Los mejilloneros logran colapsar Santiago con una procesión de coches, lanchas y remolques

SOMOS MAR
Una caravana de coches y lanchas rodeó San Caetano
02 mar 2023 . Actualizado a las 22:27 h.El lunes, dirigentes de más de una veintena de asociaciones de mejilloneros gallegos se reunieron en Vilanova de Arousa para trazar un calendario de movilizaciones por el conflicto de la mejilla. La primera de ellas se celebró ayer, a primerísima hora de la mañana, y tuvo como escenario Santiago de Compostela. El entorno de San Caetano y todo el centro urbano sufrió las consecuencias de una caravana de coches, remolques y lanchas circulando lentamente por las calles. «Montouse unha boa empanada», señalaban los participantes en la que bautizaron, con sorna, como la «ruta do mexillón».
Es difícil cuantificar cuántos vehículos participaron en la protesta. Desde luego, fueron los suficientes para generar un problema de tráfico que obligó a intervenir a la Policía Local de Santiago. Cuando, para dar por finalizada la mañana de protesta, se reunieron en la Cidade da Cultura, sus vehículos parecían llenar los amplios aparcamientos del Gaiás. Habían llegado hasta Compostela desde todos los puertos de descarga de mejillón de Galicia. En los de Arousa, los productores se habían dado cita a las siete y media de la mañana. Desde ellos fueron saliendo de forma escalonada, unos por autopista y otros por carretera.
En Santiago comenzaron a circular con parsimonia alrededor del complejo de la Xunta, y el embudo provocado en ese punto tuvo repercusiones en el conjunto de la ciudad, según señalaron desde la central de cámaras de la Policía Municipal. Tras generar ese monumental atasco, y a las puertas de San Caetano, los bateeiros expusieron las causas de su enfado. Algunos habían acudido a la protesta cargados con capachos de mejilla extraída en los muelles. «Isto é o futuro que nos dan aos bateeiros? Isto é o que hai nos 120 quilómetros de peiraos que nos abriu o director xeral», exclamaban mientras vaciaban uno de esos capachos en el suelo. «Isto que o leve el, porque para a miña batea non pode ir», se lamentaba un productor que señalaba que, si no logran la mejilla suficiente para alimentar sus cuerdas, está en peligro este sector, «pero tamén o das depuradoras, o dos cocedoiros e o do transporte». A su alrededor, sus compañeros de protesta pedían a gritos la dimisión de Rosa Quintana, conselleira de Mar. «Percebeira, dimisión», decían. La frase deja patente que desde el sector de las bateas consideran que la responsable de los asuntos del mar no mantiene una postura neutral en el conflicto por las piedras que mantienen con el sector del percebe.
Hacer balance
Desde las puertas de la Xunta los participantes en la mañana de protestas volvieron a ponerse en marcha, esta vez rumbo al Gaiás. Allí ocuparon el aparcamiento para realizar una primera evaluación de lo ocurrido. Y resultó satisfactoria. Hoy, de forma ya más sosegada, volverán a reunirse directivos de los distintos colectivos que dieron soporte a las acciones de ayer para releer lo conseguido, tanto en lo que respecta a la movilización como a sus objetivos. Será a las seis de la tarde, en Rianxo. Durante ese encuentro está previsto que se fijen los pasos que se deben dar a partir de ahora.
Rueda avanza que se van a abrir más zonas a la extracción de cría
El caos de tráfico que ayer provocaron los bateeiros no pudo pasar desapercibido al presidente gallego, Alfonso Rueda, no en vano hicieron coincidir la protesta con la celebración del consello de la Xunta. Rueda aseguró que en el Gobierno son «conscientes de que hai un conflicto, como proba a manifestación», en alusión a la caravana de coches con remolques y planeadoras a cuestas que se pasearon por delante de San Caetano.
El presidente señaló que la solución del problema pasa por conciliar los intereses de los percebeiros y los bateeiros, probablemente «con renuncias das dúas partes».
Apuntó que hay «un problema coa produción de mexilla» y anunció que, de acuerdo con los trabajos realizados durante las últimas semanas, pronto se aprobará una nueva ampliación de las zonas para su cultivo, aunque «non pola concentración». Además, insistió en que la Consellería do Mar intensificará el «diálogo constante» que se ha mantenido con el sector para abordar sus reivindicaciones.
