La crisis del pulpo llega al Parlamento, que reclama estudios sobre su debacle
SOMOS MAR

Las capturas de cefalópodo han caído un 85 % desde la campaña anterior
13 nov 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Lo que está ocurriendo este año con el pulpo en Galicia es realmente preocupante. No se recuerda una serie histórica tan desastrosa. Su escasez no solo inquieta a los naseiros, que han visto caer sus capturas un 85 % con respecto a la campaña anterior, sino que ha desazonado a todo el arco parlamentario: al PSdeG, al BNG y también al PPdeG, que ayer apoyó la moción presentada por el grupo socialista en el Parlamento gallego. Y eso a pesar de que este, por boca de su diputada Patricia Otero, se negó a aceptar sus enmiendas, tendentes a dejar claro que el Gobierno gallego no está cruzado de brazos, como insinuaba la oposición en su iniciativa, y que está investigando las causas y evaluando con el sector las medidas que se deben adoptar.
Y quizá se estén realizando indagaciones, como admitió la diputada del Bloque Rosana Pérez, pero lo cierto es que, hoy por hoy, no hay una explicación científica a esta debacle, cuando ante los problemas de una pesquería como la del pulpo, vital para Galicia, se tendría que estar «as 24 horas dos día investigando para dar coas causas» y poner remedio a esta situación.
Porque se habla de cambio climático, de sobreexplotación, de temperatura del agua, de poco tiempo de veda... Pero en definitiva el pulpo, a pesar de la importancia económica de su explotación, sigue siendo un gran desconocido. Se saben algunas cosas, como que su ciclo vital es de dos años, que las puestas suelen ser en primavera, entre mayo y junio, los reclutamientos también ocurren en esa época... Y por eso se suele hacer coincidir la veda con esas fechas, salvo este año que, a causa del covid, se optó por un único mes de veda, en junio. Pero los naseiros siguen capturando ejemplares ovados y el recurso no se recupera. De ahí que sea pertinente «realizar novos estudos para analizar a evolución da especie, dando traslado do seu resultado ao sector», como propuso el PSdeG en su iniciativa. Como también lo es «elaborar un novo plan de xestión do polbo consensuado co sector, que inclúa un verdadeiro plan de recuperación desta especie».
Preocupación
Escuchar ese «realizar nuevos estudios» y, sobre todo, oír «verdadeiro plan de recuperación» chirrió en los oídos del PPdeG, que intentó cambiar ese texto en el que el PSdeG acusaba de inacción a la Consellería do Mar. La diputada Teresa Egerique señaló que la Xunta está trabajando con el sector para perfilar el nuevo plan de gestión, dialogando sobre el número de nasas que deben permitirse, las medidas de control que hay que adoptar y la duración de las vedas. Pero apoyó la moción en la Comisión de Pesca porque los populares son conscientes de la gravedad de la situación. Un panorama que Egerique pintó incluso más negro que Otero, a la que corrigió datos casi para peor. Porque si la socialista dijo que son 800 las embarcaciones que dependen del pulpo, la popular rebajó a unas 600 las unidades que suelen faenar al cefalópodo, pero admitió que los despachos para esta arte cayeron un 5,5 %, que los días de pesca también se han reducido de forma considerable y que las capturas han caído un 85 % con respecto a la anterior campaña. En definitiva, un escenario demasiado crítico para andarse con cuestiones gramaticales y que concitó unanimidad.
El BNG aconseja terapia de pareja a Caballero y Feijoo para que el Ifevi pueda ampliarse
Están todos de acuerdo en que es preciso ampliar el Ifevi, el recinto ferial de Vigo, para dar impulso a Conxemar, sobre todo ahora que desembarca su rival en Barcelona y necesita sitio. Y, sin embargo, la moción presentada por el grupo socialista en este sentido fue rechazada, pues no contó con el apoyo del PP. Gráfica fue la diputada del Bloque Carmen González Iglesias, que se sintió «ante un novo capítulo das leas que teñen Concello de Vigo, PSOE e Caballero, con Xunta, PP e Feijoo». Los vigueses están «cansos de tanto pim, pam, pum», dijo González, que recomendó a Caballero y Feijoo «terapia de parella» para que Vigo deje de asistir a sus peleas.