La patronal aplaude que se esté buscando un acceso al mercado libre de aranceles
14 mar 2020 . Actualizado a las 05:00 h.La industria conservera y transformadora de productos del mar española, agrupada en buena parte en la patronal Anfaco-Cecopesca, ha valorado positivamente el arranque de las negociaciones entre el Reino Unido y la UE para establecer la relación que mantendrán a partir del 31 de diciembre en lo que respecta a la comercialización de productos pesqueros. Aplaude que, según recoge el mandato de negociación, se esté buscando un acceso al mercado libre de aranceles y de contingentes, todo «condicionado al establecimiento de disposiciones robustas que aseguren un terreno de juego igualitario (level playing field) y al cumplimiento estricto de las normas de origen».
A estas últimas, precisamente, Anfaco otorga un carácter esencial, para evitar que el mercado de la UE se convierta en un coladero de conservas de terceros países con los que no tiene acuerdo comercial el mercado comunitario. Por eso las normas de origen, expone la patronal en un comunicado, «deben ser preferenciales al objeto de evitar que a través del Reino Unido pueda acceder a la UE producto de terceros países».
La industria se resiste a perder un país del que costó trabajo ganarse su confianza De esta manera, la conserva española apela a los negociadores de la UE para que presten especial atención a los acuerdos comerciales que pueda firmar el Reino Unido con terceros países, puesto que «tendrán una incidencia directa al incrementar la competencia para la industria española en el mercado británico».
Así, desde la patronal, se espera que «en el desarrollo de estas negociaciones se celebre un acuerdo que permita mantener, como mínimo, los flujos comerciales entre ambos bloques.
Del cuarto al sexto puesto
Según explica Anfaco, el Reino Unido ha sido el cuarto destino de las ventas exteriores de la industria de conservas y transformados de pescado y marisco gallega y española. Exporta, sobre todo, latas de atún, que suponen más del 60 % de las exportaciones totales de conservas y preparados de pescado y marisco. Pero la demanda cayó de tal forma a partir de la decisión de abandonar la UE, que en el 2018 cayó a la sexta posición como cliente, dejando pasar delante a los Países Bajos y puesto que revalidó en el 2019. En este último ejercicio se redujeron un 22 % las exportaciones españolas a dicho mercado y todo, por la incertidumbre que ha generado el brexit.
Postura de firmeza
Anfaco confía en que la UE defienda en todo el proceso los intereses de la industria comunitaria «con total firmeza y que finalmente no se produzca un perjuicio, ni que la pesca sea utilizada como moneda de cambio». El Reino Unido, argumenta la patronal, es un mercado objetivo en el que la industria ha estado siempre bien posicionada. Claro que para ello se han precisado muchos años de trabajo para ganar la confianza de un consumidor británico antes reticente.