Dos meses después de caer lesionado Jaime Silva vuelve para guiar con su anotación al Gestibérica en la recta final de la temporada. El cañonero luso jugó por última vez el 11 de enero ante el Espluges y a continuación tuvo que parar por un fortísimo esguince de tobillo que lo tuvo parado hasta la semana pasada. En los últimos días ya entrenó con el equipo y ahora se ve «para unos diez minutitos» para la contienda de mañana (20.30 horas, As Travesas) ante el Cajasur de Córdoba.
Silva confirma que la evolución es positiva, pero tampoco engaña al apuntar que todavía no está al 100%: «Simplemente puedo jugar un ratito. No estoy al 100% porque además al estar tanto tiempo parado al comenzar a entrenar he sufrido una pequeña tendinitis». Su intención es estar a tope en el plazo de dos semanas.
Silva lo ha pasado fatal a lo largo de este tiempo. Pasó de ser la referencia del equipo en la anotación a convertirse en animador de banquillo. Desde allí por ejemplo vivió la eliminación copera. «Me fastidia mucho no poder ayudar. Es muy fastidiado ver que no estás bien pero aquí lo importante es el equipo y el objetivo del ascenso está intacto».
El portugués sostiene que su equipo sigue siendo el líder de la LEB 3 aunque la jornada de descanso le haya relegado al tercer puesto con las mismas victorias que el Molinense y Archena pero con un partido menos. «A nosotros nos vino muy bien descansar, porque la gente apenas había tenido tiempo de recuperar después de la Copa. Nosotros seguimos de primeros porque los demás tendrán que descansar un partido y nosotros ya lo hemos hecho».
Silva está convencido que el Gestibérica será el equipo que en mayo logre el ascenso directo «porque estamos en el camino del ascenso. Veo al equipo francamente bien».
Después de muchas jornadas Tito Díaz podrá contar mañana con todo el plantel para el retorno liguero ante un Cajasur que apura sus opciones para meterse en el primer play off por el ascenso.