Nació en Covelo durante la I Guerra Mundial, emigró a Alemania para trabajar en una fábrica de porcelana y se ocupó de su huerta hasta que las fuerzas fallaron
27 nov 2024 . Actualizado a las 20:20 h.Cuando Concepción Val Cousiño (Covelo, 1915) nació, el mundo estaba inmerso en la Primera Guerra Mundial. Fue un 21 de noviembre en lugar de Pencellos, en Maceira. Mientras el continente se desangraba, se recuperaba y volvía a sumirse en el caos con la Guerra Civil y la II Guerra Mundial, ella aprendió a trabajar en el campo. Ayudaba a su padre con el carro y guiaba a los bueyes que acarreaban piedras para la construcción de la central eléctrica de Maceira. El tiempo vuela y la semana pasada sopló las velas por 109 vez. Lo hizo acompañada de su familia, del alcalde de Covelo, Pablo Castillo, y de otros miembros del Gobierno local. Concepción ya es las 50 personas más longevas de España, la más mayor tiene 111 años.
Más de un siglo da para mucho. Concepción tuvo que dejar su Covelo natal en plena dictadura para encontrar una «vida mejor». A los 48 años, como tantas otras, emigró a Alemania para trabajar en una fábrica de porcelana. Allí estuvo doce años, hasta que pudo volver a casa. No se quería volver a ir y en el Concello recuerdan que «ata o último día que puido calcetou para toda a familia e prolongou ata o máximo posible a súa estancia en Maceira, onde tivo todo tipo de animais: galiñas, porcos, ovellas, vacas… e unha horta capaz de subministrar a todos os fillos e netos cada fin de semana».
Concepción ha visto decrecer y crecer a su familia. Es madre de dos hijos, Carmen y Valentín, tiene tres nietos, Silvia, Víctor y David, dos bisnietas, Sara y Alicia, y, también, reivindica como parte de su familia a su yerno Antonio y a su nuera Maria del Carmen. También «garda no seu corazón» a su hermano Sergio, que vive en Uruguay, y a su compañero de vida, Valentín, que murió hace unos años.