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Mexillón de Galicia subraya que superó con notable el examen de MSC

e. a. REDACCIÓN / LA VOZ

SOMOS MAR

Solo en el sector mejillonero trabajan ahora unas 1.600 mujeres, algunas en bateas como esta de la ría de Arousa
Solo en el sector mejillonero trabajan ahora unas 1.600 mujeres, algunas en bateas como esta de la ría de Arousa Martina Miser

Renunció al sello porque WWF, «para justificar su actitud obstruccionista, ha declarado que sobran bateas en la ría de Arousa»

29 nov 2021 . Actualizado a las 04:50 h.

Por más que haya tirado la toalla y renunciado a lucir el sello azul de MSC que certifica su sostenibilidad, el Consello Regulador de la DOP (denominación de orixe protexida) Mexillón de Galicia subraya que ha conseguido superar el proceso de evaluación. Y con buena nota, además: «Las puntuaciones que obtuvimos estuvieron por encima de la nota exigida, que es un notable», apuntan desde el ente que vela por la DOP. Eso, a juicio del regulador, ya es suficiente para corroborar que el de mejillón gallego es «un cultivo sostenible».

Si a estas alturas el bivalvo no tienen el sello azul es por el proceso de objeciones que abrió la organización conservacionista WWF que, «para justificar su actitud obstruccionista, ha declarado que sobran bateas en la ría de Arousa», apuntan desde el Consello. Pero ese exceso de capacidad que denuncian «parte de un estudio que tiene errores groseros y que la organización conoce», añaden desde Mexillón de Galicia, que considera inexplicable que los ecologistas insistan «en dar por válidas las conclusiones de un informe que contabiliza en la ría de Arousa 950 bateas más de las que realmente hay» y que, además, «sus propios autores reconocen que tiene una incertidumbre elevada». Esto es, a juicio del Consello Regulador, «un claro ejemplo del enconamiento y la falta de rigor con la que WWF ataca a Mexillón de Galicia y a las familias que viven de esta actividad».

Proceso acreditado

En cuanto al otro argumento al que WWF recurrió para objetar contra la concesión del sello de que el equipo evaluador se saltó un paso del proceso, «demuestra que la entidad no entiende ni de criterios técnicos, ni de normas», pues, afirma el Consello, el equipo técnico «aplicó la norma MSC correctamente y así lo corroboró la entidad de certificación internacional, ASI, que supervisó todo el proceso».

Por tanto, WWF, con su actitud, «hace buena la expresión de ‘tirar la piedra y esconder la mano’», pues, a su juicio, y por más que ahora quiera situarse «al margen del conflicto, ha instigado el enfrentamiento entre los sectores —bateeiro y percebeiro— que viven del mar en Galicia».

Cultivo en Irlanda

También instan a WWF a explicar en qué se basan para defender que sí es sostenible «la práctica de dragar un mejillón en Irlanda, transportarlo a Holanda y mantenerlo allí un tiempo en el mar antes de comercializarlo» y no el cultivo de mejillón en batea que se realiza en Galicia. «Claramente retuercen el concepto de sostenibilidad para acomodarlo a sus intereses», sentencia el Consello. Una entidad que, asegura, «ha mantenido siempre una actitud dialogante, coherente y constructiva». Ahora solo quiere pasar página y seguir a lo suyo: «Nuestro objetivo sigue siendo el mismo y por ello continuaremos trabajando con firmeza para situar al Mexillón de Galicia en el sitio que se merece, le pese a quien le pese».