El extremo ha rechazado varias propuestas de equipos de la zona alta de Primera Federación, obstinado con jugar en A Coruña, donde reside parte de su familia
23 ene 2024 . Actualizado a las 19:58 h.Luis Quintero había pensado seguir en el Amorebieta. Tiene 19 años y acababa de dar un salto importante hacia Segunda División. No estaba contando demasiado para sus entrenadores, pero gozaba del cariño de la hinchada y actuaba con regularidad, pese a no ser titular (solo dos encuentros en el once inicial). Varios equipos punteros de Primera RFEF habían contactado con su agencia de representación, especializada en talentos emergentes, obteniendo una negativa al cambio de destino de este extremo cedido por el Villarreal. Todo el relato es pasado desde que el Deportivo apareció.
En A Coruña le han dado una vuelta a lo de incorporar otro jugador contrastado para su banda derecha. David Mella no está dispuesto a ceder la plaza en la que se ha asentado gracias a la testarudez de Imanol Idiakez, inmune a las preferencias del canterano por el costado izquierdo. La consolidación del de Teo, que no volverá al Fabril, independientemente de que una eventual salida de Pablo Muñoz le facilite la ficha del primer equipo, permite al club blanquiazul arriesgar con la alternativa. Se trata de incorporar a un sub-23 que sirva de alternativa en las rotaciones o en caso de lesión (Mella se perdió la mitad de la pasada campaña y ya ha causado baja en varios encuentros de la actual) y pueda quedarse en el equipo si su rendimiento convence.
Para conseguir esto último, es imprescindible incluir una opción de compra en el acuerdo de préstamo. De ahí que la operación para reclutar a Quintero no esté cerrada ya. La voluntad del futbolista es inequívoca: quiere pisar el césped de un Riazor donde acudió de niño como hincha, acompañando a su familia coruñesa, que aún reside en la ciudad. Obstinado en ello, no solo ha descartado a otros conjuntos mejor clasificados en la categoría, sino también otra propuesta de Segunda y dos más recibidas desde el extranjero.
Una vez se concrete la operación, entendiendo como irrenunciable la cláusula para adquirir en propiedad al jugador este verano, o al menos un alto porcentaje de su pase —la entidad blanquiazul dispone de otro par de opciones de jóvenes extremos por si no fructifica la negociación—, Idiakez contará con un nuevo zurdo con querencia al avance en diagonal desde la banda. Además de aprovechar su velocidad y notable golpeo de balón, este internacional en las categorías inferiores de Colombia liberaría así espacios para las frecuentes incorporaciones de Paris Adot.
En la hoja de servicios de Quintero no figura todavía el debut oficial con el primer equipo castellonense, pero sí un amistoso frente al Fenerbahce las órdenes de Quique Setién. También un viejo interés de la selección española por sumarlo a su combinado sub-19 (el futbolista nació en Alicante en el 2004, aunque su ascendencia es del país latinoamericano que aún representa). Entonces, el atacante brillaba (17 goles y 12 asistencias) en el juvenil del Villarreal que se midió al Dépor en la Copa del Rey del curso pasado, con espectacular triunfo para los de Manuel Pablo. Primera toma de contacto a pie de campo con ese equipo al que animó de crío y al que está deseando llegar.