La Xunta exige a Vigo y a O Val Miñor un plan contra las inundaciones

Pedro Rodríguez Villar
Pedro Rodríguez VIGO / LA VOZ

VIGO

Oscar Vazquez

El Gobierno autonómico actualizó su protocolo el pasado 28 de octubre

05 nov 2024 . Actualizado a las 21:12 h.

El pasado 28 de octubre, un día antes de que la dana desatará el desastre en Valencia, la Xunta publicó en el Diario Oficial de Galicia el nuevo Plan Especial de Protección Civil ante o Risco de Inundación en Galicia (Inungal). El documento «integra nuevos estudios de riesgo» tras una segunda revisión del plan que se aprobó en el 2001. Ahora se busca reducir el riesgo y prevenir los daños de las inundaciones en los concellos con más riesgo, para lo cual el Gobierno autonómico ha estudiado la situación de todos los municipios. Vigo y a los tres concellos que integran la comarca O Val Miñor, Nigrán, Baiona y Gondomar, están catalogados como ayuntamientos de riesgo medio, el segundo más alto de una escala de cuatro niveles. Esta valoración los obliga a elaborar un plan municipal contra inundaciones. Según la Xunta, ninguno lo tiene aún, aunque el de Gondomar «está en proceso de elaboración».

El Inungal recoge que los planes municipales establecen la organización y actuación de los recursos y servicios propios y que deben tener analizados, «como mínimo», los riesgos y la vulnerabilidad del concello frente a inundaciones, además de establecer una estructura y organización clara para poder desarrollar el plan correctamente con los grupos operativos que los lleven a cabo. Es decir, es un análisis municipal de riegos, recursos y actuaciones posibles ante una inundación en el territorio.

La Xunta cataloga a Vigo como un concello con una peligrosidad media-baja y un riesgo alto, lo que significa que en la zona inundable existe «una importante población con amplia actividad económica». Según el nuevo Plan Xeral, en la ciudad «existen zonas inundables de orixe fluvial asociadas ao curso do río Lagares dende o treito alto ata a súa desembocadura (16,27 kilómetros), e no río da Barxa ao seu paso por Sárdoma (1,34 kilómetros)». Estos lugares cumplen los requisitos para tener un riesgo alto, es decir, hay población y actividad económica en las zonas susceptibles de inundación como ocurre en la zona de Balaídos.

Por otro lado, Nigrán, Baiona y Gondomar representan una peligrosidad alta y un riesgo medio-bajo. Esta catalogación se corresponde con zonas que no presentan «un gran riesgo» (no hay mucha población ni gran actividad económica), pero que poseen unas características especiales que provocan que la «peligrosidad sea elevada» como puede ser una gran superficie susceptible de inundación o un tiempo de respuesta al problema prolongado. Estas catalogaciones también tienen en cuenta las mareas vivas y el fuerte oleaje en la costa durante los temporales.

M. MORALEJO

Recomiendan que otros ocho concellos del área también elaboren su propio proyecto

La Xunta no obliga, pero recomienda a Oia, Ponteareas, Redondela, Tomiño, Tui, Cangas, Mos y O Porriño elaborar sus propios planes contra inundaciones. Los cataloga como concellos con peligrosidad media-baja y riesgo medio-bajo. Las medidas que deben tener cuenta en sus actuaciones «son fundamentalmente de tipo urbanístico». Según el Gobierno autonómico, ninguno de estos concellos ha elaborado su propio plan. Esta situación no es una realidad exclusiva del área de Vigo: en la provincia de Pontevedra solo lo tienen aprobado Caldas de Reis, Cambados y O Grove. En toda Galicia solamente lo han hecho 10 de los 51 concellos obligados.

La Xunta destaca que el Gobierno gallego «también apoya a los ayuntamientos para que puedan elaborar o actualizar sus planes a través de la entrega de manuales de respuesta frente a inundaciones, una herramienta que les permite planificar las actuaciones en este ámbito».

Además, recuerda que el Centro Integrado de Atención a las Emergencias (CIAE) 112 Galicia mantiene actualizados los procedimientos de actuación ante alertas hidrológicas y meteorológicas.