«Mi hijo vivió un infierno en esa casa», cuenta entre sollozos la madre del menor que denunció abusos de su padrastro

E.V.Pita VIGO

VIGO

El acusado se declara inocente y alega que solo jugaban al caballito

06 abr 2016 . Actualizado a las 11:58 h.

El padrastro vigués acusado de abusar sexualmente de su hijo pequeño se declaró inocente y aseguró que lo único que hacían era jugar al caballito en su casa sin ninguna malicia y sin que hubiese mordiscos ni tocamientos. Aseguró que la convivencia con la madre, de origen rumano, se deterioró y la progenitora le prohibió a su hijo que hablase con el padrastro. Tras un cruce de denuncias, el matrimonio se divorció y el padrastro perdió la custodia por las denuncias que cayeron sobre él por pederastia por supuestos abusos al menor desde que tenía entre 6 y 9 años, lo que él niega. 

La madre, entre sollozos, replicó que su hijo no quería jugar con el padrastro porque lo llenaba de «mordiscos, chupones y babas» pero ella hacía la vista gorda porque quería tener un matrimonio feliz. En el juicio, la progenitora se derrumbó por no haber creído a su hijo a lo largo de cuatro años: «Él vivió un infierno en esa casa». No se sintió con fuerzas ni para leer el informe forense del que acreditaron que todo lo que contaba el menor era cierto.

Hubo un momento de tensión cuando la madre se dirigió a unas personas sentadas en el público a las que acusó de reírse mientras ella declaraba: «Ojalá tengáis un hijo y paséis por lo mismo que he sufrido yo». El presidente del tribunal le llamó la atención y le pidió que guardase compostura porque el acusado se enfrenta a doce años de cárcel por un delito muy grave. La madre también se encaró con la abogada del exmarido.

Está previsto que el menor, que ahora tiene 13 años, declare a puerta cerrada.