piden y emplear únicamente las webs auténticas y aplicaciones oficiales de los servicios para cualquier trámite
30 abr 2025 . Actualizado a las 12:13 h.El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, advertía en su primera intervención pública tras el apagón masivo que sufrió nuestro país que se avecinaban «horas críticas». Entre los llamamientos que se hacían a la población estaban el hacer «un uso responsable del teléfono móvil» para evitar la saturación de las redes de comunicación e internet. Era muy difícil enviar un mensaje o llamar a un familiar para preguntarle cómo estaba. Sin embargo, los primeros que intentaron aprovecharse de este contexto de vulnerabilidad fueron los delincuentes y organizaciones criminales para estafar en una situación desesperada para las posibles víctimas. Esa misma tarde, cumplidas ya varias horas de desconexión de la red eléctrica, la Policía Nacional advertía de llamadas fraudulentas que prometían restablecer el servicio. ¿Quién podía resistirse a volver a tener luz? Esa fue la premisa con la que trataron de ganar dinero. «Confía únicamente en fuentes oficiales, ante la duda consulta y no piques», aseguraba en sus perfiles el ente policial, recordando que nunca se deben facilitar datos personales a terceros, da igual la forma en la que se pongan en contacto con nosotros. Si se duda, lo mejor es colgar y ser nosotros los que hagamos la llamada a la empresa proveedora que tengamos contratada.
Ni por teléfono, ni respondiendo un mensaje, ni tampoco clicando un enlace que nos lleva a una página web que, en apariencia puede parecer auténtica pero en realidad es falsa, debemos proporcionar información personal o bancaria tan sensible como puede ser nuestro número de cuenta o de tarjeta.
Los Mosso's d'Esquadra advirtieron también a la ciudadanía de este último método. Los estafadores se hacían pasar por nuestra entidad bancaria, queriendo ayudarnos a activar nuestro método de pago, que «debido a una caída del sistema» habían procedido a desactivar. Al insertar los datos que pedían siguiendo el enlace que mandaban se hacían con el acceso a nuestro dinero, pudiendo hacer transferencias y compras a nuestra costa.
El denominado phising, hacer pasar una página web falsa por real, puede prevenirse siendo precavidos. Si queremos verificar que no estamos en un sitio fraudulento conviene revisar la barra de direcciones del navegador para cerciorarnos de que estamos realmente accediendo a los sitios oficiales. Aunque en el móvil es más complejo, puede consultarse el dato en la parte superior de la pantalla. Además, a la izquierda de la barra de navegación hay un botón que nos ofrecerá información sobre si el sitio es seguro o no. Chrome, el navegador de Google, ya informa por defecto con símbolos de posibles riesgos.
Es recomendable, según las últimas advertencias de la Policía Nacional, mantener además bajo control las pestañas abiertas, dado que prolifera en los últimos tiempos el llamado tabnabbing: mientras navegamos en la nueva pestaña, la página original se reemplaza en secreto por un sitio falso que intenta engañarte. Se recomienda cerrar aquellas que no estemos usando.
Y lo más efectivo siempre es emplear las aplicaciones oficiales de banca electrónica, suministradores de energía o telecomunicaciones como forma de contratación y reclamación. Incluso ha habido estafas telefónicas en las que los delincuentes han simulado emplear el teléfono verdadero de las entidades. Este método, el spoofing, se combate al igual que el resto. Las entidades reales, si ya somos clientes, nunca van a pedirnos nuestros datos porque ya los tienen y no se deben facilitar códigos de acceso o contraseñas. Cualquier servicio que nos ofrezcan siempre va a tener que ser firmado en las aplicaciones auténticas y nunca daremos a terceros esa información sensible.