Un comisario español en Pesca o Comercio y más producto sin aranceles, prioridades de la conserva ante las elecciones europeas

Con el informe del Comité Científico Técnico y Económico de la Pesca (STECF) en la mano, que cifra en 5,7 billones de euros en el 2021 el valor añadido bruto de la industria del pescado europea, con España acaparando el 31 % y la conserva ocupando en un lugar destacado como segundo operador mundial, Anfaco se ve en disposición de presentar sus demandas a quienes ambicionan tener un escaño en el Parlamento Europeo. Reivindicaciones que se resumen en un decálogo, que aparece encabezado por la necesidad de promover a un español como comisario con competencias en Pesca o Comercio que, por un lado, garantice la igualdad de condiciones y la competencia leal de la industria, y al mismo tiempo, autorice la importación de más materias primas esenciales libres de aranceles, como lomos de atún, anchoa, bacalao en salazón, calamar patagónico o gambón argentino, esenciales para las fábricas españolas.

Desarrollar normas de información al consumidor para impedir que los productos en base vegetal imiten productos pesqueros, finalizar el estudio sobre etiquetado nutricional voluntario para atajar sistemas con sesgos como el Nutriscore y abrir el debate sobre el papel protector del selenio frente al mercurio promoviendo el consumo de productos pesqueros.

Implementar el certificado electrónico CATCH contra la pesca ilegal, actualizar el reglamento que impide a la pesca acceder a los Next Generation y revisar el concepto de pyme son otras de las demandas, junto a frenar acuerdos comerciales que propicien la entrada de productos de terceros países con estándares más bajos y asegurar que la lucha contra el trabajo forzoso cuente con canales de participación para la industria pesquera cierran las inquietudes.

Esta relación de exigencias serán trasladadas estos días por Anfaco a los candidatos Francisco Millán Mon y Nicolás González-Casares se suman a las que ya han tenido con otros grupos y con las que espera concienciar sobre las necesidades de la cadena mar-industria con el objetivo de que sean incluidas en la agenda europea del próximo ciclo institucional 2024-2029.

El secretario general de la patronal conservera, Roberto Alonso, señaló que lo que necesita el sector es «generar valor añadido y fábricas innovadoras en Europa con aprovisionamientos globales de pescados y mariscos, a fin de asegurar la influencia internacional de la Unión Europea en tanto a su política pesquera común y defensa de las cuotas asignadas a la flota comunitaria».

Añadió que «la presentación del decálogo para la competitividad persigue transformar la estrategia seguida por el Parlamento y la Comisión en el periodo 2024-2029, que ha adolecido de una defensa enérgica de los intereses económicos europeos hacia su propia cadena mar-industria, sustento de un alimento nutritivo y garante de la dieta mediterránea».

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