Uno de los administradores concursales encontró un «agujero» de 64 millones de euros
11 jul 2013 . Actualizado a las 11:27 h.Una sentencia determinará si el concurso de acreedores de Barreras fue fortuito o culpable. El expresidente de la entidad, Francisco González Viñas, y su antiguo director financiero, Fernando Vilariño, se han sentado esta mañana en el banquillo del Juzgado de lo Mercantil de Vigo para rendir cuentas sobre sus últimos años de gestión al frente del astillero. El fiscal pide para ellos tres años de inhabilitación, al considerar acreditadas irregularidades contables. A la acusación también se ha sumado la empresa armadora Fernández Tapias, que días antes de la entrada en concurso aportó un millón de euros para la construcción de un barco, sin un conocimiento real de la situación económica de la empresa. La Fiscalía llamó como testigo a Carlos Mantilla, uno de los administradores concursales, que se negó a declararlo fortuito, al descubrir un «agujero» de 64 millones de euros que desaparecieron de una de las cuentas de la empresa.
Viñas aclaró por su parte, que la mala situación económica de Barreras obedeció a las pérdidas ocasionadas por la construcción de tres barcos, así como a la suspensión de las ayudas del «tax lease».