Llevaron aire fresco a un deporte de rudas tradiciones e incluso han renovado la estética del boxeo. Son capaces de todo.
03 oct 2015 . Actualizado a las 12:30 h.Son los rostros del éxito. Pero no se trata de una gloria puramente deportiva. Es el triunfo de los valores. Estas son las chicas que te ganan por K.O., porque son ellas las que se han subido a un cuadrilátero a tumbar prejuicios. Y lo han conseguido. El boxeo ya no es lo que era gracias a ellas, que se han atrevido incluso a golpear la estética de un deporte tradicional donde los haya.
No fue sencillo, porque combatían contra el conservadurismo de una disciplina que solo ha aceptado oficialmente a las mujeres desde 1996. Desde ese mismo instante, incluso antes, Galicia se puso guantes a la obra. Y las boxeadoras gallegas demostraron que son capaces de ser diferentes y convertirse en las mejores. Cuando Chano Planas organizó el primer combate en 1996 entre las portuguesas Sonia Pereira y Sandra Gonsalves, la Federación Española se negó a reconocerlo. Antes, el boxeo femenino estaba prohibido. Ahora, está de moda.
La velada Terra de Loitadoras, que se celebrará el próximo viernes en A Coruña será un hito, lo nunca visto, la primera enteramente femenina en la historia de España. Y, de nuevo, Galicia y Chano Planas son pioneros. Entonces ellas tendrán nombres y apellidos y contarán sus historias. Ahora lo hacen para YES. La primera púgil profesional gallega, Marta Brañas, será cabeza de cartel en una noche en la que PlanasBox subirá al cuadrilátero a Alba Lady Snake Fajil, Estefanía Lacky Méndez, Montse Piraña Rey, Lucía Díaz Rogel, Ana Acevedo y Sara Piñeiro (que además es cantante).
También son protagonistas en el boxeo gallego las campeonas de España Judith Barbosa (pupila de Amoedo en Vigo) y Lorea Murgoitio (del Rebouras, donde también ha sido bronce nacional Rocío Suárez). El Boxing Club Cidade de Lugo, el CAMM Tae Box, el Luduxbox, el Stadium, el Azteca Box y el ITF de Noia (con Estefanía García Figueira bronce nacional en el 2013) son más ejemplos de que el pugilismo femenino gallego vive un momento dorado. Atrás quedan las que tuvieron que renunciar por falta de estructura.
Chano Planas explica que en PlanasBox entrena a casi medio centenar de mujeres. «Lo han conseguido, aunque es cierto que si había comentarios machistas eran escasos y más fruto de la ignorancia», afirma. «Ni son menos femeninas que el resto de las mujeres ni tienen profesiones diferentes. Es el mismo perfil de deportista que en cualquier otro deporte de combate olímpico. Son chicas a las que les gusta la acción, muy valientes y resistentes. Las admiro», zanja.
Montse Rey: «Hay que buscar siempre el lado positivo»
La vida siempre ofrece una mínima oportunidad y Montse ha sabido aprovecharla. Supo esperar con resignación los tiempos de flaqueza económica que le impedían practicar su deporte predilecto. Arrancó en el boxeo con 36 años de edad y doblando las sesiones de entrenamiento diarias. Aún conservaba su sueño de subirse a un cuadrilátero para un combate, pasó las pruebas federativas y obtuvo la licencia.
Sorteó una emigración de ida y vuelta a Suiza, traspiés personales y todos los obstáculos que se le pusieron por delante. Pluriempleada ayudando a una veterinaria, paseando perros, en la pescadería de Alcampo y en labores de limpieza, su nuevo reto es competir por su cuarto Campeonato de España, ya con 40 años cumplidos. Solo depende de la federación. Ella ha puesto todo lo demás. «Nadie se cree que estuve en tres colegios de monjas: Atocha, Oblatas y Adoratrices. Hice deporte tras superar ciertos problemas físicos que me acompañaron siempre, y al final acabé en el boxeo de la mano de los Planas. Me engancha la descarga de adrenalina y si puedo, seguiré vinculada a este deporte para siempre», explica. «Sé que hay preconceptos, pero nunca los hemos sentido. No me imaginaba en un Campeonato de España. Hay que buscar siempre el lado positivo», concluye.
Fany «Lucky»: «Quien piensa que es agresiva nunca la ha visto»
Chano Planas peleó para que Estefanía no pelease. Era tan dulce que le acabaron apodando Lacky (de Lacasito). Sin embargo, técnicamente es uno de los valores de futuro más firmes del boxeo gallego. La sucesora de Marta Brañas. Lo demostró en sus primeros campeonatos autonómicos: dos combates, dos K. O. Se quedó sin acudir al Nacional porque su nacionalidad caboverdiana se lo impedía. Su padre Antonio boxeaba en Portugal, adonde llegó desde su Cabo Verde natal. Burela fue el escenario en el que conoció a su madre Filomena y se fraguaron las raíces de la familia de Lacky en Galicia. También su hermano Miguel practica el pugilismo. Lacky buscaba actividad deportiva intensa y la encontró, para sorpresa de su progenitor. Ignora los comentarios sexistas que en ocasiones escucha. «Ciertos aficionados de hace muchos años tienen ese defecto, pero sobre todo proviene de gente que no conoce este deporte, que piensa que es agresivo, pero nunca lo han visto en directo como para demostrarse lo contrario», argumenta. «A mí me gusta porque me permite tener siempre un reto, superarme a cada momento», explica. Fuera del ring, trabaja en la cafetería Il Vía de Vilaboa, que pasa por servir unos de los mejores churros de la comarca coruñesa.