Otra de las sorpresas de ayer en Casa Celta fue la baja de Michael Gafoor en el filial. El defensa central que llegaba la pasada temporada al Celta B procedente del segundo equipo del Zaragoza, comenzaba esta pretemporada a las órdenes de Paco Herrera y con muchas posibilidades de quedarse en el primer equipo si convencía al entrenador.
La intención del club era que, con el descarte de Sergio Ortega, Gafoor se convirtiese en el cuarto central de la plantilla, en el sustituto de Jonathan Vila como defensa diestro si el de O Porriño tenía algún contratiempo a lo largo de la temporada.
Sin embargo no convenció a Paco Herrera y después de la semana de concentración en Melgaço bajó al filial, el equipo con el que tenía ficha. Su puesto lo ocupó Soto, un jugador juvenil, que pasó a jugar varios amistosos con el primer equipo.
Todo apuntaba a que Michael Gafoor acabaría jugando una temporada más con el filial en Segunda División B, pero le ha surgido la oportunidad de jugar en Segunda División, al recibir una oferta del Guadalajara de Carlos Terrazas, equipo recién ascendido a la categoría de plata, por lo que llegó a un acuerdo para rescindir su contrato con el Celta.
El club vigués se reserva la opción de recuperarle al final de la presente temporada, en la que podrá demostrar si es un jugador válido para Segunda.
Pero lo cierto es que la vida de Gafoor ha dado varios giros curiosos a lo largo del verano. Ha pasado de posible jugador del primer equipo del Celta a descarte en el equipo filial, es decir a no contar para el club vigués. A pesar de todo, ve cumplido su sueño de formar parte de una plantilla de Segunda División, aunque en Vigo al final se queden sin central derecho.