Se prevé que el real decreto se apruebe el próximo martes en el Consejo de Ministros, pero no cuentan con recibir subsidios hasta el 2021
25 jul 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Las empresas de la pesca y de la acuicultura esperan que el Gobierno apruebe con rapidez el real decreto sobre las ayudas para paliar las pérdidas económicas derivadas de la pandemia, según manifestaron ayer los responsables de sus patronales. Representantes de la flota, de conserveras, de empresas del sector de la acuicultura y de las pescaderías han hecho balance sobre la crisis del coronavirus y han analizado los retos para la recuperación durante un seminario web organizado por la Plataforma Tecnológica de la Pesca y de la Acuicultura (PTEPA). Entre los problemas principales, han destacado la caída de la facturación a causa del descenso del consumo en hostelería y restauración.
Las empresas están a la espera del real decreto con ayudas frente al covid-19, que recoge las modificaciones del Fondo Europeo Marítimo y Pesquero (FEMP) aprobadas por la UE en favor del sector. Esta previsto que salga adelante en el Consejo de Ministros del día 28, según el secretario general de la Confederación Española de Pesca (Cepesca), Javier Garat.
Los responsables de las patronales Apromar (acuicultura), Anfaco-Cecopesca (industria conservera) y de la Cooperativa de Armadores de Vigo (Arvi) resaltan la importancia de que el sector perciba cuanto antes los apoyos del FEMP. No obstante, hay dudas de que los fondos lleguen antes del 2021, como expuso el vicesecretario general de la Asociación Nacional de Fabricantes de Conservas de Pescado y de Marisco (Anfaco-Cecopesca), Roberto Carlos Alonso.
Sector conservero
El sector extractivo y acuícola cifra en un 30 % la caída global de la facturación en estos meses. El representante de Anfaco señala que el impacto en la industria ha sido «desigual», con un descenso medio de la facturación que oscila entre el 5 y el 10 %, aunque hay productos como las latas (sobre todo de atún) cuyas ventas crecieron debido a la subida del consumo dentro del hogar. Sin embargo, la fuerte caída de la hostelería y la restauración ha llevado a empresas que trabajan para este canal a cerrar fábricas y recurrir a ERTE.