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Rías Baixas teme que Trump frene las exportaciones a Estados Unidos, que un año más compra más vino y a mejor precio

Maruxa Alfonso Laya
M. Alfonso REDACCIÓN / LA VOZ

AGRICULTURA

Ramón Leiro

La reciente reelección del presidente americano despierta el miedo en una denominación de origen que, en el cómputo general, reduce sus ventas en el exterior, pero mejora sus cotizaciones medias

30 nov 2024 . Actualizado a las 19:58 h.

Durante el anterior mandato presidencial de Donald Trump, el sector vitícola español sufrió especialmente por la imposición de unos elevados aranceles. Así que ahora que este ha vuelto a la Casa Blanca, la preocupación ha vuelto a instalarse en la denominación de origen Rías Baixas, tal y como ayer reconoció su secretario general, Ramón Huidobro. «Preocupación hay, decir lo contrario sería de necios», argumentó durante la presentación de los datos de exportación de la última campaña, la que va desde el 1 de septiembre del 2023 al 31 de agosto del 2024. Las cifras de este año reflejan, de nuevo, un descenso del volumen de ventas, pero también un notable incremento en el precio medio al que se comercializa el albariño en los mercados exteriores. 

«Nuestro plan estratégico consideraba que el consumidor percibía los vinos de Rías Baixas como de calidad y que, por lo tanto estaba dispuesto a pagar más por ello», explicó el presidente de esta denominación de origen, Isidoro Serantes. Y las cifras indican que eso se está cumpliendo. «Más valor», esa es la principal conclusión que en el consello regulador extraen de unos datos que dejan claro que las ventas en el exterior han superado los 62,2 millones de euros, lo que supone un 4,36 % más que durante la campaña anterior. El precio medio de salida de bodega del albariño se sitúa así en los 7,94 euros por litro, lo que supone un crecimiento del 8,46 % con respecto a la anterior campaña, que estaba en 7,32 euros.

No hay tan buenas noticias en lo que a cantidad se refiere. Por segundo año consecutivo, la cantidad de vino comercializada en los mercados exteriores por esta denominación de origen desciende. Un 3,79 % cayó esta cifra, dejando las ventas en 7,8 millones de litros, que equivalen a algo más de diez millones de botellas. «La situación del vino no es fácil y no somos ajenos a la crisis de consumo que está afectando a nivel mundial. Diversos organismos hablan de caídas de hasta el 20 %», añadió Huidobro. Y aunque es en los tintos donde se está cebando esta caída, también está afectando a los blancos. «Ha caído el consumo, pero ha subido el valor y lo importante es generar valor añadido», argumentó. Porque, en su opinión, el incremento de precios que han experimentado los Rías Baixas es necesario «aunque perdamos volumen, porque vamos a ganar prestigio», añadió. 

Huidobro atribuye esta caída en las ventas a varios factores, además de la caída en el consumo de vino a nivel mundial y el aumento de los precios. «Rusia, por ejemplo, era un operador emergente y ahí ha cambiado la situación. China también está pasando una crisis importante y, junto con Japón, eran dos países por los que habíamos apostado y no están funcionando», añade. También el Brexit sigue teniendo sus consecuencias y Reino Unido es otra zona en los que se vende menos albariño, aunque a mejor precio.

El mercado que no se ha resentido, en cambio, es el estadounidense. «Sigue siendo prioritario y ahí nuestras ventas crecieron tanto en volumen con en valor», añade Huidobro. En la última campaña se comercializaron allí 2,8 millones de litros, de ahí que exista cierta preocupación por que el nuevo presidente, Donald Trump, decida imponer nuevos aranceles al vino, como ya hizo en su anterior mandato.  «Anunció que va a recuperar los aranceles a productos de Europa y China, pero por ahora no podemos saber como nos va a afectar, aunque sí que estamos preocupados», asegura. Pero también recuerda que, en ese mercado, Rías Baixas «está en un segmento de precios altos porque el consumidor valora muy bien nuestros vinos. Una subida de precios nos puede afectar, pero en los mercados que vendemos un aumento de dos o tres euros no debería tirar abajo el consumo», concluye.

Irlanda sube al tercer puesto en la lista de importadores y México vende el albariño a más de ocho euros

Hay más buenas noticias en el análisis de los datos de exportación de Rías Baixas. El primero, que ya son 115 las bodegas que participan en las exportaciones. El segundo, que la lista de los 75 países en los que estaba presente Rías Baixas ha crecido hasta los ochenta. «Estamos en Turquía y Serbia, donde no teníamos implantación. Esto quiere decir que las bodegas son cada vez más dinámicas y que no hay mercado que se les resista», asegura Huidobro.

 

No hay quien desbanque a Estados Unidos como principal importador de Rías Baixas y ya son 88 las bodegas que comercializan sus elaboraciones allí. Ese es uno de los motivos por los que este país centra buena parte de la actividad promocional del consello regulador. En la última campaña se han realizado seminarios en Boston, presentaciones en San Francisco y los Ángeles y otras actividades en San Diego y Dallas, por poner un ejemplo. También ha sido importante la labor de Rías Baixas en Reino Unido, que es el segundo importador de esta denominación de origen, con viajes de prensa y de reconocidos profesionales del sector y la participación en la London Wine, una de las principales ferias de Europa del sector. 

La novedad de este año es que Irlanda consigue coronarse como tercer destino de las exportaciones de esta denominación de origen. «Estamos muy contentos con el comportamiento de este mercado», aseguró Huidobro. Aquí se han realizado actividades de formación y presentaciones en puntos de venta. También Puerto Rico, que cae al cuarto puesto de la lista, «nos ha dejado sorprendido con el crecimiento. Ahora mismo es uno de nuestros grandes mercados, donde tenemos una posición importante», afirma

El quinto lugar entre los principales importadores lo ocupa México, un país «donde somos el vino blanco de referencia para el consumidor» y donde los Rías Baixas se comercializan por encima de la media, a más de ocho euros la botella, precio de salida de bodega. Lo mismo sucede en la República Dominicana, «ahí nuestros vinos tienen una gran acogida y se venden a 8,24 euros, que está por encima de la media», concluye. 

Huidobro también explicó que, a pesar de que Japón y China no están respondiendo como deberían a los esfuerzos de Rías Baixas, la denominación de origen continuará con su apuesta por los mercados asiáticos, centrándose sobre todo en Corea, «donde creemos que podemos hacer algunas cosas». También se reforzará la apuesta por los países de Europa del Este. «Si no hubiera la guerra, Rusia sería un mercado potencial. Ahora trabajaremos en Polonia y en toda Europa del este, así como en mercados de Sudamérica, como Colombia o Panamá», concluyó.