El museo de las salinas de Rosalía de Castro hace aguas

María Jesús Fuente Decimavilla
maría j. fuente VIGO / LA VOZ

VIGO

M.MORALEJO

Un problema estructural provoca goteras en la planta superior

09 oct 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

La Salinae, situada junto al centro de salud de Rosalía de Castro y conocida popularmente como el museo de la sal, hace aguas. Desde hace unos días lo único que luce este museo en el escaparate son tres cubos de agua que recogen las goteras. No es el único centro cultural de la ciudad en esta situación. El Marco tiene también filtraciones de humedades.

Desde la delegación de la Xunta explican que de las dos plantas que tiene el edificio, las filtraciones solo afectan a la superior, en la que se sitúa un recibidor y un ascensor que baja a la salina. Se trata, según informan, de un problema estructural que se intenta atajar con labores de mantenimiento. En cualquier caso, dicen, «las filtraciones no afectan en ningún momento a la salina, ni a las visitas, al encontrarse en otra planta».

No es la primera vez que el Centro Arqueológico del Areal Salinae luce cubos de agua en sus instalaciones. Hace un par de años ya se vio en las mismas circunstancias, lo que indica que el problema no quedó resuelto de forma definitiva.

La Salinae pertenece e la Fundación Museo do mar, en ambos casos dependientes de la Xunta de Galicia. Pese a estar en el centro de Vigo y a su gran atractivo, no es de lo más conocido entre los vigueses y, menos aún, entre los turistas. En alguna ocasión ha llegado a tener cerca de seis mil visitas al año, casi la mitad que las registradas en el Museo do Mar. Muestra los secretos de la sal en la Galicia romana, en concreto entre los siglos I al III, una época en la que los romanos explotaban la ribera del Areal. Además, son las únicas salinas de evaporación solar más antiguas de esa época.

La Consellería de Cultura invirtió 1,4 millones en su puesta en valor, que se mostró al público hace poco más de una década.