El barco auxiliar del megayate Aqua, cuya propiedad se atribuye por error al fundador de Microsoft, de pruebas por la ría
29 ago 2021 . Actualizado a las 01:53 h.El megayate de lujo Wayfinder ultima su puesta a punto. La embarcación (que en realidad ejerce como auxiliar de otro supermegayate) volvió a surcar ayer las aguas de la ría de Vigo, a eso de las 11.30 horas. Navegó hasta más allá de las islas Cíes (unas once millas náuticas) y regresó unas cuatro horas más tarde para descansar en Beiramar. Su cobijo está en Astilleros Armón, que se está encargando de las labores de reparación y mantenimiento, pasando la noche en el último pantalán de la avenida.
El Wayfinder lleva en Vigo desde el pasado mes de abril. La visita a la ría no es casualidad. Sus constructores fueron los asturianos Armón en la planta de Burela, quienes lo botaron al mar el pasado mes de diciembre. La velocidad máxima de este yate de motor diésel es de 21 nudos, su eslora mide 68,2 metros y su manga, 14. De su diseño interior se encargó el estudio vasco Oliver Design, que esta semana también estaba presente en Vigo mediante el recién convertido en hotel de lujo Lord of the Highland.
La embarcación principal a la que sirve es el Aqua, un yate de 112 metros de eslora con una velocidad de 17 nudos y un alcance de 3.750 millas náutica, que se alimenta por hidrógeno. Aunque algo más modesto, el barco que se está reparando en Vigo cuenta con helipuerto y ejerce como flotel con espacios y habitaciones para 12 huéspedes y 18 miembros de tripulación. La cabina de invitados acoge a otras seis personas. También dispone lavandería, despensas, talleres y almacenes de repuestos. En su panza, acoge materiales de esparcimiento y deportes náuticos del buque nodriza.
El Wayfinder funciona como auxiliar del supermegayate asociado mediáticamente a Bill Gates, la cuarta mayor fortuna mundial según la lista de la revista Forbes. A pesar de que Sinot, el estudio de diseño y arquitectura alemán que lo desarrolló, negó tajantemente cualquier tipo de relación o negocio con el fundador de Microsoft, muchas publicaciones siguen insistiendo en convertir a Gates en dueño del barco.
El desmentido ocurrió el 10 de febrero del 2020. Quién sabe qué puede haber pasado en este tiempo. Quizás le quede siempre la coletilla de «el barco de Bill Gates». Y quizás al multimillonario creador de Windows ni siquiera le guste navegar.