El infractor aseguró que procedían del quiñón de cuatro marineros de un buque de altura, pero la Guardia Civil precisa que no pudo aportar documentos de compra
16 may 2023 . Actualizado a las 20:38 h.El pasado 8 de mayo, lunes, agentes de la patrulla Fiscal y Fronteras del puerto de Marín, unidad adscrita a la Guardia Civil de Pontevedra, intervinieron 850 kilos de pescado congelado en el interior del puerto de esta localidad pontevedresa. La incautación se produjo después de que los guardias dieran el alto a una furgoneta al observar que portaba mercancía en la parte delantera de la misma.
De este modo, y tras identificar al conductor, un varón de origen marroquí residente en Cambados y de 44 años, se procedió a registrar el vehículo. Esto permitió localizar en su interior un total de 46 cajas de 18 kilos cada una de ellas de pescado congelado. Desde la Comandancia precisaron que, al consultarle el origen del mismo, respondió que «procede del quiñón (pescado para consumo propio) de cuatro pescadores de un buque de pesca de altura, pero no tiene ningún documento de la compra de la mercancía».
No respetar la cadena de frío
Es por ello que, «por no respetar la cadena de frío, ya que parte del pescado estaba en el asiento del copiloto, se procede a realizar una denuncia por la aprehensión de la mercancía». Esta quedó depositada y precintada en los congeladores de una empresa del propio puerto de Marín.
Desde la Guardia Civil precisaron que estos hechos constituyen una infracción grave a la Ley 11/2008, de 3 de diciembre, de Pesca de Galicia, al tiempo que destacaron que «con esta actuación se ha evitado la venta de pescado que no cumplía las condiciones higiénico-sanitarias pertinentes, al no respetarse en todo momento la cadena de frío».