Ocho yacimientos sin protección en Redondela

Luis Carlos Llera Llorente
luis carlos llera REDONDELA / LA VOZ

REDONDELA

BRAIS MARTÍNEZ

El colectivo Alén Nos exige que el Plan Xeral blinde petroglifos y tumbas prehistóricas

15 jun 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Dibujan el futuro, pero ignoran el pasado de 6.000 años de un territorio fértil en vestigios. Los urbanistas que han planeado los próximos quince años de Redondela, un grupo de arquitectos catalanes dirigidos por Sebastián Jornet, no han tenido en cuenta la existencia, al lado de la ría de Vigo, de ocho conjuntos de petroglifos que se conservan en el municipio. Los de la Peneda de O Viso son algunos de los elementos históricos que han sido olvidados pos los redactores del documento urbanístico que está en exposición pública hasta la próxima semana.

Jornet está asociado con otros arquitectos, Llop y Pastor, y lleva cuatro años elaborando un documento que todavía no ha sido aprobado del todo. De momento solo es un borrador que, para los historiadores, deja mucho que desear. La asociación de defensa del patrimonio Alén Nós ha roto una lanza para que no se olviden de los ancestros y se blinden los yacimientos prehistóricos. Algunos sí aparecen consignados en el plan, pero otros muchos no tiene protección. Es muy importante, según los historiadores, que se reflejen para evitar que se hagan construcciones y muros en el ámbito de la protección de los restos arqueológicos. Si no aparecen en los documentos oficiales del planeamiento, los constructores pueden saltarse los límites del contorno de salvaguarda a la torera.

En el término municipal de Redondela hay multitud de yacimientos prehistóricos y destacan las mámoas que tienen 6.000 anos y los petroglifos de 4.000, señalan desde la entidad que tiene el asesoramiento del historiador y arqueólogo Xosé Couñago. El trabajo que hacen es importante, En Trasmañó, por ejemplo, a una altura de 340 metros y muy cerca del área recreativa del mismo nombre, se localiza un conjunto de cinco rocas adornadas con diferentes motivos milenarios. Este conjunto está cerca de una pasarela de madera para visitar la zona. Estuvo oculto durante muchos años y su conservación fue reivindicada por la asociación cultural Alén Nos, que dirigen Andrés Couñago y Gonzalo Balo. Sus denuncias sirvieron para que la zona fuese vigilada por la policía ante los individuos que usaban las pistas como circuitos de cuatro por cuatro. «Iso acabouse», dice aliviado Couñago

Ahora hay otros restos. Subiendo hacia la zona de O Viso está el lugar de Peneda, un sitio donde todos los años por estas fechas se lleva a cabo una romería con antorchas y un recordatorio de los antiguos ritos. En el Plan Xeral de Ordenación Municipal no existe una ficha específica para estos grabados, sino que los arquitectos redactores dicen que «no pudieron ser hallados». Los urbanistas aseguran que las coordinadas sitúan los grabados en la ladera suroeste del monte de Peneda y en varias referencias bibliográficas se habla de estos petroglifos. «Eses gravados perdidos foron atopados e dados a coñecer polo colectivo de senderismo La Séptima2 en 2020», recuerdan desde la asociación en defensa del patrimonio.

En O Viso también se echa en falta la consignación del petroglifo de Nogueira o Castrizán. Los dibujos están hechos en un pequeña piedra granítica en la que destaca una cueva pequeña de diez centímetros de diámetro en la parte superior. A su lado aparece un círculo con un punto central y un surco de salida. Este petroglifo se encuentra cerca de otras grabado, el de Pedra das Rodiñas.

Cambiando de parroquia, en Cedeira, se hallan los petroglifos de Bandariz que tampoco aparecen reflejados en el documento de ordenamiento del territorio. «Estes gravados rupestres son unha recente descuberta dun técnico de turismo do Concello de Redondela», explican desde Alén Nos. Están situados en el lugar da Formiga, en la cabecera de unas fincas y a pocos metros de la vía de ferrocarril.

Túmulo funerario dañado

También está proscrito el yacimiento de Negros y Alén Nos pone de relieve que la mámoa de Chan da Cruz, que es un importante túmulo funerario, no figura ni en el catálogo del plan básico de la Xunta ni en el Plan Xeral de Redondela. Su actual estado es lamentable porque solo se conserva la mitad del túmulo. Está situada junto a una línea de alta tensión en una encrucijada de caminos. Couñago dice que no sabe por qué los redactores del plan no han recogido estos elementos y muchos otros patrimoniales en el documento que tiene que ser aprobado de forma provisional.