Más de 20.000 trabajadores de la automoción del área de Vigo se reincorporan con recortes en la producción

Luis Carlos Llera Llorente
luis carlos llera VIGO / LA VOZ

VIGO

M.Moralejo

La fabricación nocturna del Peugeot 2008 en Stellantis se reduce a la mitad al caer la demanda del SUV. Hay incertidumbre con la evolución de los eléctricos

20 ago 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Salió con la funda puesta y paso decidido, con cara animosa. Javier García es uno de los más de veinte mil trabajadores del sector de la automoción que han vuelto al trabajo. La reincorporación en su planta, la de Stellantis Vigo, y en toda la industria auxiliar llega con recortes en la producción. Una de las líneas de la planta de Balaídos reduce la actividad en horas nocturnas, según confirman el presidente del comité de empresa, Víctor Mera, y el responsable de Política Industrial de Galicia de Comisiones Obreras, Pedro Comesaña.

Mera expresado su deseo de que no haya nuevos contratiempos con los componentes. La falta de suministros siguió provocando parones puntuales en Stellantis durante toda la primera mitad del año. «A ver si no tenemos problemas con la falta de piezas», señala el representante del Sindicato Independiente de Trabajadores, mayoritario en el comité. En meses pasados, las empresas auxiliares no pudieron atender en tiempo y forma algunos pedidos por el contexto de guerras y problemas logísticos derivados de la escasez de transportes adecuados.

Este fin de semana se produjo la reapertura de la factoría de Vigo tras las labores de mantenimiento de las últimas semanas y ayer por la mañana tuvo lugar la incorporación del primer turno de ocho horas de mañana y los restantes turnos de tarde y noche. El sábado se incorporaron los primeros 750 empleados y el domingo lo hicieron unos 5.000 entre cadena de montaje, oficinas y otros departamentos. La producción prevista es de 2.000 vehículos diarios. Se hará en turnos de ocho horas de mañana y tarde y hasta ahora también en un turno entre seis y siete horas de noche, que se baja a cuatro horas en la línea que produce el SUV, el vehículo urbano compacto.

El trabajador Santiago García, delegado del comité de empresa de Comisiones Obreras, señalaba ayer que la fabricación de furgonetas «va bien», pero la incógnita es el nuevo modelo que va a sustituir al Peugeot 2008. La producción de este se recorta porque «hay signos de agotamiento y no sabemos aún si nos van a dar otro modelo que lo sustituya».

El regreso a la producción se hizo hecho en los tres turnos, pero en el de noche se han producido recortes. La cadencia de la línea 1 del Peugeot 2008 ha pasado de 55 vehículos a la hora a 27. «La jornada se ha reducido a cuatro horas por la noche en el sistema en que se monta el modelo urbano compacto. A pesar de hay menos trabajo, «hemos conseguido que no haya que despedir a nadie y que los que no hacen falta en esa cadena, porque hay menos producción y más tiempo de parada entre coche y coche, se han recolocado en otros puestos», explica Comesaña, responsable en Galicia de Política de Industrial.

Desde el Sindicato Independiente aseguran que existe el marco legal del ERTE para que, en caso de necesidad, la empresa pueda recurrir a él. «Solamente menos de cien trabajadores han entrado este año en ERTE porque hay otros mecanismos como a bolsa de horas», señala el presidente del comité de empresa. En momentos puntuales se hacen de más y compensan las que se hacen de menos.

Hay 25 empresas directamente dependientes de Stellantis Vigo y otras que trabajan para más marcas. En total, son 200 compañías (algunas de ellas pymes) que ayer volvieron al trabajo. Según Celso Carnero, miembro del comité de GKN, una de las auxiliares más importantes del sector, «han vuelto sobre 23.000 personas trabajadoras y seguimos con la incertidumbre del mercado, pues el cambio al vehículo eléctrico no está yendo al ritmo esperado y sigue generando muchas dudas en el sector y entre los consumidores se empieza a tener la creencia de que Europa se ha equivocado con la imposición de este cambio», señala este representante de la automoción.

A salir de su turno de ocho horas en Stellantis, Javier García explicaba: «El primer día me ha ido bastante bien. Llevo seis años en la empresa y estoy fijo. Llevo el control de calidad de los Toyota y me encargo de llevar los coches que van saliendo a los camiones de transporte para llevarlos al puerto o adonde tengan que desplazarlos». Día de vuelta al tajo, como para todo el sector.