La compañía La Cubana celebra sus 25 años de historia revisando una de sus obras más exitosas y sorprendentes
26 jul 2007 . Actualizado a las 11:17 h.VIGO | La compañía de teatro La Cubana celebra sus 25 años de actividad con una revisión de Cómeme el coco, negro, uno de sus espectáculos más emblemáticos, que rinde homenaje a todas las compañías ambulantes que hacen posible que el teatro llegue a todos los rincones del mundo y por otro lado, hace referencia a un género teatral muy maltratado y casi extinguido: el mundo de la revista, el music-hall y las varietés. Tras su paso por A Coruña y Pontevedra, la gira llega hoy a Vigo. El Centro Cultural Caixanova acogerá las representaciones que comenzarán hoy, con una función a las 21 horas; y seguirán mañana y pasado con sendas actuaciones a las a las 22.30 horas. Las entradas cuestan de 12 a 18 euros y hoy se pueden comprar en la taquilla del teatro en horario de 11 a 14 y de 18 hasta media hora después del comienzo de la función. En Cómeme el coco, negro, la compañía Teatro Cubano de Revista, compuesta por artistas en el penúltimo escalón de su vida profesional, representan un espectáculo que lleva por nombre Cómeme el coco, negro. A partir de ahí, ya no se puede explicar más. Todos los espectáculos de La Cubana tienen secreto y éste también lo tiene. Los que ya lo vieron en su día (la obra se estrenó en 1989), saben de qué va y saben también lo importante que es mantener el secreto (forma parte del espectáculo), para no chafar a los que no la han visto antes. Es mejor que no sepan nada, aunque en algunos casos hubiera sido mejor avisar. La Cubana guarda entre sus anécdotas numerosas protestas airadas por parte de espectadores que se sorprendieron tanto que casi los denuncian. La Cubana fue creada enn 1980 en Sitges por Vicky Plana y Jordi Milán (actual director), con vocación amateur, y profesionalizada en 1983. Actualmente una de las más prestigiosas en el género de la comedia. Se trata de una formación coral, con un gran número de actores que hacen de todo: actuar, coser los vestidos, pintar el escenario, montar, cargar o descargar. Son artistas que conciben su trabajo como un todo y, a pesar de la profesionalización a la que han llegado, nunca han querido perder el espíritu de las pequeñas compañías en las que el divismo es una de enfermedad. En todos sus montajes siempre hay unas constantes: el juego, la sorpresa, la transgresión de espacios y, sobre todo, unos personajes hiperbólicos e histriónicos, y la participación del público, que siempre desempeña un papel protagonista. Corbacho y Millán Los mayores éxitos de la compañía que actúa tanto en castellano como en catalán, fueron Cómeme el coco, Negro, de Jordi Milán, en 1989, y Cegada de Amor (1994). Estas obras dispararon la fama y el prestigio de la compañía, les abrieron las puertas de escenarios de todo el mundo, y las de la televisión. La Cubana fue la compañía en que debutaron actores hoy reconocidos en toda España como Santi Millán (Siete vidas) o José Corbacho (El show de Buenafuente).