Peinador registró en dos años 14 incursiones indebidas en el área de operaciones
10 mar 2025 . Actualizado a las 13:15 h.La niebla es un fenómeno que condiciona la operatividad del aeropuerto de Vigo en más del 40 % de su actividad anual. El análisis efectuado para poner en marcha el 11 de junio la torre virtual y remota de Peinador, la primera de España y que sustituirá a la levantada junto a la pista, apunta a la niebla como uno de los factores que se deben de tener en cuenta a la hora de seguir los tráficos a partir de ahora a través de cámaras y no con visión directa.
En concreto, se advierte que el aeropuerto de Vigo sufre «presencia importante de nieblas 150 días al año de media», y en menor medida de tormentas, situación que se indica que no es muy recurrente, aunque en dos o tres veces por ejercicio se registran con «viento muy potente del mar».
La niebla y las bajas presiones son indicadas como motivaciones de «desvío puntual de vuelos y/o paralización de operaciones». Entre los riesgos que se describen pueden causar las nieblas en Peinador, se alerta de que en el escenario más grave podrían dar un QNH falso, nomenclatura que describe un valor incorrecto de presión atmosférica o en el altímetro de una aeronave, como también se alerta de hipotéticos riesgos de colisión contra el terreno.
Turbulencias
Peinador cuenta, en todo caso, con un sistema de ayuda a la navegación ILS de categoría III en una de sus dos cabeceras, la máxima en este tipo de herramientas y que permite aterrizajes en condiciones instrumentales y sin apenas visibilidad, lo que reduce la probabilidad de desvíos. La última vez que estuvo inactivo por trabajos de renovación de sus componentes tuvieron que ser desviados 165 vuelos de un total de 1.982 operaciones gestionadas durante las ocho semanas que duraron los trabajos.
La documentación que acompaña la recta final para la puesta en marcha de la torre remota subraya que las condiciones orográficas en las que se sitúa el aeródromo vigués generan turbulencias y provocan «muchos» aterrizajes frustrados. Se hace especial hincapié en el valle situado en la cabecera situadas en suelo de Redondela como localización del origen de la mayoría de las turbulencias, que pueden desencadenar aterrizajes frustrados por cizalladura, como se denomina a los cambios bruscos en la dirección o intensidad del viento en pequeños espacios, tanto en horizontal como en vertical, que desequilibran a las aeronaves en instantes tan críticos como lo son los aterrizajes.
Incursiones no controladas
La práctica auditoría a la que ha sido sometido Peinador antes del histórico cambio en el método de control al que va a ser sometido, revela que «se han producido sucesos relativos a fallos de equipos meteorológicos», que han impedido contar con los datos necesarios en algunas ocasiones.
Igual de delicada se hace constar que resultará con niebla el control de los movimientos que se puedan producir en tierra en la zona aire, donde se ubica la plataforma de estacionamiento de las aeronaves, la calle de rodadura, la propia pista y sus inmediaciones, dentro del vallado y detrás de la terminal de pasajeros.
Desde el 2022 el aeropuerto de Vigo ha registrado hasta 14 incursiones en su pista, cinco de ellas protagonizadas por personal de gestión del tránsito aéreo de Peinador, otras siete fueron causadas por distintos vehículos y una más por una persona. Todas ellas, aunque indebidas, se hace constar que no tuvieron impacto en la seguridad de las operaciones aéreas.
Personal de la torre de control ha realizado reuniones con los conductores autorizados para circular por el interior del aeropuerto, así como también se han llevado a cabo campañas divulgativas para concienciar de los posibles peligros.
El ILS II/III de la terminal viguesa entró en funcionamiento con un aterrizaje del socialista recién llegado al cargo. Dos años después se sabría que Iberia se resistía a utilizar el mecanismo antiniebla mientras Spanair, Air Nostrum y Air France solo desviaban vuelos ya en condiciones de extrema falta de visibilidad.