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Falleció Olimpio Castelo, que llevó a lo más alto el mejillón de Galicia

Ana Lorenzo Fernández
A. Lorenzo RIBEIRA / LA VOZ

SOMOS MAR

Olimpio Castelo en una imagen de archivo junto a la playa de A Retorta, uno de sus rincones favoritos
Olimpio Castelo en una imagen de archivo junto a la playa de A Retorta, uno de sus rincones favoritos

Fue presidente de la Federación de Productores de Mejillón de Galicia y del consello regulador que consiguió la denominación de origen protegida para este producto

20 oct 2024 . Actualizado a las 19:41 h.

Luchó con uñas y dientes por la ría de Arousa, por los mejilloneros, por un trabajo por el que lo dio todo. Olimpio Castelo González nació en O Chazo (Boiro,1960) justo al lado del mar y, desde muy pequeño, no le quedó otra que continuar con el legado de su familia en las bateas. Comenzar a trabajar tan joven le dio la experiencia suficiente para conocer las necesidades reales de un sector complicado, y pronto quiso hacer oír su voz, primero como representante de los bateeiros de Cabo de Cruz, y más tarde sumando nuevos cargos a nivel de toda la comunidad gallega, puesto que llegó a ser presidente de la Organización de Productores de Mejillón de Arousa (Opmar), de la Federación de Productores de Mejillón de Galicia, (Fepmega), y del consello regulador de la denominación de origen Mexillón de Galicia.

«Nacimos en esto, vivimos de esto y queremos morir en esto. No entendemos que gente que no trabaja en las bateas pero manda en ellas nos amenace, solo buscamos nuestra supervivencia como sector y que el mejillón tenga un precio digno», defendía en una de las múltiples protestas que encabezó. De hecho, Olimpio Castelo no fue un hombre de quedarse callado, y siempre dio su punto de vista sobre todo lo que afectaba al sector, lo que le trajo más de un enfrentamiento con distintas Administraciones y entidades.

Uno de sus máximos logros fue conseguir la denominación de origen Mexillón de Galicia, un duro trabajo por el que luchó con su equipo durante años. De hecho, el primer paso se dio a finales de la década de los noventa, cuando se solicitó que el oro negro de las bateas fuera reconocido con el sello Produto Galego de Calidade, un distintivo que hasta entonces se aplicaba únicamente a los productos agroalimentarios de la tierra.

En diciembre del 2006, la Unión Europea hacía realidad uno de los sueños de Olimpio Castelo y aprobaba la denominación de origen protegida (DOP) Mexillón de Galicia, un broche de oro para una larga trayectoria defendiendo el sector.

Olimpio Castelo fallecía hoy a los 64 años y sus restos mortales están siendo velados en el tanatorio de Boiro desde donde partirán mañana lunes, a las 16.40 horas, hacia la iglesia parroquia de Santa María do Castro, para luego ser incinerados.