Denunciados veinte barcos en Galicia por no enarbolar la bandera española
SOMOS MAR
Catorce pesqueros y lanchas de recreo no la lucían en puertos de A Mariña
16 mar 2021 . Actualizado a las 21:44 h.Hartos de lo que consideraron «un exceso de celo por parte de algúns », dueños de pesqueros y de lanchas de recreo de A Mariña protestaron porque la Guardia Civil los denunciaba cuando detectaba a sus embarcaciones sin la bandera española o sin enarbolarla como creían correcto el o los agentes que actuaban contra ellos. Sucedía mientras estaban atracados en puertos como Burela o Celeiro, sobre todo durante los fines de semana o festivos, y también en rías como la viveirense. La oleada de quejas llamó la atención del diputado Néstor Rego (BNG), que semanas atrás preguntó desde el Congreso a qué se debía. La respuesta del Gobierno explica el malestar en A Mariña. Ahí se formularon catorce de las veinte denuncias registradas en toda Galicia.
El dato oficial llama la atención porque el litoral lucense es el más pequeño de la comunidad autónoma, pero también porque en sus puertos solo tiene base alrededor de un 3 % de la flota pesquera y auxiliar de la acuicultura de Galicia, un porcentaje que no alcanza con las embarcaciones de recreo. Aun así, en un período que el Gobierno no detalla, sumaron el 70 % de las denuncias. De las catorce de A Mariña, ocho se presentaron contra pesqueros y seis contra barcos de recreo. La Guardia Civil interpuso cuatro en toda la provincia coruñesa: tres a pesqueros y una a una nave auxiliar de pesca. Y en la demarcación pontevedresa abrió expedientes contra dos embarcaciones de recreo.
Una norma de 1980
Tampoco aclara el Gobierno si esas actas acabaron en sanción y a cuánto ascendieron las multas, pese a que Néstor Rego se lo pregunta expresamente. Sí contesta, negándola, a la pregunta de si ha dado «instrucciones a la Guardia Civil» para lo que el diputado estatal del Bloque define como «campaña sancionatoria».
Dueños de pesqueros y de pequeñas lanchas recreativas de A Mariña se preguntaban por qué determinados miembros de la Guardia Civil «levan a lei ao extremo», tachando de «desfasado» que actuasen contra barcos ya identificados con su respectivo nombre, folio y matrícula que nunca salían de aguas nacionales.
Los afectados se quejaban especialmente porque solían actuar contra ellos en domingos, uno de los dos días del fin de semana en los que los pesqueros de litoral están obligados a amarrar y, por tanto, sus tripulantes descansan. También alegaban que aunque hubiesen dejado las banderas izadas podrían habérselas llevado el viento, por ejemplo. Algún jubilado del mar con una pequeña lancha para la pesca recreativa lamentaba que lo multasen por navegar con la bandera visible, pero colocada en un sitio donde no le molestaba para gobernar la embarcación y lanzar la caña.
La Guardia Civil aplica el decreto estatal «que regula el uso de la bandera de España» y otras en barcos nacionales. Promulgado en 1980, establece que todos los buques y «artefactos flotantes, cualquiera que sea su tipo, clase o actividad, enarbolarán, como único pabellón, la bandera de España». En aguas nacionales, deben hacerlo «a la vista de buque de guerra o fortaleza; a las entradas y salidas de puertos, y, en estos, de sol a sol, en los días festivos y cuando así lo disponga la autoridad competente». Para la enseña nacional han de «reservar el asta de popa y el pico del palo mayor». Permite izar banderas reconocidas por las comunidades autónomas «en puertos nacionales y aguas interiores, pero siempre al mismo tiempo que el pabellón nacional». Eso sí, sus dimensiones «nunca serán superiores a un tercio» de lo que mida la española.
Que se sepa, el presunto «exceso de celo por parte de algúns gardas civís» en A Mariña debió quedar atrás o todos los dueños de embarcaciones izan la bandera siempre como marca la Ley.