Con menos de siete ediles, la oposición se quedaría sin herramientas clave para controlar su gestión: forzar informes del secretario, exigir plenos extraordinarios, presentar propuestas o contar con menos liberados y personal
09 may 2023 . Actualizado a las 05:00 h.Abel Caballero se ha marcado el reto de aumentar su número de concejales en la próxima corporación municipal de Vigo. Pasar de los 20 actuales a 21 de los 27 posibles lo ha considerado de manera reiterada como posible. Y más allá de que ese resultado significaría que el desgaste político no existe para él tras dieciséis años como alcalde, incrementaría con ese pequeño salto aún más su poder en el Ayuntamiento y restaría drásticamente la capacidad de control a la oposición.
Si la candidatura del PSOE obtiene esos 21 concejales, la oposición transitará el próximo mandato con seis, y ya no llegaría al número mínimo que requiere la Ley de Bases de Régimen Local y el reglamento del pleno de Vigo para que los ediles que no forman parte del gobierno municipal puedan ejercer mayor presión política. Un cuarto de la corporación, siete concejales en el caso de Vigo, es lo que la ley ampara especialmente, llegándoles a calificar como «minoría protegida», y de entrada les da la posibilidad de forzar la celebración de un pleno extraordinario, que se celebraría incluso aunque el alcalde no lo ordenase.
Esa herramienta que solo se podrá activar en la próxima corporación si la oposición cuenta con ese mínimo de siete concejales, sirvió hace dos años para abordar en el pleno el caso del enchufe de la cuñada de Carmela Silva.
El mismo número de ediles es necesario para reclamar un informe legal al secretario del pleno y al interventor, mecanismo usado en este mandato en varios casos urbanísticos y que puso de manifiesto que se habían concedido licencia municipal para dos edificios de manera irregular, o que el vial abierto en Cabo Estai para posibilitar la construcción de seis chalés de lujo no respeta el ordenamiento y derechos de terceros.
La minoría protegida que se otorga a ese mínimo de siete concejales en Vigo también puede exigir la comparecencia de la junta de gobierno local en el pleno para debatir su gestión, y lo mismo para presentar proposiciones de reglamentos y ordenanzas. Todo ello acabaría chocando contra la mayoría de gobierno, pero es la palestra que puede utilizar en una situación de mayoría absoluta la oposición, que además, si baja de su volumen actual podría perder sueldos y asesores. Ahora cuenta con un edil liberado el PP y medio Marea de Vigo, por diez dedicaciones totales el PSOE. Lo mismo respecto al personal de apoyo eventual, ahora con solo dos contratados que se reparten PP y Marea.
El candidato esquiva a los opositores de Beade y Bembrive
El alcalde de Vigo eludió ayer una concentración de vecinos de Beade y Bembrive que se habían dado cita ante el Círculo Cultural Helios para exigirle un encuentro en el que abordar el futuro del vial que el gobierno local pretende construir en la primera de las parroquias y la prolongación de la autovía A-52, que afectaría a la segunda. Abel Caballero adelantó la presentación de Patricia Otero como candidata a la alcaldía pedánea de Bembrive para evitar la protesta, tras haber celebrado por la maña otro acto en favor de la igualdad de la mujer. Los opositores de ambas parroquias se concentraron igualmente para hacer evidente su demanda y reclamar ser atendidos por el alcalde.