Patrocinado porPatrocinado por

Pesca podría dejar otra vez al arrastre sin merluza de un intercambio

E. A. REDACCIÓN / LA VOZ

PESCA Y MARISQUEO

PEPA LOSADA

España ha arañado 300 toneladas de la especien en un trueque con Francia

21 jun 2021 . Actualizado a las 04:45 h.

Llueve sobre mojado. Lo hizo con el intercambio que realizó con Portugal y, esta vez que ha hecho un swap con Francia, Pesca pretende volver a dejar fuera de la distribución del grueso de la merluza recibida a arrastreros que han capturado más del 60 % de lo que tienen asignado porque hay otros con un sobrante importante que hace que el consumo del segmento de flota en general se sitúe en el 35 %. Y de nuevo la organización Pescagalicia ha arremetido contra esa resolución que, espera, no se materialice, dado que consagraría un «trato discriminatorio» hacia algunos buques de la flota del censo de arrastre de fondo del Cantábrico-Noroeste, explica Torcuato Teixeira, secretario general de la entidad.

En esta ocasión, España ha hecho trueque con Francia para conseguir más merluza. Ha arañado 300 toneladas de esa especie. Cincuenta han sido obtenidas a cambio de 30 de rape del Cantábrico, un stock que, apunta la Secretaría General de Pesca, muestra un consumo global bajo prácticamente por todos los segmentos de flota. Con este no hay problema, porque se reparte entre quienes han puesto rape para el intercambio. Pero las otras 250 se han obtenido al cambiar especies que no están repartidas: rayas y bonito del norte, a razón de 50 y 300 toneladas -aunque en el caso del túnido se han perdido 220 al compensarlo con 80 del swap con Portugal-. Y en este montante está la disputa. Como marcan los cánones, el 40 % de las 250 toneladas de merluza se repartirán según los criterios generales, mientras que el 60 % restante (150) «se asignarán de manera lineal a los barcos y grupos de barcos con mayores porcentajes de consumo de su cuota de merluza sur y, por tanto, mayores necesidades de cuota de esta especie, y también teniendo en cuenta sus consumos constatados de los últimos años.

  

A juicio de Pesca, todas son deficitarias. Ahora bien, hay un segmento de flota, que es el arrastre, con buques que han transmitido temporalmente en el año más del 50 % de su cuota inicial, demostrando con ello que no tienen la misma necesidad de cuota de merluza sur que los buques que sí mantienen porcentajes de cuota inicial por encima de ese margen. Por contra, hay otras dos modalidades, como son el palangre de fondo y la volanta, con buques que ya han superado el 60 % de su cuota. Así, es entre estos barcos a los que propone repartir linealmente 150 toneladas de merluza.

Necesidad y dependencia

La discriminación de la que habla Pescagalicia es por partida doble. Primero, porque ya quedaron excluidos del reparto del 60 % de la cuota de Portugal. Y porque no se tiene en cuenta que hay unidades que sí pescan su cuota, que no la intercambian, y que van por porcentajes de consumo en línea con volanteros y palangreros. Barcos que, recuerdan, estaban pescando hasta ahora caballa y han empezado a ir al bonito, por lo que no tienen tanta dependencia de la merluza.

Tampoco creen que se haya aplicado bien la normativa vigente, que incluye la reducción del esfuerzo en la ponderación. Y, mal que le pese, en ese aspecto el arrastre es un campeón. Un líder que, sin embargo, no se ve recompensado con merluzas. Así, Teixeira en las alegaciones hace ver que, para las parejas que necesitan más cupo, la especie supone un 25 % de su facturación, por lo que la dependencia está más que demostrada.

Además, la situación se complica, como admite la propia Secretaría de Pesca, porque no se permite la flexibilidad interespecies; y el arrastre, como pesquería mixta que es, corre mayor riesgo que otras de estrangulamiento.