Javier Guerra recibe el respaldo de 300 militantes para su candidatura a presidir el PP de Vigo

VIGO

M.Moralejo

Se postula a la alcaldía si gana, tiende la mano a su adversaria y pone de relieve la experiencia de su equipo, donde hay diputados y senadores

28 nov 2021 . Actualizado a las 22:48 h.

El senador Javier Guerra ya se postula como candidato a la alcaldía de Vigo si gana la presidencia del Partido Popular en las elecciones internas del 18 de diciembre.«Estamos para eso, pero son tiempos diferentes. Ahora estamos en un congreso, pero luego estará la elección para candidato». Lo ha dicho tras recibir el respaldo de 300 militantes y simpatizantes en un acto celebrado este sábado a mediodía en las gradas frente al hotel Bahía, donde el precandidato ha celebrado un aperitivo con sus seguidores.«He estado apoyado por muchísima gente y estoy muy animado, muy positivo. La gente está convencida de nuestro proyecto y nos está ayudando. Hemos tenido un impulso moral muy importante».

Tras el acto ha empezado a reunir los 35 avales que necesita para presentar oficialmente su candidatura a liderar el PP local, un partido que teóricamente tiene 5.000 afiliados en la ciudad de los que solo unos 600 están al día en el pago de las cuotas, según Guerra, que son 36 euros al año. El senador y vicepresidente de la gestora local, de 57 años, y que lleva 39 militando en el centroderecha, ha señalado que «recuperar la alcaldía es complicado, pero hay que hacerlo con un equipo, no con individualidades». Su presentación ha reunido a todos los concejales del grupo municipal empezando por el portavoz Alfonso Marnotes y siguiendo por Teresa Egerique, Jesús Marco González y Patricia López Román. También ha estado a su lado la que fue su rival en el último congreso, después candidata a la alcaldía y compañera en el Senado, Elena Muñoz, y el diputado Diego Gago. Por lo tanto, todos los cargos electos del partido están con él.

En el evento Guerra citó, entre otros a veteranos militantes como Carlos Comesaña. También estaba en las primeras filas, y jaleando mucho, el que fue subdelegado del Gobierno, Antonio Coello, que entonaba gritos de: «¡Guerra presidente, presidente!». Entre los fans de Guerra había algunos que hacían una lectura casi religiosa de las elecciones insistiendo en que «el bien tiene que ganar al mal». Entre los asistentes se encontraban algunos presidente de distritos. También el que fue presidente de Nuevas Generaciones, Javier Dorado, que hoy ejerce como consultor en Madrid y compagina su trabajo para grandes empresas con la residencia en la ciudad. La presidenta de la gestora, Corina Porro, no se encontraba entre los asistentes por un sentido de fair play (es presidenta de la gestora local), según los allegados al candidato, pero sí se encontraba en el acto la que fue su jefa de gabinete en distintos puestos, Mapi Egea.

Guerra hizo un llamamiento a las nuevas generaciones (y también a las Nuevas Generaciones, las juventudes del PP, que enviaron a varios representantes) señalando que «si los jóvenes se alejan de la política la culpa no es de ellos sino del producto, que no les atrae» por eso «hay que cambiar y fortalecer el partido».

El precandidato tendió la mano a su adversaria en las elecciones internas porque «nadie sobra aquí». Y añadió: «Marta tiene todos mis respetos, desde luego. Nosotros presentamos un equipo desde abajo arriba. Estamos teniendo un discurso de integración y de más experiencia, con todo el respeto a la candidatura de Marta Fernández-Tapias», a la que de momento solo ha apoyado un cargo, Jesús Vázquez Almuiña.

Recordó el trabajo que se está llevando a cabo desde el Senado y el Congreso en defensa de Vigo con enmiendas a los presupuestos para traer la línea de alta tensión a Balaídos o la reducción de IVA para el pescado». Todo ello porque «Vigo no tiene que ser una esquina olvidada de España sino que tenga voz propia». De esta manera contrapone el Vigo industrial y pesquero al de las luces.«Queremos un Vigo que no se deslumbre y que no se olvide de sus orígenes», enfatizó.

Guerra señaló, tras el encuentro con los militantes, que no sabe si han prosperado las reclamaciones sobre el censo efectuadas por un grupo de afiliados que le son afines. Dijo que espera que vote el mayor número de personas posible.

El 2 de diciembre es el día limite para presentar los avales por parte de cualquier candidato. Se necesitan al menos 35 y Guerra confía en tenerlos de sobra.