El Coro de Cámara Rías Baixas comienza la temporada este fin de semana en Barcia de Mera
14 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.El Coro de Cámara Rías Baixas, que dirige Bruno Díaz, regresa este sábado a la actividad con un concierto en el IX Ciclo de Música Relixiosa de San Martiño de Barcia de Mera, en Covelo. La formación nació hace algo más de tres años.
-¿Cuál es el repertorio que llevarán a Barcia de Mera?
-Vamos con el Funeral para la Reina María, de Purcell, y el Réquiem, de Fauvé. Son obras muy conocidas y que atraen mucho público.
-¿Qué caracteriza al coro?
-Ser un formato de coro de cámara con pocas voces, pero compuesto por gente solvente para poder afrontar este repertorio difícil. En solo tres años y medio hemos logrado un repertorio que otros quizá tardarían más tiempo en consolidar. El perfil de los componentes también nos diferencia, aunque no somos ni mejores ni peores que otros.
-¿Cómo es ese perfil?
-Es una selección de cantores que tienen solfeo y son capaces de interpretar una partitura por sí mismos. Tienen técnica vocal y reciben clases habitualmente. El año pasado hicimos quince conciertos en once meses. Es un concierto cada tres ensayos, y eso pone nervioso a alguno.
-¿Varió la formación respecto al principio?
-Cuando nació el coro, pensé que con 16 sería suficiente, pero la realidad es que la gente tiene sus trabajos y no pueden afrontar fechas. Ahora, somos veinte cantores, cinco por cuerda para evitar las ausencias. Además, el coro también evolucionó en calidad y la gente que se mete ya no viene a probar, saben cuál es la exigencia.
-Dentro de unas semanas cantarán una ópera. ¿Cómo se prepara?
-En el mundo de la interpretación, una ópera es como una tesis doctoral, es un síntoma de madurez. No se puede hacer ópera si no has hecho antes muchísimas cosas. Además de la exigencia vocal, la ópera exige una preparación escenográfica y una memorización, que supone muchas horas de trabajo en casa. Nosotros también nos podríamos definir como un coro de ópera. Estoy seguro de que defenderemos bien Rigoletto y a ver si podamos repetir en otoño del 2018. Quién sabe si a partir de un coro de cámara podemos conformar un coro de ópera en el futuro.
-¿Requeriría la profesionalidad de los integrantes?
-Depende del perfil de los componentes. En el coro, yo hago una programación trimestral, pero al margen de esto, para la ópera, que tenemos gente que solo viene para ello, hago una previsión según la gente con la que cuento. Por ejemplo, llevamos desde principios de julio ensayando Rigoletto, pero la gente tiene la partitura desde abril. Esto favorece que haya gente que a veces, teniendo poca agenda disponible, si pueda comprometerse con el proyecto. De esta forma podemos afrontar otras óperas en el futuro.