
El espectáculo solidario que se celebró en Caminha reunió en una sola noche los 16.000 euros necesarios para la prótesis
30 ene 2020 . Actualizado a las 05:00 h.El joven luso que enseñó a gallegos y a portugueses a coleccionar tapones estrenará antes de lo previsto su nueva prótesis mioeléctrica. Diogo Farinhoto, que nació sin una mano y que conquistó las dos riberas del Miño en su cruzada por acceder a una prótesis ortopédica ha vuelto a conseguir el pleno. Un total de 1.300 personas de Portugal y Galicia, llenaron el aforo del auditorio de Caminha en el que se celebró la gala organizada por el polifacético presentador y cómico Fernando Rocha, con el respaldo del gobierno local para recaudar fondos. Hacía falta reunir 16.000 euros. «Fueron 13.000 en entradas y el doctor Marco Baggini, que será quien le coloque la prótesis en Braga, ayudará para completar el total», confirmó la organización tras la celebración de un espectáculo que sobrepasó cualquier previsión. «No podemos estar más contentos. En una sola noche se ha reunido todo el dinero que hacía falta», explica entusiasmada la madre de Diogo y Martíns, el hermano al que anhela poder coger en brazos con su nueva prótesis. El club de fútbol Áncora Praia, en el que juega Diogo desde hace más de un año, puso en marcha también una campaña paralela de venta de camisetas que ha permitido sumar otros 795 euros a la causa.
Este espectáculo ha supuesto un reencuentro entre los cientos de personas de las dos riberas que coleccionaron juntas tapones para Diogo y que, a día de hoy, lo siguen haciendo para ayudar a otros muchos niños como él.
«Con esta nueva podrá coger objetos con la mano derecha y normalizar su desarrollo también en esta nueva etapa», explica la madre. Aquel «malandro que sabe facer as beiras», como lo presentó en Galicia su madre en el 2011, circula cada vez con más velocidad en su bicicleta por la pequeña parroquia de Gondar, en Caminha, y no pierde ocasión de jugar al fútbol. «Es un niño feliz, pero la prótesis asegura su crecimiento físico, postural y emocional porque afecta al desarrollo de todo el cuerpo», resalta esta luchadora madre, siempre pendiente de sus dos retoños.