Cotizó menos por San Xoán, a 4,30 euros de máximo en la lonja coruñesa, que por San Antonio, cuando superó los 7,5
24 jun 2023 . Actualizado a las 05:00 h.Para el cerco gallego, la temporada de la sardina tiene dos grandes hitos. Son el San Antonio, el 13 de junio, cuando la demanda repunta por las fiestas en Portugal, y el San Xoán, el 24, cuando las hogueras y el olor del pescado a la brasa toman Galicia. Pasadas esas dos fechas señaladas en el calendario, la flota valora un agridulce primer tramo de la campaña, en el que los bajos precios suavizaron capturas en abundancia.
Ayer la sardina cotizó menos que por San Antonio. En la lonja coruñesa se subastaron 100 toneladas a 2,09 euros el kilo de media, con un tope de 4,3 euros, cuando en los días previos al San Antonio, y debido a la menores capturas de entonces, exceptuando al golfo ártabro, el coste máximo se había elevado a 7,60.
Sucede que los barcos han capturado sardina mezclada, la grande con el «medianillo», lo que enfría los precios. «Unha vez a vendemos, a xente que a merca ten que procesala, separala e empacar para vender, o que rebaixa o valor comercial», explica Manuel Suárez, de la Asociación de Armadores de Cerco de Galicia (Acerga).
Dado el parón del jurel, básico para el cerco, bocarte y sardina «son as especies que están aguantando a frota», señala Suárez, que no obstante recalca que la abundancia del recurso es para felicitarse, ya que «está nunha situación biolóxica pletórica».
Lejos quedan épocas «coma os 90, nos que nunha noite descargáronse en Sada un millón de quilos de sardiña», pero las perspectivas son halagüeñas tanto para lo que resta de campaña, como para el futuro a corto plazo. Galicia, parece, ha recuperado la sardina.
«As de Malpica, A Coruña, Sada, Pontedeume... Foron historicamente frotas sardiñeiras. Desde que a biomasa se recuperou, agora están a dirixirse de novo, facéndoo dun xeito sostible, que se pode manter no tempo», concluye.