El alcalde de Vigo, Abel Caballero, postula que la iluminación navideña de Vigo es «la mejor del mundo»
26 nov 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Las calles de Vigo ya tienen el brillo de la Navidad. Miles de ciudadanos siguieron ayer en directo desde la Porta do Sol la cuenta atrás del encendido de uno de los alumbrados navideños más espectaculares de los últimos años. El gigantesco árbol de 32 metros de altura y 22.000 kilos ubicado junto al Sireno deslumbró a los asistentes con sus 70.000 puntos de luz multicolores pasadas las siete de la tarde. Las voces en directo de Broken Piches ya habían animado el ambiente previamente, así como una estruendosa tirada de fuegos artificiales. Miles de familias que acudieron con sus niños pequeños no quisieron perderse ese momento, que se hizo tan esperado como una Cabalgata de Reyes.
Problemas técnicos impidieron que se encendiera la bola gigante de 14 metros de diámetro colocada junto a la farola de Urzaiz, pero una hora después del acto oficial ya lucía con todo su esplendor.
También hubo problemas en la calle Príncipe y en Velázquez Moreno y en algunas viviendas no tuvieron luz, pero se acabaron resolviendo. Técnicos de la empresa adjudicataria Ximénez estaban desplegados por el centro para comprobar el funcionamiento de las luces.
El alcalde, Abel Caballero, volvió a presumir ante la multitud de que Vigo tiene «las mejores luces del mundo». Cuando se dirigió a la multitud expresó su deseo de que los montes que rodean la ciudad se recuperen lo antes posible de los incendios. También quiso que las luces que ayer se estrenaron contribuyan a dinamizar la economía local, alentando las compras en las tiendas de la ciudad hasta el final de la temporada navideña.
En total son seis millones de bombillas led las que hay repartidas por toda la ciudad, además de otros ornamentos y de un belén en la Casa das Artes que ocupa cien metros cuadrados con 300 figuras.
Completan los motivos navideños un total de 885 arcos en las calles, más de un centenar de árboles naturales iluminados, tres árboles de gran formato y una iluminación especial en la Casa das Artes, la Casa Galega da Cultura. La instalación ha tenido un coste de 636.000 euros, que ha servido para extender las luces ornamentales a 400 calles y plazas de todo el término municipal.
Los vigueses se encontrarán además con 45 figuras con motivos navideños en el centro urbano así como un pueblo de Navidad al estilo de Laponia en la calle Príncipe. Constituye el escenario perfecto donde está instalada la caseta en la que Papá Noel recibirá a los más pequeños a partir del próximo día 2 de diciembre.