ELLOS TAMBIÉN SACAN PECHO El orgullo santiagués ya corre como la pólvora por las redes sociales, donde defienden a este banco como el más bonito del mundo. ¿Sus puntos fuertes? Mucho amor y una vista inmejorable de la catedral
27 ene 2019 . Actualizado a las 23:56 h.Ya teníamos el banco más bonito del mundo, el más romántico y hasta el más cuki. Hay casi un banco digno de ser admirado por cada zona, pero ahora es otro el que reclama una plaza en el ránking de los bancos más bonitos. De Galicia, del país y del mundo entero, que para eso tiene unas vistas privilegiadas a la llegada del Camino más internacional. Los santiagueses ya recorren las redes sociales en una espontánea iniciativa que está captando la atención de muchos. Las fotos y los selfis ante este banco del parque de la Alameda se están convirtiendo ya en obligadas y, por supuesto, en carne de actualización. Sí, estamos ante el banco urbano más bonito. ¿Sus bazas? Una impresionante panorámica de la catedral -con sol, la postal todavía gana más porque la tiñe de dorado- y su ubicación, en pleno casco urbano.
UNA HISTORIA DE AMOR
La historia que rodea a este banco tiene mucho que ver con el amor, y es que es el que rodea al árbol de los enamorados. «Cuenta la gente en Santiago que le llaman así porque, cuando se plantó, hacía falta dos personas para rodearlo», indica la guía turística Raquel Pombar, que es consciente de que a día de hoy el árbol ha engordado un poco: «Ahora ya es más bien el de la familia numerosa», reconoce entre risas. Pero no vamos a ser nosotros quienes le quitemos literatura al asunto. Cuenta la leyenda popular que, quien se quiera casar, tiene que darse una vuelta por este gigantesco eucalipto. Y algo de cierto debe de haber cuando su corteza muestra tantos nombres e inscripciones de parejas.
El árbol, situado en la parte final del paseo de los Leones, forma parte de una especie de mirador y con el paso del tiempo se ha convertido, debido a sus espectaculares dimensiones, en un atractivo turístico más de la ciudad. Se le calculan 120 años de edad, mide cerca de 40 metros y el diámetro de su tronco es de unos ocho. «As dúas árbores que destacan na Alameda son esta, nunha marxe, e outra que está no centro», precisa Diego Lama, presidente de la Asociación de Guías Turísticos de Galicia.
Por este banco verde y circular el trasiego de parejas es constante. También el de familias y turistas. «Es una de las mejores vistas de la catedral, por eso muchos guías recomendamos hacer una parada, ya que sabemos que les va a gustar. Lo cierto es que la foto típica de Santiago es la que se saca desde allí», añade Pombar.
Lo cierto es que la Alameda está llena de rincones con historia. Como el llamado banco de los enamorados que, al contrario de lo que pueda parecer, no es del que estamos hablando. Se trata de uno de piedra, con forma de semicírculo, con una sorprendente capacidad de transmisión acústica de un extremo a otro gracias a su diseño, su ubicación y su orientación. Una particularidad que, dice el anecdotario popular, las parejas aprovechaban para contarse secretos sin estar físicamente juntas, y es que eso de tener una cita antes de casarse no se estilaba a principios del siglo XX. «Moito segredo non podía haber porque, se estás preto, oes», cuestiona Lama.
Pero en el nuevo banco más bonito no pasa esto. En él sí son bienvenidos los achuchones, los besos y los selfis bajo el árbol del amor. Mientras tanto, la catedral observa al fondo y la ciudad saca pecho. Loiba, cada vez tienes más competencia. Aquí hay pique para rato...
OTROS ASIENTOS DE RÁNKING
1. EL MÁS ROMÁNTICO. San Sadurniño
Sí, el banco más romántico (con permiso del de Santiago) está en San Sadurniño. Estos novios, Miguel y Sandra, no dudaron en hacerse una foto preboda aprovechando este mensaje tan oportuno que muestra el respaldo del banco, situado en la parte trasera del mesón A Granxa e ideado por sus dueños.
2. EL MÁS BONITO DEL MUNDO. Loiba, Ortigueira
El banco de los acantilados de Loiba, además de considerarse el más bonito del mundo, fue el pionero en esto de los ránkings. Una foto nocturna del fotógrafo viveirense Dani Caxete tuvo la culpa. Resultó galardonada por el proyecto TWAN, que premia los mejores cielos nocturnos del mundo. Arriba, a pleno día.
3. EL MÁS ARTESANAL. Noalla, Sanxenxo
Este sencillo banco en Punta Faxilda con espectaculares vistas a las islas, que marcan la entrada a tres rías, revolucionó a medio Sanxenxo. Y como le cogieron el gustillo, en Noalla crearon también un marco con vistas a la puesta de sol. Ambas iniciativas estuvieron promovidas por un grupo de vecinos.
4. EL MÁS CUKI. Monte Ventoso, Doniños.
Es uno de los más especiales, ya que en realidad fue un regalo de un chico a una amiga para la que todo es «cuki», pero que estaba atravesando un mal momento. Tato Robles, con la ayuda de su hijo, decidió reutilizar unos palés para dar forma a este asiento con el que animó a su amiga, Mariquiña Sixto.