Bruselas no ha respondido a la petición de prórroga del protocolo hasta que finalice la tramitación del nuevo acuerdo
12 jun 2024 . Actualizado a las 04:46 h.Los barcos cefalopoderos gallegos, al igual que el resto de españoles y comunitarios que operan en Guinea Bisáu, tendrán que abandonar el caladero a partir de la medianoche de este viernes para el sábado, cuando expira el acuerdo de pesca vigente entre dicho país africano y Bruselas. A pesar de que se había solicitado una prórroga del protocolo actual a modo de puente entre este y la entrada en vigor del nuevo pacto, ya cerrado pero al que le falta la tramitación parlamentaria, no han tenido noticias al respecto y no creen que las tengan de aquí al día 15, por lo que tendrán que salir del caladero.
«No hay novedades. Los barcos abandonarán el caladero el 14 de junio a medianoche», lamentó el presidente de la Asociación Nacional de Buques Congeladores de Pesca de Cefalópodos (Anacef), Francisco Freire, en declaraciones a Europa Press.
Freire criticó que Bruselas no haya respondido a la reclamación, puesto que ahora «habrá que esperar a la ratificación por Europa del nuevo acuerdo y protocolo ya firmado». Son cuatro los arrastreros congeladores de su asociación los que operan en Bisáu. Además, hay más buques españoles en la zona que capturan otro tipo de pescados, como atuneros y marisqueros. En total, son cerca de una veintena de barcos de las flotas españolas de arrastre de marisco y de cefalópodos, peces y atuneros cerqueros congeladores los que trabajan en aguas de Bisáu.
Para Anacef, la alternativa pasa por desplazarse a Senegal o a Mauritania, ya que son otros de los países con los que la Unión Europea tiene tratado de pesca y suelen operar allí sus barcos. No obstante, en el primer caso, se está en un «momento complicado», debido a la tarjeta amarilla impuesta por Bruselas al país por su laxitud contra la pesca ilegal. Aparte de que a pesar de haber solicitado la licencia a Dakar y haberla pagado para el trimestre que acaba este mes, todavía no han recibido la autorización para faenar.
Por lo que respecta a Mauritania, el acuerdo exige la descarga del pescado en puertos del país africano. Anteriormente, los cefalopoderos enviaban el pescado congelado en contenedores hasta Canarias y, de ahí, a Galicia, pero esa ruta marítima regular se suspendió por problemas de la naviera y no hay forma de enviar a Las Palmas las capturas. Por eso reclaman poder descargar en puertos extranjeros, como Dakar, para poder canalizar el pescado hacia las Canarias.
En este panorama, los cuatro barcos se quedarán sin caladero en el que faenar