Armón bota en Vigo el oceanográfico para Holanda, diseñado para operar con metanol

Armón continúa cosechando hitos en Vigo y ahora suma la botadura del nuevo oceanográfico para el Instituto Real de los Países Bajos para la Investigación Marina. A primera hora de esta tarde, pusieron a flote el buque Anna Weber-van Bosse, bautizado así en honor a la científica pionera en el estudio de los arrecifes de coral nacida en Ámsterdam.

Es en las históricas instalaciones de Armón Vigo donde construyen el oceanográfico y ahora continuarán los trabajos en el agua. La nave mide 79 metros de eslora y entre sus particularidades destaca el diseño de su versátil sistema de propulsión. «El barco fue diseñado para ser neutro en dióxido de carbono en un plazo de diez años. El diseño elegido podrá cambiar al uso de metanol como combustible en el futuro, y el buque está en gran parte preparado para esta transición», explica Gert-Jan Reichart, responsable del departamento de investigación oceánica en el instituto holandés.

En sintonía con los intereses medioambientales que persigue el cliente, Armón también ha ejecutado un diseño en el que tienen cabida un paquete de baterías y otros sistemas que permiten ir integrando paulatinamente futuras fuentes de energía a la red eléctrica de a bordo. El objetivo, explica el responsable de Oceanografía en el centro holandés, es que el buque que se construye en Vigo sea todo «un laboratorio flotante».

La construcción del buque la lleva a cabo una plantilla de más de cien trabajadores y en el mismo participan siete auxiliares navales gallegas.

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