«La gente está alarmada con el botellón, no quiere volver a padecer lo de los años noventa»
VIGO
Vecinos y hostelería reclaman filtros policiales para evitar las aglomeraciones
29 jun 2021 . Actualizado a las 01:02 h.El regreso de los botellones al Casco Vello y a la zona del Náutico preocupa a vecinos y hosteleros, en especial a los habitantes del barrio antiguo, que temen su rebrote. «La gente está alarmada con el botellón, no quiere volver a padecer lo de los años noventa», comenta Fiz Axeitos, portavoz de la asociación de vecinos Casco Vello. Temen que esta práctica siga prosperando, vaya a peor y vuelvan los tiempos en los que la población del barrio pasaba las noches en vela. A diferencia de la zona de Montero Ríos y de la plaza de la Estrella, donde el espacio es mucho más amplio, el problema en el barrio antiguo se agudiza por las calles estrechas y pobladas, de ahí que afecte más al vecindario.
«Al tema del ruido se suma el de la suciedad, cómo queda después todo, por mucho que vengan a limpiar, siempre quedan restos. En la puerta del local de la asociación tienes que echar calderos de agua para eliminar las meadas», indica el representante vecinal.
El hecho de que la calle más afectada sea Teófilo Llorente es achacado por los vecinos a algún local que tuvo «prácticas no muy aconsejables durante la pandemia» y ahora se están recogiendo las consecuencias. Otra calle en la que sufren el mismo problema, aunque con menores dimensiones, es Eduardo Chao.
En opinión de la asociación de vecinos, no se puede por un lado intentar atraer población al barrio y, por otro, provocar que la gente que vive de alquiler lo abandone por no adoptar medidas a tiempo. Tampoco entiende que se intenten controlar los botellones tarde, cuando ya se han formado y están participando en ellos cientos de personas, con lo cual resulta imposible que la policía pueda hacer algo, a no ser que sea con antidisturbios.
Filtros
Lo correcto, a su juicio, sería que se controlen las calles conflictivas antes del inicio. «Si filtras antes lo tienes controlado».
La entidad vecinal del Casco Vello tiene intención de presentar un escrito en el Concello de Vigo para solicitar la adopción de medidas antes de que sea demasiado tarde y el botellón se vuelva a enquistar, como ya sucedió en otras épocas.
También existe preocupación entre el sector hostelero, tan importante en ese barrio. «Es gravísimo no solo el hecho en sí, sino lo que trae consigo, como peleas. No solo perjudica al Casco Vello, también a otras zonas como la del Náutico y Montero Ríos; adoptaremos medidas conjuntas», comenta Juanjo Figueroa, presidente de la asociación Vigo Hostelería y Comercio. Recuerda que ya tuvieron una reunión con la responsable municipal de Seguridad y que ahora retomarán el tema. Tiene claro que no se puede dejar pasar y que hay que poner fin a este problema, que precisamente tiene lugar en algunas de las mejores zonas. «Hace 15 años ya hubo y los vecinos lo sufrieron», añade.
La ordenanza municipal contempla la figura denominada ZAS (zona acústicamente saturada), que mayoritariamente afecta a calles del Casco Vello y se puede ver indicada en señalizaciones. Sin embargo, en la práctica esta denominación, que se puso precisamente para evitar el ruido producido en buena parte por los botellones, no se cumple.