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Las lonjas gallegas remontan y capean el cuarto peor año del siglo en capturas

S. S. REDACCIÓN / LA VOZ

SOMOS MAR

La lonja de Vigo revalida liderazgo por facturación en Galicia (foto de archivo)
La lonja de Vigo revalida liderazgo por facturación en Galicia (foto de archivo) PilarYarza

Superan los 437 millones de euros, pero el precio medio solo subió el 1,8 %. Cayó la oferta de merluza, rape y gallo, aunque subió la de almeja y pulpo

08 ene 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Al final lograron remontar un 2022 que pintaba bastante peor de lo que acabó. Sin ventas en Foz y O Pindo, se comercializaron pescados y mariscos en 61 lonjas. Por el maná otoñal de la pota voladora, se superaron las descargas del 2021, aunque ni así los mercados y la flota se libraron del cuarto peor año del siglo en capturas. Subastaron 134,3 millones de kilos por los que facturaron 437,4 millones de euros. A los pescadores y a los mariscadores les pagaron sus productos a una media de 3,25 euros el kilo, un 1,8 % más, pero solo un tercio del 5,8 % que subió el Índice de Precios al Consumo (IPC).

Pendientes de consolidar, las cifras publicadas por la Consellería do Mar en su Plataforma Tecnolóxica da Pesca y resumidas en los gráficos anexos indican que solo se vendieron menos productos del mar en el 2003, 2002 y 2021, cuando oscilaron entre 124,6 y 132,6 millones de kilos, pero el 2022 queda lejos de los 212,7 millones del 2017, hasta ahora el techo autonómico.

En subastas a la baja, el sector no puede repercutir la inflación en lo que cobran por sus productos. Desde el 2001 hasta diciembre, el IPC subió en España un 58 %, según el Instituto Nacional de Estadística, casi el doble que el 31 % del precio medio en las lonjas. Los 6 céntimos de incremento del año pasado respecto al anterior contribuyeron a elevar la facturación un 3,2 %. Los 437 millones de euros están en línea con el promedio de este siglo, pero distan de los 491 y 508 del período 2016-2018.

Los datos enviados por los gestores de los 61 puntos de primera que quedan en Galicia confirman el liderazgo de Vigo en facturación, además de un intercambio de posiciones, pues A Coruña recupera el segundo puesto y Burela pasa al tercero. Cuarto continúa Celeiro y quinto, Ribeira.

Las cinco grandes

Por volumen de descargas, A Coruña encabeza el listado, seguida de Ribeira, Vigo, Burela y Celeiro.

De esos cinco mercados salen ocho de cada diez pescados y mariscos de Galicia, y ahí facturan siete de cada diez euros que genera el sector en primera venta.

No son definitivas las cifras de PescadeGalicia que indican que el año pasado Vigo movió 23,58 millones de kilos de productos del mar y 91,85 millones de euros, con lo cual respecto al 2021 perdió un 6,5 % en volumen y ganó un 4,4 % en ingresos.

A Coruña comercializó 27,67 millones de kilos, un 1,6 % menos, pero facturó un 0,5 % más, hasta 64,86 millones de euros.

Más acusado, según los datos provisionales, ha sido el descenso del 13 % en las ventas en Burela, hasta 16,54 millones de kilos; que económicamente se tradujo en 63,17 millones, un 5,7 % menos.

Mejoró Celeiro en volumen e ingresos: los 13,93 millones de kilos del 2022 representan un 4 % más y los 48,87 millones de euros, un 13 % más.

También ha sido positiva la evolución de la lonja de Ribeira, donde se subastaron 24,50 millones de kilos (un 9,4 % más) y se facturaron 40,23 millones de euros (un 6,8 % más que en el 2021).

Menos merluza, rape y gallo, pero más almeja y pulpo

Extraen los pescados y los mariscos porque generan ingresos para vivir ellos y sus familias, así como empleos y riqueza en todos los eslabones que hacen posible que esos alimentos esenciales lleguen a las mesas. Cuenta el volumen, pero lo realmente importante es el dinero. Por facturación, cinco especies encabezan el ránking de las 260 comercializadas en las lonjas gallegas.

Despunta la merluza, pese a que los casi 22 millones de kilos vendidos el año pasado suponen un 12 % menos que los del anterior. Quizá por eso su precio medio antes de tasas e impuestos subió un 10 %, hasta una media de 4,48 euros el kilo; pero ni así se evitó una caída del 4 % en la facturación, que se quedó en 98,3 millones de euros.

También hubo algo menos de rape, que bajó ligeramente de precio (5,41 euros el kilo), generando 25,33 millones de euros con 4,7 millones de kilos.

Se extrajo más almeja japonesa, 2,26 millones de kilos para ser exactos, con los que se facturaron casi 25 millones de euros, dos menos que en el 2021, porque el precio medio por kilo bajo de 13,42 a 10,95 euros.

Las ventas de pulpo aumentaron un 31 %, hasta 2,26 millones de kilos, y se pagó un 3,5 % más, con lo cual generó 20,74 millones de euros, subiendo un 26 %.

Otro pescado con menor oferta fue el gallo (meiga o rapante): los 4,29 millones de kilos fueron un 17 % menos, lo que se tradujo en un recorte de 2 millones en los ingresos, hasta 17,35, pese a que se pagó más, a 4,04 euros.

El 2022 ha sido el año de la pota voladora en Galicia: se triplicaron las descargas, hasta 10,3 millones de kilos, y la facturación se multiplicó hasta 14,7 millones de euros, pagándose el kilo a 1,42.