Al menos nueve muertos, dos de ellos gallegos, 4 desaparecidos y 14 rescatados en el naufragio de un pesquero en Malvinas
SOMOS MAR
Entre los 27 tripulantes del Argos Georgia había diez españoles, de los que ocho eran gallegos; cuatro han sido rescatados con vida, dos están desaparecidos y otros dos han fallecido. Las malas condiciones del mar y la posición tan alejada de la costa, a 170 millas, dificultan el operativo de rescate. Una armadora que auxilió al Pitanxo participa ahora en las labores de rescate al este de las Malvinas
24 jul 2024 . Actualizado a las 11:20 h.El naufragio de un pesquero anglo-noruego con amplio pasado gallego (fue de la armadora Pereira) mantuvo este martes en vilo a Galicia, todo el día pendiente de las noticias confusas y a cuentagotas que llegaban desde el Atlántico Suroccidental, donde el palangrero Argos Georgia, con una tripulación de 27 personas, entre las que había 8 gallegos, se hundió tras sufrir una vía de agua en medio de una fuerte tormenta a unas 170 millas al este-sureste de Puerto Stanley, capital de las islas Malvinas.
Dos buques pesqueros que habían acudido en auxilio de los marineros —el chileno Puerto Toro y el gallego Robin M. Lee, de pabellón británico— recogieron tres cadáveres y a un superviviente de nacionalidad indonesia. Se habrían recuperado tres cadáveres más —por lo menos cuatro de ellos llevaban el chaleco salvavidas puesto—, pero las fuentes oficiales no aclararon en qué circunstancias fueron localizados. Además, una patrullera de las británicas Falkland, la FPV Lilibet, consiguió rescatar con vida a las 13 personas que se habían introducido en una balsa y que a esas alturas del día ya llevaban más de 15 horas vapuleadas por un océano que mostraba su cara más salvaje, con vientos de fuerza 7, olas de más de 7 metros y una temperatura ambiente de 4 grados centígrados. Entre estos supervivientes habría cuatro gallegos, entre ellos el capitán, el jefe de máquinas, el primer oficial y el segundo oficial. Una tercera balsa, a la que se supone que habían saltado el resto de los tripulantes, aún no ha aparecido.
Ocho gallegos
El ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, replicando informaciones de medios locales, señaló que la tripulación estaba compuesta por diez españoles, ocho rusos, dos uruguayos, dos peruanos y cinco indonesios. El delegado del Gobierno, Pedro Blanco, por su parte, apuntó que entre los diez españoles están el capitán del barco, el patrón de pesca, el cocinero, dos operarios de máquinas y dos observadores oceanográficos, un hombre y una mujer. Gallegos serían el capitán, José Saborido Rey; el primer oficial, Ramón Hombre, y el jefe de máquinas, Ramón García, todos de Ribeira y que se encuentran entre los supervivientes, igual que Francisco Gondar, segundo oficial y de Pontevedra ciudad.
De Ribeira también es Juan Antonio García Rey, que había embarcado por primera vez en el Argos Georgia para entrenarse y en breves fechas iba a relevar a un jefe de máquinas que está a punto ya de jubilarse. Este sería uno de los desaparecidos junto a Antonio Barreiro, segundo ingeniero a bordo y natural de Noia.
Entre los gallegos también está confirmado el patrón de pesca, César Acevedo, de Vigo, y el cocinero, Santiago Leyenda, de Baiona. A última hora del martes se confirmó que ambos estaban entre los muertos del naufragio.
El alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, manifestó este miércoles el pésame a las familias de los fallecidos y desaparecidos en el naufragio del Argos Georgia. Dijo que esta es otra tragedia que le recuerda al Villa de Pitanxo y que considera que habrá que extremar las medidas de seguridad. «Eu non sei se se pode faenar con ondas de oito metros, pero haberá que extremar as medidas de seguridade».
El regidor también explicó que habló con el delegado del Gobierno en Galicia, Pedro Blanco y que este le transmitió que en la tripulación del Argos Georgia había un único tripulante que era vecino de Pontevedra, Francisco Gondar, que está rescatado con vida y pendiente de llegar a puerto como los demás. El delegado del Gobierno también habló con la mujer de este tripulante para informarla.
Operación al límite
Las alarmas saltaron el lunes por la tarde, cuando la Autoridad Marítima de las islas Malvinas recibió información de que el Argos Georgia se encontraba en serios problemas a causa de una vía de agua que sufrió en medio de una fuerte tormenta, con vientos de 35 nudos y mar de fondo de entre 5 y 6 metros. Condiciones que fueron empeorando a medida que pasaban las horas y que impidieron salir a los helicópteros, que además deben operar muy al límite de su autonomía.
La última comunicación que se tuvo con el pesquero con bandera de la británica Santa Elena fue a las 21.00 horas (en España), cuando los tripulantes informaron de que iban a abandonar el barco y se introdujeron en tres balsas salvavidas, aunque una de ellas, según fuentes de Salvamento Marítimo, no estaba muy hinchada.
El Centro de Coordinación Marítima (MRCC) Falkland movilizó a los pesqueros que estaban en la zona, entre ellos el Robin M. Lee, barco de la armadora gallega Lafonia, que se encontraba realizando la campaña experimental del calamar en aguas malvinas y fue al rescate, y al chileno Puerto Toro. También envió medios aéreos y a la patrullera de vigilancia pesquera Lilibet.
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El Argos Georgia, propiedad de la empresa Argos Froyanes —una sociedad formada por la británica Argos y la noruega Ervik Havfiske— acababa de descargar en el puerto de la capital de las islas Malvinas y regresaba al caladero para retomar sus actividades de pesca dirigida a la merluza negra o róbalo de profundidad. Por el momento se desconocen las causas que provocaron la vía de agua que acabó llegando a pique a uno de los buques más tecnológicamente avanzados de la flota pesquera, salido del astillero en el 2018 y equipado con un «cinturón de hielo» de acero para navegar en zonas heladas como la Antártida.