El programa «Espejo público», que conduce la comunicadora catalana, es líder en la franja matinal
05 oct 2008 . Actualizado a las 02:00 h.No quiere cantar victoria ni mucho menos ponerse laureles, pero lo cierto es que la periodista catalana y su Espejo público se han hecho con la franja horaria de las mañanas televisivas.
-Todo apunta a que se ha convertido en la reina de las mañanas.
-No, no, no. Yo no me considero reina de las mañanas ni de nada; es más, si algún día pienso que soy reina de algo, espero que alguien me llame la atención.
-Pues eso es lo que dicen las audiencias.
-Nosotros estamos satisfechos por los resultados obtenidos porque son fruto de un trabajo muy intenso. Tenemos un equipo de mañana, de tarde y de noche y es muy satisfactorio ver que lo sembrado está teniendo frutos.
-¿Entonces??
-Yo soy muy prudente y la verdad es que estoy contenta, pero sin compararme con nadie ni entrar en la batalla de las audiencias ni del liderazgo.
-Es inevitable, sobre todo cuando se comparte franja horaria con María Teresa Campos, Pepa Bueno o Ana Rosa Quintana.
-Yo siempre digo que la competencia nos hace mejores y que además en nuestra profesión es imposible acomodarse. Es muy importante saber que los otros también están haciendo un buen programa, pero yo a ellas las observo muy poco. No tengo tiempo.
-¿Nunca las ve en un programa grabado?
-No, a mí me da la sensación de que esa batalla, que no dudo tenga su interés, es más periodística que otra cosa. Yo me preocupo de hacer un buen producto y creo que lo estoy haciendo.
-¿Le gusta más presentar «Espejo público» que las noticias?
-Esto me encanta porque ese ritmo frenético del directo me gusta mucho. Mis compañeros y sobre todo Julián, el director, me llaman cocodrilo, en el mejor sentido de la palabra, porque yo soy una persona que me crezco en los imprevistos y me gusta vivir en esa vorágine.
-¿No le suben la autoestima los calificativos con los que la ensalzan en un medio como YouTube?
-¿Te lo vas a creer si te digo que no he entrado nunca? Yo entro en YouTube mil veces para rastrear noticias, pero jamás rastreo mi nombre. Soy muy pudorosa, lo paso muy mal con estas cosas e intento vivir al margen de lo que se diga de mí.
-¿Es poco vanidosa?
-En este caso no sé si es vanidad o cobardía; en cualquier caso, lo de espectacular es muy exagerado. Aquí todas pasamos un proceso de restauración. Y después de 45 minutos en el túnel de lavado, quedamos bastante presentables.
-¿A qué hora se levanta?
-A las cinco de la mañana. No están puestas las calles. El horario es muy duro.
-Dice el refrán que a quien madruga Dios le ayuda.
-Pues sí, la verdad es que sí. Mi frase favorita es, ''no llego, no llego''. Y luego siempre acabas llegando, no sabes por qué, pero llegas.
-Hablando de llegar, llegar a la cima es difícil, pero mantenerse lo es aún más.
-Eso es lo más complicado. Yo soy una hormiguita, una corredora de fondo. Siempre se me han dado bien los deportes de largo recorrido. No me gusta recrearme ni en los éxitos ni en los fracasos, pero bueno, poco a poco, con paciencia, dedicación y mucha energía, ahí estamos. Yo le echo mucho optimismo a la vida, creo que es lo mejor.