No sirven para nada

VIGO CIUDAD

13 nov 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

En su incansable afán por embellecer la ciudad, el Concello de Vigo pretende ahora cargarse los pasos elevados de Coia. Alguien piensa que sobran. Voces municipales con peso específico opinan que son «un adefesio». Semejante argumentación serviría para acabar con Vigo entero, pero ese ya sería otro debate. El tema ahora, es otro, el asunto es que de repente, alguien se levantó una mañana con espíritu destructor. El que tuvo la idea debió sentir una profunda inquina hacia tres pasarelas que cruzan la avenida de Castelao sin tener que atravesar la carretera ni esperar semáforos. O a lo mejor, no. Puede que lo que moviese su iniciativa fuese la crisis. Ya que no hay construcción, habrá que promocionar la demolición. Además de opinar que son un adefesio, el otro argumento de peso para eliminarlos es que «no sirven para nada». Según esto, también podríamos liquidar todo elemento ornamental que puebla nuestras rotondas, y todas las esculturas, y toda pieza estética sin finalidad concreta. ¿El Sireno? Fuera, no sirve para nada. ¿Los caballos de la plaza de España? A por ellos, no sirven para nada. Y así hasta el infinito... Bueno, hasta el infinito, no. Habría que parar al llegar a la cruz de O Castro, porque sí que es muy útil, y es tan hermosa... que se me llenan los ojos de emoción como paseando por Florencia.

Los pasos elevados de Coia pueden que sean feos, todo es opinable. Hay quien quiso en su momento frenar las ansias de Eiffel con su torre parisina. Los artistas la veían como un monstruo de hierro. Lejos de comparaciones odiosas, estas pasarelas forman parte de la identidad del barrio y no se ha visto movimiento vecinal en su contra. Sí se vio a favor de los árboles, pero el Concello hizo caso omiso. Entonces, déjenle a la gente anunciar sus bodas tranquilos, hombre. Con la de cosas que hay que hacer...

begona.sotelino@lavoz.es