La plaga, que ya ha causado la muerte a diez animales, se detecta por primera vez en la provincia de Pontevedra y la Xunta insiste en la necesidad de adoptar medidas preventivas, como evitar la exposición de las vacas al mosquito vector
27 oct 2023 . Actualizado a las 17:51 h.La Consellería do Medio Rural ha declarado cinco nuevos focos de la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica, una plaga que está afectando al ganado bovino y que desde el verano se ha extendido como la pólvora por toda España. Galicia fue una de las últimas comunidades a las que llegó, pero ahora esta dolencia está presente ya en las cuatro provincias. Porque uno de esos últimos brotes se registró en Pontevedra, en el municipio de Vila de Cruces, la única provincia que hasta ahora estaba libre de la enfermedad. Desde la Administración autonómica recuerdan que las medidas preventivas son las únicas efectivas para prevenir los contagios de una plaga que ya ha matado a una decena de animales en toda la comunidad.
Estos nuevos focos fueron registrados en la provincia de Ourense, en el municipio de A Mezquita, en la de Lugo, en los concellos de Guitiriz, A Pastoriza y Taboada, y en Vila de Cruces. En la explotación de Guitiriz se encontraron cuatro bovinos afectados, mientras que en el resto solo uno de los animales presentaba síntomas compatibles con la enfermedad. Con estos nuevos brotes, son ya 13 los focos notificados por Galicia que, hasta ahora, han ocasionado la muerte de diez animales. En el total de España son muchos más los positivos, que rondan los doscientos, según los datos del Ministerio de Agricultura.
Desde la consellería recuerdan que la EHE es una enfermedad infecciosa pero no contagiosa. Se produce por un virus que se transmite a los animales exclusivamente a través de la picadura del mosquito del género Culicoides spp. Precisamente por este motivo, la dolencia aparece mientras este mosquito vector esté circulando por el ambiente. Por eso existe un período de posible afectación de los animales, aproximadamente entre abril y diciembre, y otro, en los meses de invierno,en el que la enfermedad desaparece porque el mosquito no está presente.
Medio Rural también insiste en que la picadura del mosquito es la única vía de transmisión de la enfermedad, por lo que no es posible el contagio directo entre vacas. Además, reitera que esta enfermedad no afecta a las personas, ni por la picadura del mosquito, ni por contacto con los animales infectados, ni por el consumo de productos de carne de origen animal. La enfermedad afecta especialmente a rumiantes silvestres, como los ciervos, corzos o gamos. En el ganado doméstico solo resulta afectado el bovino, con la aparición de síntomas en algunos animales. El ovino puede infectarse, pero no muestra sintomatología, mientras que el caprino no es sensible a esta enfermedad.
Los estudios preliminares realizados en España en aquellas comunidades autónomas que están siendo afectadas por la EHE sitúan la morbilidad media, que es el número de animales que presentan síntomas con respecto al total de rebaño, es del 7,53 %, mientras que la mortalidad media en los animales afectados no llega al 1 %, se queda en el 0,51 %. El ganado vacuno pueden presentar una clínica moderada, con fiebre, pérdida de apetito, edema facial, secreción ocular o nasal, salivación, dificultad respiratoria, eritema o descamación en boca y nariz, cojera o eritema en el ubre. Los síntomas suelen desaparecer al cabo de dos semanas.
¿Cómo se puede prevenir la enfermedad?
No existe ni vacuna ni tratamiento curativo específico contra el virus de la EHE. Por eso, desde la consellería insisten en la necesidad de implementar medidas preventivas, que van encaminadas a evitar el contacto de los animales con el insecto vector. Para ello se debe evitar la existencia de posibles zonas de cría del mosquito en las explotaciones, fundamentalmente en zonas con materia orgánica húmeda o lana, que son las preferidas de este insecto para reproducirse.
También se deben utilizar desinsectantes o repelentes en las instalaciones, en los medios de transporte de los animales y en los casos que se consideren oportunos. En caso de detectar animales con síntomas compatibles con la enfermedad, tanto bovinos como cérvidos silvestres, debe comunicarse la circunstancia de forma inmediata a los servicios veterinarios de la Xunta.