El PERTE de la automoción mantiene en vilo a más de 18.000 trabajadores de Vigo en su vuelta a la actividad
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VIGO
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Stellantis ha suspendido hoy el sistema 2 por falta de aprovisionamiento en los turnos de tarde y noche, volverá a la actividad en el del miércoles a las 14.00 horas
22 ago 2023 . Actualizado a las 23:16 h.Más de 18.000 trabajadores de la automoción viguesa han regresado hoy a la actividad tras las vacaciones del verano, y lo hacen con incertidumbre. El sector está en vilo por la adjudicación, o no, de las ayudas para implantar una plataforma en Stellantis para los nuevos coches eléctricos de pequeño tamaño. Ni el Ministerio de Industria ni el grupo aclaran si la planta de Balaídos opta a las ayudas. Otras compañías como Ford ya han dicho públicamente que han pedido los fondos.
El Ministerio de Industria dice que el procedimiento para adjudicar el Proyecto estratégico para la recuperación y transformación económica del vehículo eléctrico y conectado del coche eléctrico (PERTE VEC) es, por ahora, secreto y que no desvelará hasta mediados de septiembre qué empresas se han presentado. El año pasado, el Gobierno denegó las ayudas al primer PERTE del vehículo eléctrico al grupo de las marcas Peugeot y Citroën, que había presentado el proyecto tractor Aries. En su resolución, la Secretaría General de Industria afirmaba que la propuesta no había sido evaluada porque «no cumple la estructura mínima de un PERTE».
Después de este fracaso, Stellantis no ha aclarado si ha presentado esta vez otra solicitud para la fábrica de Vigo. «No lo sabemos y no podemos decirlo», aseguran fuentes de la empresa en la ciudad. De la nueva plataforma depende la fabricación no solo de futuros modelos, sino también la de miles de piezas por parte de toda la industria auxiliar que vive de Stellantis.
«El PERTE es algo que nos preocupa», admite el presidente del comité de empresa de Stellantis Vigo, Víctor Mera. También manifiestan sus temores Comisiones Obreras y UGT, así como la CUT y la CIG.
El Gobierno abrió el plazo para las solicitudes del PERTE VEC II el pasado miércoles y prevé habilitar hasta 559 millones de euros para incentivar la fabricación de vehículos eléctricos. Hasta el 15 de septiembre se pueden presentar solicitudes.
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Con esta incertidumbre, un total de 5.900 trabajadores de Stellantis volvieron ayer a la fabrica de Balaídos, que funciona ya con plena normalidad en tres turnos de trabajo. Junto a ellos se incorporaron unos 12.000 empleados de un centenar de empresas auxiliares que habían dejado de trabajar porque se dedican casi en exclusiva a producir piezas para el grupo francés. Santiago García, responsable de automoción de Comisiones Obreras, explica que «por cada puesto de trabajo en Stellantis se crean tres puestos en la industria auxiliar».
Suspensión
Un día después de arrancar con la vuelta al trabajo, la factoría ha anunciado que se suspende la actividad en el Sistema 2, el encargado de montar furgonetas y monovolúmenes, por falta de aprovisionamiento.
Fuentes de Stellantis han explicado que, «por causa de fuerza mayor, a consecuencia de la falta de aprovisionamientos», se ha suspendido la actividad de ese Sistema 2 en los turnos de tarde y noche de este martes y en el matinal del miércoles. La previsión es que pueda volvera a trabajar el miércoles a las 14.00 horas.
Cuarto turno
No todos los trabajadores del sector han vuelto al empleo. «Estoy esperando que me llamen», indica Pablo, empleado de la auxiliar Marsan, que asegura que le hacen contratos temporales. Anteriormente estuvo en la fábrica de Balaídos.
Será a partir del 16 de septiembre cuando se incorporen entre 600 y 700 personas al cuarto turno de fin de semana de Stellantis Vigo, que se va a cubrir con nuevas contrataciones y también con voluntarios que se cambiarán de turno al de fin de semana.
Aser Sanz, secretario general de UGT en la planta, señala que el convenio colectivo acaba a final de año y que el nuevo tiene que contemplar el nuevo escenario, de manera que vaya ligada la negociación con el plan industrial para los próximos años. Este plan está ligado a la consecución de ayudas para la cadena de valor del vehículo eléctrico.
Si no se consiguen esas subvenciones, peligra una línea de montaje de coches en la fábrica de Vigo, según CC.OO. Ahora se usa para el Peugeot 2008 (con buen respuesta comercial), pero no hay relevo previsto para este modelo.
Santiago García, responsable de automoción de Comisiones Obreras en Galicia, habla claro: «No sabemos nada de si se van a presentar al PERTE o no. En la empresa no dicen nada y nos tememos que Ford, que ya ha anunciado que va a pedir fondos, sí consiga las ayudas y nosotros no». Ese fabricante ya ha solicitado las ayudas estatales de la línea del Proyecto Estratégico para la Recuperación y la Transformación Económica del Vehículo Eléctrico y Conectado, en un momento en que la filial española de la automovilística registró 61 millones de euros de pérdidas en el 2022. Según confirmaron fuentes de Ford España, la solicitud de estas subvenciones es para mejorar sus instalaciones dedicadas al ensamblaje de baterías en Almusafes (Valencia). En la primera convocatoria del PERTE VEC, Ford, que se adjudicó inicialmente 106 millones para convertir la planta levantina en una fábrica estratégica en el futuro del coche eléctrico de la compañía, renunció a las ayudas porque que sus previsiones de producción cambiaron ya que ha dejado de hacer el modelo Ford Fiesta.
Vigo también tiene dentro del polígono de Balaídos una fábrica de baterías donde se montan las procedentes de China y que se envían a las plantas del grupo en Madrid y Zaragoza. Ford Valencia fue elegida por la compañía para la producción de una nueva plataforma de vehículos eléctricos dirigida al mercado europeo. En cambio, en Stellantis la elección de la planta para la plataforma small, de coches eléctricos pequeños y más baratos no está tan clara y eso preocupa a los trabajadores: «Hay 22 fábricas del grupo en Europa».