La actriz, que estaba deseando volver a trabajar en España, lo hará con la miniserie «Perdóname señor», de Telecinco
29 may 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Paz Vega vive en la piel de Lucía, una monja que protagoniza la miniserie de televisión Perdóname señor que estos días rueda en Barbate (Cádiz), un papel que ella, a la que le gustan «las cosas difíciles», está disfrutando.
«Estaba deseando volver a España», explica la actriz, que lleva diez años viviendo en Los Ángeles. En este regreso, de alguna forma, su vida guarda un paralelismo con Lucía, su personaje en la miniserie de ocho capítulos de Telecinco que protagoniza junto con Stany Coppet, Jesús Castro, Lucía Guerrero y Andrea Duro. En ella interpreta a una monja «intelectual» que, antes de afrontar un cambio en el destino de su congregación, decide volver a su pueblo (Barbate), para resolver asuntos pendientes.
Y encontrará a un pueblo devastado por problemas sociales, a su primer amor (Stany Coppet) convertido en el capo local y a su sobrino (Jesús Castro) en camino de ser un líder emergente del narcotráfico.
«Es una mujer compleja, con grandes dilemas. A mí me gustan las cosas difíciles. Sentí que en este papel había un reto», explica Vega, que dice que para interpretar a esta monja no ha tenido que visitar muchos conventos ni hacer una preparación especial porque toda su infancia la pasó en un colegio de religiosas.
Con guion firmado por Antonio Onetti (autor también de Amar es para siempre o Padre Coraje), la serie, cuenta la actriz, retrata el tráfico de drogas con la «normalidad» con la que se vive en la sociedad de Barbate.
La actriz cree que Perdóname señor cuenta una historia que «va a sorprender» y en la que el drama y la acción se van turnando. El rodaje, que se inició el pasado mes de marzo y culminará en junio, convirtió a la localidad gaditana en «un gran plató» en el que «todo es auténtico».
A Paz Vega le han pasado muchas cosas «positivas» en su carrera, pero tiene mucho camino por delante, un camino en el que tiene en mente producir películas sobre historias «reales» que le gustaría que se conocieran más, como una ubicada en los campos de concentración nazis con republicanos españoles.
Siente además que la industria española de cine no debe tener complejos: «Yo la veo muy bien, en España hay una industria solvente y muchísimo talento».