El tabaco mata también la playa

VIGO

XOÁN CARLOS GIL

Reportaje | «Operación colilla» Varios colectivos iniciaron ayer una campaña en la playa de Fontaíña para concienciar a vecinos y turistas para que no dejen los restos de sus cigarros en los arenales

01 jul 2006 . Actualizado a las 07:00 h.

Las Autoridades Sanitarias advierten: «Fumar puede matar», como reza en cada cajetilla. Pues las autoridades medioambientales, así como colectivos ecologistas y entidades concienciadas con el cuidado del planeta Tierra, también advierten de los efectos negativos que el tabaco deja sobre los arenales de las playas cuando sus restos son abandonados por los fumadores. Ese es el objetivo de la campaña que desde hace varios años lleva a cabo en Vigo la Asociación Fontaíña, integrada por un grupo de veinte personas preocupadas por la salud de la naturaleza. Ayer realizaron su primera acción del verano con mala suerte, ya que la niebla que ahuyentó a los bañistas les impidió repartir los mil ceniceros de plástico reciclable que tenían previsto ofrecer a los usuarios de la playa de la Fontaíña. Sin embargo, la falta de sol no les impidió peinar el arenal con los palos con un colador en un extremo, con los que fueron recogiendo durante toda la mañana las miles de colillas que quedan en el blanco cenicero gigante. Es basura Según explica Eduardo González, coordinador de la iniciativa, hay dos razones poderosas para que los fumadores se lo piensen antes de dejar los restos de sus cigarros en la playa, al igual que no tirarían en el mismo lugar restos de comida: «primero, porque es basura, y segundo, porque es un desperdicio muy difícil de recoger. Sólo puede hacerse con máquinas tamizadoras, que se llevan toda la porquería, pero también se cargan la fauna de la playa». Por eso la campaña se lleva a cabo en arenales de gran valor como el de la Fontaíña (al lado de el Bao). La campaña divulgativa Operación colilla se enmarca dentro del proyecto «Parque Litoral de Vigo», impulsado por la Asociación Fontaíña con el objeto de recuperar y conservar las áreas del litoral que todavía albergan ecosistemas de gran valor natural, como es el caso de las dunas de la citada playa, -recuperadas en los últimos años, o del cabo do Mar, la marisma de Xunqueira do Lagares y Cocho das Dornas o Espedrigada, en Samil. Más ceniceros Para este proyecto, el colectivo ha contado con la ayuda de noventa voluntarios y la colaboración de Attitudes, iniciativa social de Audi para expresar su compromiso con el medio ambiente, y el Ayuntamiento de Vigo a través de la concejalía de Turismo. La marca de coches de gama alta aportó 3.000 euros, y el Concello doscientos, que aunque parezca poco dinero, a los miembros de la asociación les parece bien porque hay más proyectos en marcha y buena sintonía. Lo que sí consideran que siguen siendo insuficientes son los mil ceniceros de playa, con forma de cono de helado, que la gente debería llevar siempre en su bolsa, junto a la toalla y el bronceador. «Habría que repartir muchos más -dicen-, pero, bueno, es una experiencia piloto que esperamos que vaya a más». Los expertos recuerdan al público que la colilla del tabaco es uno de los residuos sólidos más antihigiénicos y que más influyen en la contaminación del litoral y en la salud de los usuarios, además de presentar enormes dificultades de recogida para los medios técnicos actuales. Cómo participar Para participar en iniciativas como ésta, la mejor forma de hacerlo es acudir a la Oficina de Voluntariado del Concello, ya que desde allí se coordinan y organizan las actividades con diferentes colectivos poniendo a su disposición grupos de voluntarios medioambientales. Además, se han programado diferentes talleres de educación ambiental, entre los que destaca uno dedicado a la recogida de semillas por el litoral de la ría de Vigo, que se llevará a cabo el próximo mes de agosto.