P. J., de 51 años, falleció en un hospital de Montevideo y otros tripulantes ya han superado la enfermedad
08 may 2021 . Actualizado a las 21:43 h.El contramaestre P. J. falleció en Montevideo a los 51 años, víctima del covid-19, según confirmó el gerente adjunto de la Cooperativa de Armadores de Vigo, Edelmiro Ulloa, que dijo que están «muy disgustados» y afirmó sentirlo mucho por la famlia. Era natural de Moaña y vecino de Cangas. Estaba embarcado en el Playa de Sartaxens, de la armadora Moradiña, del empresario Juan Barreiro, cuando el virus se extendió entre la tripulación. El debate político sobre si los marineros deben vacunarse no se ha resuelto aún.
El contramaestre empeoró a bordo hace quince días y fue ingresado, también con otro compañero y cocinero de Bueu en un hospital de la capital uruguaya. La pasada madrugada, la familia en Cangas recibía la confirmación del fallecimiento. Estaba casado con una mujer de la parroquia de O Hío y era padre de dos varones de 26 y 18 años.
Los dueños de la empresa armadora se han desplazado a Uruguay para hacerse cargo de la repatriación del cadáver y apoyar al resto de tripulantes. Son conocidos como los Charrúa y su compañía tiene una gran presencia en el sector, ya que son propietarios de Frigoríficos del Morrazo.
El marinero de Cangas llevaba 25 años trabajando en el Playa Sartaxens en la pesca de merluza y calamar en el caladero del Atlántico Sudoeste. Había embarcado como el resto de la flota en enero y tendría que regresar en el relevo de junio.
Tanto el Concello de Cangas como la Cooperativas de Armadores de Vigo han expresado su pesar por el fallecimiento del marinero.
El gerente adjunto de la Cooperativa de Armadores, Edelmiro Ulloa, ha expresado su dolor por una muerte que «no sabemos si se podría haber evitado pero, desde luego, es urgente que se vacunen a las tripulaciones. Lo llevamos pidiendo desde diciembre y parece que la ministra de Sanidad no lo entiende». Ulloa ha dicho que a pesar de que se hacen controles y PCR antes de zarpar, «una vez allí hay inspectores que suben a bordo y que están en contacto con otras tripulaciones. También se producen reparaciones y con este virus hay muchas posibilidades de contagiarse en un espacio reducido, a pesar de que se toman todas las precauciones del mundo». De hecho, en esta ocasión se han contagiado muchos de los 40 tripulantes que, por suerte ya han superado la enfermedad y el barco ha vuelto a faenar.
La concejala de Cangas del BNG, Mercedes Giráldez ha pedido un minuto silencio en el pleno municipal y ha criticado a la Xunta por no vacunar a esta población de riesgo como «está facendo o País Vasco». La Xunta ha pedido al Ministerio de Sanidad poder priorizar a este sector laboral como se ha hecho con sanitarios y profesores.
Cangas está muy preocupada por el covid ya que estos días también se ha producido un brote en la conservera Lago Paganini donde se produjeron ocho contagios, según la edila. La fábrica cerrará hasta el lunes.