Comprarlo en lonja sale un tercio más barato que en el resto de España, y en Galicia el precio medio ha caído un 20 % en los últimos doce meses
03 dic 2022 . Actualizado a las 05:00 h.Por primera vez desde que hay registros, la flota pesquera comunitaria no será rentable en este 2022 que encara su final. Combustible por las nubes y costes disparados han desatado lo que el Comité Científico, Técnico y Económico de la Unión Europea (Stecf, por sus siglas en inglés) define como una «tormenta perfecta» que pone contra las cuerdas al sector. Cuando las capturas continúan descendiendo por quinto año consecutivo, datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación revelan que el pescado se paga menos en las lonjas de Galicia y del resto del Cantábrico. Casi un tercio más barato que en el conjunto del territorio nacional, donde el precio medio para todos los productos en los primeros diez meses de este año alcanza los 3,28 euros el kilo, 1,04 más que los 2,24 del noroeste español.
Cerca de un 32 % de diferencia, por razones aún por explicar, pero lo cierto es que la tendencia se repite en el último lustro, con porcentajes similares. También llama la atención la menor subida de cotizaciones desde el 2018: un 21 % en el ámbito nacional y 13 % en las comunidades del norte, de donde salen cuatro de cada diez kilos de productos del mar comercializados en España.
Caen las descargas
Son parte de las cifras expuestas por Ignacio Gandarias, director general de Ordenación Pesquera y Acuicultura, en las últimas Xornadas de Pesca de Celeiro. Además de recordar que el Estado inyectó cerca de 50 millones de euros a la flota española para compensarla por sobrecostes, aportó datos que confirman la caída de descargas. Entre enero y octubre de este año en España rozaron los 339 millones de kilos, casi 136 de ellos en Galicia y el Cantábrico, donde se vendieron un 35 % menos que los 208 del 2018, un ejercicio en que se superaron los 522 millones de kilos en el territorio nacional.
Sumando los productos del mar comercializados en el país y los declarados por barcos de pabellón español en otras naciones, en los primeros diez meses de este año se superaron los 600 millones de kilos, por los que se pagaron 1.747 millones de euros. Queda por ver si al final del 2022 se alcanzarán los 738 millones de kilos del año pasado, aunque todo indica que se sobrepasarán los 1.874 millones de euros facturados durante todo el 2021.
El precio medio en Galicia cayó un 20 % en los últimos doce meses
Parece atenuarse la inflación en España, donde desde noviembre del 2021 hasta el mes pasado subió un 6,8 %, según el Instituto Nacional de Estadística. Pese a soportar la carestía del combustible y la escalada general de precios, a la flota le pagaron durante noviembre un 20 % menos que en el mismo mes del 2021 por los pescados y mariscos comercializados en las lonjas gallegas, según la plataforma PescadeGalicia. Del promedio de 4,24 euros el kilo del penúltimo mes del año pasado, en el de este bajó a 3,53.
Evidencia de la imposibilidad de repercutir los sobrecostes de producción, sobre todo porque la mayoría se venden en subastas a la baja, la merma de ingresos y rentabilidad de los pescadores no suele beneficiar a los consumidores finales.
Desde finales de febrero, cuando estalló la guerra de Ucrania que agudizó la escalada de precios, hasta esta semana, los precios medios en las lonjas gallegas evidencian que depende del producto. Por ejemplo, la almeja japonesa sigue casi igual, a poco más de 9 euros el kilo, antes de tasas e impuestos, o la bacaladilla, que ronda el euro, mientras bajaron, jurel (de 1,68 a 1,10), sardina (3,27 a 0,86) o nécora (20,72 a 16,88). Y entre los que subieron, el rape (de 4,90 a 5,59), la merluza (3,93 a 5,51), la meiga (4,41 a 5,22) o el pulpo (de 8,81 a 9,16 el kilo).
