La reestructuración que acometerá el club podría afectar a alguna dirección de área
14 jun 2023 . Actualizado a las 05:00 h.Una vez que el máximo accionista del club parece dispuesto a darle una vuelta a la estructura del club, los diferentes directores de área se someten a los exámenes de junio. La recomposición del Deportivo podría no pasar solo por los esperados cambios en el consejo de administración, sino también en algún otro departamento.
El primer ejecutivo del club es David Villasuso. Aterrizó en la plaza de Pontevedra en plena pandemia, cuando Fernando Vidal era todavía presidente. Fue una decisión de Abanca, que quería tener un hombre de su confianza dentro. Pronto pasó a ser consejero y director general. Con la salida del anterior equipo de gobierno, asumió todos los poderes. En el club, apenas se mueve un papel sin su visto bueno.
Desde que se hizo con el mando de la entidad ha tenido muy cercano a Albert Gil. El catalán fichó por el Deportivo en el verano del 2014 para reconducir el fútbol base. Estableció los cimientos de lo que es en la actualidad la cantera. Pero Carmelo del Pozo lo relegó mediada la temporada 2018-2019, situando al frente de la formación al entonces secretario técnico, Ángel Becerra.
A partir de ahí sobrevivió en el club hasta la llegada de Fernando Vidal, que tras firmar a Fran lo ascendió a director de organización, puesto que sigue ocupando. Después de la salida del empresario marítimo de la sociedad, las desavenencias entre el director de fútbol base y el de organización llevaron a este último a dejar Abegondo y pasar a trabajar exclusivamente en la plaza de Pontevedra. Eso le permitió estar más cerca de Villasuso y poder influir en el director general.
Otro que en la actualidad está próximo al hombre de confianza del máximo accionista es Massimo Benassi. Su cargo es el de director de desarrollo de negocio. Está apadrinado por el consejero Carlos Cantó y se le encomendó, inicialmente, la elaboración y ejecución del plan de negocio del club, el control y seguimiento del plan comercial, mejorar la rentabilidad de las relaciones con los patrocinadores y colaboradores, así como coordinar el departamento de márketing con el resto de las áreas del club.
Una vez en la plaza de Pontevedra también se le vio muy cercano a David Villasuso e incluso uno de los nombres que suenan con fuerza para la dirección deportiva, Fernando Soriano, llegaría de su mano, ya que coincidió con él en el Ibiza. Según algunas fuentes, Benassi podría ganar peso en el nuevo organigrama de la entidad.
La dirección deportiva, sobre la que internamente se ha pronunciado el italiano, es uno de los puestos en los que más ahínco se está poniendo a la hora de cubrir, una vez que ya se hizo oficial que la secretaría técnica de las dos últimas temporadas (Carlos Rosende y Juan Giménez) no continúa.
Dentro del departamento del italiano está Ignacio Dopico, director comercial, labor que desempeña desde que Tino Fernández era presidente de la entidad.
De la etapa del fundador de Altia es también Gabriel Barrós, sobre cuya división, la de comunicación, existe más incertidumbre. De hecho, en el expediente de regulación que se llevó a cabo hace dos años se incluyó al jefe de prensa, que finalmente llegó a un acuerdo para quedarse a costa de rebajar enormemente su nómina. Así, ya hace tiempo que con el equipo no viaja ningún responsable de comunicación.
De esta manera, con mayor o menor lupa, en este obligado análisis que realizará el Deportivo en su estructura, los directores de área también serán examinados en las próximas semanas.