El demócrata aumenta su ventaja sobre Trump tras conquistar Michigan y Wisconsin. El candidato a la reelección vuelve a agitar el fantasma del fraude electoral asegurando que la supuesta ventaja que tenía en algunos estados clave ha ido «desapareciendo mágicamente» con el paso de las horas
04 nov 2020 . Actualizado a las 23:45 h.Los estadounidenses siguen pendientes del recuento de votos para saber si Donald Trump revalida su mandato o si, por el contrario, Joe Biden se convierte en el próximo inquilino de la Casa Blanca. Lo hacen en un clima de máxima tensión social, después de una de las campañas electorales más polarizadas que se recuerdan, y con unas encuestas que daban ventaja al demócrata sobre el republicano. Sin embargo, los analistas son prudentes después del varapalo de las elecciones de hace cuatro años, donde los sondeos daban también la victoria a Hillary Clinton y acabaron con Donald Trump asumiendo el mando de los Estados Unidos.
Joe Biden ha asegurado este miércoles que, cuando termine el recuento, será el ganador de las elecciones de Estados Unidos, al tiempo que ha pedido unidad a los estadounidenses: «Estoy aquí para informar de que, cuando acabe el recuento, creemos que seremos los ganadores», ha señalado en una intervención desde el Chase Center de Wilmington, en Delaware.
El también exvicepresidente, que ha subrayado que no pronuncia un discurso «para declarar que ha ganado», ha destacado que «está claro que los demócratas han ganado suficientes estados para alcanzar los 270 votos electorales para ganar la Presidencia».
De forma paralela, ha pedido unidad: «No somos enemigos. Lo que nos hace estadounidenses es mucho más fuerte que cualquier cosa que nos pueda separar».
Hasta el momento, Biden ha logrado recabar 264 delegados de los 270 que se necesitan para ganar la Presidencia, por lo que roza la victoria.
El candidato demócrata a la Casa Blanca, Joe Biden, se ha hecho con los estados de Wisconsin y Míchigan, dos de los territorios clave para ganar las elecciones y ha ampliado la ventaja que mantiene sobre el actual presidente, Donald Trump.
En 2016 fue Trump quien se hizo con Michigan. Con una proyección al 99 por ciento, el candidato demócrata habría ganado por menos de un punto.
En un comunicado, el jefe de campaña de Trump, Bill Stepien, ha informado de que van a pedir «inmediatamente» un recuento en ambos estados. «Ha habido informaciones de irregularidades en varios condados de Wisconsin que generan serias dudas sobre la validez de los resultados», ha subrayado.
Las autoridades estadounidenses contienen el aliento ante el temor que crezca la tensión en el país, si el recuento se eterniza, no hay un claro ganador o termina en los tribunales, y provoque un estallido de la violencia.
El tirón electoral de Donald Trump llegó también a las dos Cámaras del Congreso estadounidense, donde, a falta todavía de conocerse los resultados definitivos, los republicanos parecen haberse asegurado el control del Senado ?se renovaban 35 de los 100 escaños? y reducido su desventaja frente a los demócratas en la Cámara de Representantes, para la que este martes se elegían a todos sus miembros.
Biden se ha hecho con el estado de Wisconsin, uno de los territorios clave para ganar las elecciones. El exvicepresidente ha logrado la victoria en el estado norteño, que reparte diez votos electorales, con un margen muy estrecho, 49,4 % de los apoyos, frente a los 48,8 % de los obtenidos por Trump. Biden, que con la victoria en Wisconsin ha aumentado sus posibilidades de resultar elegido, aventaja al presidente por unos 20.000 votos, según la proyección de la cadena de televisión CNN.
En un comunicado, el jefe de campaña de Trump, Bill Stepien, ha confirmado que van a pedir «inmediatamente» un recuento en este estado. «Ha habido informaciones de irregularidades en varios condados de Wisconsin que generan serias dudas sobre la validez de los resultados», ha subrayado. «El presidente está dentro del umbral para solicitar un recuento y vamos a hacerlo de forma inmediata», ha añadido.
Hasta el momento, Biden ha recabado 237 votos electorales de los 270 que necesita para proclamarse vencedor de los comicios, mientras que Trump suma 213. Quedan varios territorios en los que no está claro el candidato ganador: Arizona, Pensilvania, Georgia, Míchigan, Carolina del Norte y Nevada.
«Si con los fallos de los tribunales estatales no le salen las cuentas, a Trump siempre le quedará el comodín del Supremo, recientemente remodelado a su gusto. Resumen, tenemos culebrón para rato. El límite es el 14 de diciembre». Un análisis de Tomás García Morán
El candidato demócrata, Joe Biden, ganó este miércoles las elecciones en el estado clave de Wisconsin, lo que le permite aumentar su ventaja frente al presidente estadounidense Donald Trump, indicaron las proyecciones de la cadena CNN, el New York Times y la emisora NPR. Con los 10 delegados que otorga Wisconsin, Biden suma al menos 237 compromisarios en el Colegio Electoral, frente a los 213 que ha acumulado Trump, en su objetivo común de llegar a los 270 que dan la victoria.
Donald Trump ha presentado una demanda ante un tribunal de Michigan para exigir que se detenga el recuento en ese estado, por considerar que no se le ha dado el acceso suficiente a lugares de votación. El anuncio lo hizo el jefe de campaña de Trump, Bill Stepien, en un comunicado poco después de adelantar que su equipo pedirá además un recuento en el estado clave de Wisconsin.
Con el 98 % escrutado en Wisconsin, Biden tiene una ventaja de apenas 20.533 votos sobre Trump, un margen de solo el 0,6 % que ha provocado que ningún medio estadounidense se atreva aún a declarar un ganador en el estado.
La administradora de la Comisión de Elecciones de Wisconsin, Meagan Wolfe, dijo este miércoles a la prensa que todos menos uno de los municipios del estado han entregado ya recuentos provisionales de sus votos, y apenas falta por recibir el de un pueblo donde votaron menos de 400 habitantes.
Wolfe subrayó que los resultados oficiales en el estado no se certificarán hasta el 1 de diciembre, siguiendo la legislación estatal, por lo que los estadounidenses esperan son las proyecciones de los principales medios de comunicación.
Bajo la ley estatal, los candidatos pueden solicitar un recuento si el margen de ventaja del ganador es menos del 1 %, y la campaña de Trump está decidida a acogerse a esa posibilidad, tras subrayar que siempre esperó que el margen entre ambos candidatos fuera «ínfimo». «Ha habido informes sobre irregularidades en varios condados de Wisconsin, que plantean serias dudas sobre la validez de los resultados», aseguró el jefe de campaña de Trump, sin dar detalles o aportar pruebas.
Según funcionarios de ambos partidos en Wisconsin, si Biden mantiene su ventaja actual cuando se acabe el recuento, el presidente lo tendrá difícil para dar la vuelta al resultado en un recuento. «20.000 (votos) es un obstáculo muy alto», tuiteó el exgobernador republicano de Wisconsin Scott Walker, quien recordó que otros recuentos en el estado han cambiado los márgenes de victoria por unos pocos centenares de sufragios, pero no miles.
En el 2016, Trump ganó por un estrecho margen de más de 22.000 votos en el estado de Wisconsin, que reparte 10 delegados en el colegio electoral y que el demócrata Barack Obama ganó en el 2012 y el 2008.
A falta de conocerse los resultados en ese y otros estados clave, Biden suma por ahora 227 compromisarios en el Colegio Electoral, frente a los 213 que ha acumulado Trump, en su objetivo común de llegar a los 270 que dan la victoria.
El mundo aguarda expectante la resolución de la photo finish de las elecciones en Estados Unidos. Aunque la mayoría de las cancillerías y de los jefes de Estado y de Gobierno optan en público por una discreta neutralidad, no faltan entusiastas de Trump o Biden que se atreven a expresar en público sus predilecciones, con el consiguiente riesgo a las represalias diplomáticas o comerciales de un ganador que todavía no tiene nombre definido.
Muy cauta se mostró la ministra de Exteriores, Arancha González Laya, que este martes hizo una gira por diversos espacios informativos para dejar clara la neutralidad de España en la contienda. Alaya insistió en que el Gobierno trabajará con el nuevo presidente estadounidense «sea quien sea» porque esta es su responsabilidad, «sea más fácil o más difícil», y que su objetivo es «construir una agenda trasatlántica con quien gane estas elecciones para gobernar la globalización».
Menos prudente ha sido el Gobierno de Eslovenia, al fin y al cabo la patria de origen de Melania Trump, esposa del actual inquilino de la Casa Blanca.
El primer ministro esloveno, el populista de derechas Janez Jansa, se apuntó sin titubeos a la tesis de la victoria de Trump. «Está bastante claro que el pueblo americano ha elegido a Donald Trump y a Mike Pence por otros cuatro años», escribió Jansa en un mensaje de Twitter. «Cuanto más retrasos y negación de los hechos» se den por parte de los grandes medios de comunicación, «mayor será el triunfo final del presidente», agregó Jansa.
La campaña de Trump pedirá un recuento en el estado clave de Wisconsin, donde se han contado casi todos los votos y los resultados parecen inclinarse a favor de Joe Biden. «El presidente está dentro del margen para pedir un recuento y lo haremos inmediatamente», aseguró el jefe decampaña de Trump, Bill Stepien, en un comunicado emitido antes de que ninguna proyección de medios hubiera declarado aún un ganador en ese estado del medio oeste.
Con el 97% escrutado en Wisconsin, Biden lleva una ventaja de unos 20.000 votos sobre Trump. Los diez votos electorales de este estado podrían ser decisivos para determinar quién será el próximo presidente.
El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, calificó este miércoles de ilegítimas e injustas las alegaciones de fraude electoral lanzadas por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y pidió a los neoyorquinos que quieran manifestarse que lo hagan de manera pacífica. «Si cualquier persona, incluido el presidente sugiere que ha habido fraude, esto es absolutamente ilegítimo e injusto», dijo De Blasio en una rueda de prensa en reacción a las declaraciones de Trump que proclamó que ya había ganado las elecciones y que sentenció que se había cometido un «fraude al pueblo estadounidense». «Iremos al Tribunal Supremo. Queremos que pare todo el proceso de votación», anunció Trump desde la fiesta que había montado en la Casa Blanca, con unos 150 invitados entre el público.
El alcalde de Nueva York sostuvo, además, que este tipo de declaraciones podrían empujar a la gente «a llevar acabo acciones negativas», aunque apuntó que de acuerdo a la situación sobre el terreno, se sentía satisfecho por considerar que el país «ha enviado un mensaje de que quiere un resultado pacífico».
En este sentido, De Blasio subrayó que las autoridades están preparadas para cualquier eventualidad y pidió a los neoyorquinos que se manifiesten y expresen pacíficamente mientras se termina de conocer el resultado final de las elecciones presidenciales en cinco estados claves donde continúa el cómputo de los votos. «Creo que la gente ha hablado, dejen que este proceso se desarrolle. Insto a todos a que si tienen algo que decir, lo digan pacíficamente, con calma, porque todavía tiene que pasar mucho antes de que sepamos el resultado final» de las elecciones, dijo De Blasio.
El rapero Kanye West sigue dispuesto a ser Presidente de Estados Unidos. Tras su fracaso electoral en las elecciones de 2020, en las que sólo ha estado presente en las papeletas de 12 estados y ha conseguido menos de 60.000 votos, el cantante no pierde la esperanza, y volverá a intentarlo dentro de cuatro años.
West ha publicado un escueto mensaje en Twitter en el que aparece delante de una foto del mapa electoral de Estados Unidos, marcado con los colores de los partidos republicano y demócrata, y la ha acompañado de un mensaje corto, pero potente. «Bien», escribió el rapero. «Kanye 2024».
La candidatura independiente de West llegó tarde para las elecciones de 2020, ya que la presentó a finales de julio. Inicialmente enfocó su programa electoral en el aborto y la fe, para luego elaborar una plataforma en 10 puntos enfocada en el apoyo al medio ambiente y las artes, una política exterior anti-intervencionista y la reforma del sistema legislativo y policial. Desde entonces, ha estado luchando para que su papeleta fuese aceptada en varios estados, con algunos negándole legalmente la participación, ha alentado a sus fans a que escribieran su nombre en el voto como forma de protesta.
En total, de 12 estados en los que se podía votar a West, ha reunido menos de 60.000 papeletas, siendo Tennessee donde ha conseguido el mejor resultado (más de 10.000 votos), un 0,3% del recuento total.
Además de elegir al presidente y renovar las Cámaras, los americanos votaron en sus estados sobre la despenalización del consumo de narcóticos o la reintroducción de especies en sus bosques. Además, California decidió, con un 54 % de votos en contra, que no quiere permitir votar a los jóvenes de 17 años en las elecciones primarias, una norma que habría sido válida solo en caso de que para los siguientes comicios generales hubieran cumplido ya los 18 años.
Biden ha recabado ya más votos de los que logró Barack Obama en las elecciones de 2008, en las que obtuvo su primera victoria electoral. Según el recuento que ofrece la cadena Fox News, el candidato demócrata ha recabado hasta ahora más de 69,77 millones de votos, frente a los 69,49 que obtuvo Obama en sus primeras elecciones, en las que se impuso al republicano John McCain, que recabó 59,94 millones de votos.
En opinión de Nate Silver, director del portal Five Thirty Eight, especializado en asuntos electorales, es muy probable que Biden termine obteniendo «en torno a los 80 millones» si la participación total es de unos 155 milloness, ya que unos 101 millones de personas votaron por correo o de forma anticipada. A su vez Trump, que según Fox News ahora mismo cuenta con 67,16 millones de votos, podría terminar con «entre 73 y 75 millones», ha escrito Silver en su Twitter. Así pues, incide el experto, ambos terminarían batiendo el récord de Obama.
No obstante, ser el candidato más votado no significa ser elegido presidente, puesto que en Estados Unidos lo que votan los ciudadanos es a sus representantes en el Colegio Electoral, que es el que finalmente elige al mandatario del país. En la historia de Estados Unidos ha habido cinco candidatos que han llegado a la Casa Blanca sin haber ganado el voto popular. El último de ellos ha sido el propio Trump. En 2016, la demócrata Hillary Clinton obtuvo casi 2,9 millones de votos más que el republicano, pero este superó los 270 delegados necesarios en el Colegio Electoral.
La campaña del candidato demócrata cuenta con que por la tarde (en unas horas) podrá declarar la victoria porque sus datos internos apuntan que ha conquistado Wisconsin, Nevada, Michigan y Pensilvania, estados donde aún no hay un resultado final de las elecciones en Estados Unidos. «Joe Biden está en la senda para ganar estas elecciones y él será el próximo presidente de EE.UU. Creemos que tenemos por delante un camino claro para la victoria. Para esta tarde, esperamos que el exvicepresidente tenga suficiente ventaja en algunos estados para superar los 270 delegados», dijo en una comparecencia ante la prensa la jefa de campaña de Biden, Jen O'Malley Dillon.
El candidato demócrata a la Casa Blanca, Joe Biden, lidera ahora el conteo en el estado de Michigan, lo que aumenta sus opciones de victoria en medio la incertidumbre generada por la falta de un resultado definitivo en varios estados claves de las elecciones presidenciales de Estados Unidos.
Biden cuenta con el 49,3 % de los votos frente al 49,1 % del actual presidente, el republicano Donald Trump, con el 90 % de los votos escrutados en Michigan La diferencia es de apenas 10.000 votos por lo que la incertidumbre aún es elevada. La secretaria de Estado de Michigan, Jocelyn Benson, encargada del conteo, ha asegurado que espera tener una imagen «muy clara» de los resultados hoy por la tarde, por lo que pidió «paciencia».
El candidato del Partido Demócrata a la Casa Blanca, Joe Biden, ha prometido que su campaña no parará «hasta que se cuenten todos los votos», después de que el presidente, Donald Trump, haya planteado paralizar el recuento por supuestas irregularidades en el proceso. «No descasaremos hasta que se cuenten todos los votos», ha dicho Biden en Twitter, en su primera reacción al discurso pronunciado por Trump durante la noche electoral y en el que el mandatario se autoproclamó vencedor de la carrera pese a que el resultado en varios estados clave aún no es concluyente.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha vuelto a agitar este miércoles el fantasma del fraude electoral y ha asegurado que la supuesta ventaja que tenía en algunos estados clave ha ido «desapareciendo mágicamente» con el paso de las horas por el recuento de «vertederos de votos sorpresa». «Anoche, estaba encabezando el recuento, a menudo por un amplio margen, en muchos estados clave, en casi todos los casos gobernados y controlados por los demócratas», ha afirmado Trump en Twitter, sin aludir a ningún caso concreto.
Twitter, de nuevo no lo ha dudado y ha considerado «engañoso» este tuit del presidente norteamericano.
Wall Street abrió con ganancias este miércoles y su principal indicador, el Dow Jones de Industriales, subía un 1,24 % con los mercados a la espera de un conocer un resultado claro de las elecciones presidenciales de EE.UU. celebradas la víspera, algo que puede llevar días.
Una decena de protestas para mostrar el rechazo al presidente y candidato electoral Donald Trump han sido convocadas en Nueva York para este miércoles, mientras la Policía mantiene su presencia en el centro de Manhattan. Hasta nueve manifestaciones con lemas como «Rechaza el fascismo» o «No dejemos que Trump robe las elecciones» se han convocado para hoy a partir de las 15.00 hora local (20.00 GMT) en los distritos de Brooklyn, Manhattan y Queens, informa Efe. Estas convocatorias, realizadas por grupos de izquierda que también lideraron las movilizaciones antirracistas y contra la brutalidad policial en mayo y junio, tienen lugar mientras continúa el recuento en 5 de los 50 estados del país.
El jefe del Departamento de Policía de Nueva York, Terence Monahan, afirmó que habrá miles de agentes sobre el terreno para permitir las manifestaciones pacíficas pero dispuestos a actuar con «cualquiera que quiera actuar violenta y destructivamente».
Los estadounidenses en China, el país «enemigo» del candidato a la reelección presidencial en EE.UU., el republicano Donald Trump, vivieron hoy con tensión la incertidumbre ante el resultado de las elecciones, mientras que los chinos no mostraban especial preocupación, aunque mayoritariamente se decantaban por el demócrata Joe Biden. En un bar restaurante del centro de Pekín, decenas de personas siguieron el recuento desde primeras horas de la mañana local a través de la CNN en grandes pantallas diseminadas por el establecimiento, informa Efe. La inmensa mayoría de los presentes preferían una victoria de Biden, sabedores de que un eventual triunfo de Trump empeoraría las relaciones con China y dificultaría su vida en el gigante asiático.
Estos son los cinco estados que, debido a su peso en el Colegio Electoral, podrían decidir si el ganador es el actual presidente y candidato republicano, Donald Trump, o si por el contrario es su rival, el demócrata, Joe Biden, quien se hace con la victoria. Además, todavía se desconocen los resultados definitivos para el Congreso, aunque los republicanos parecen haber salvado el Senado y reducido su desventaja en la Cámara Baja al contrario de lo que pronosticaban las encuestas, que daban a los demócratas el control total del Legislativo, informa Efe.
WISCONSIN
En Wiscosin, con el 95 % escrutado, Biden solo tiene un margen de unos 20.000 votos y miles de votos por correo siguen siendo procesados por máquinas que automatizan el proceso, pero que requieren el transporte de las papeletas a esos centros.
MICHIGAN
Con el 88 % escrutado en Michigan, Trump lidera la votación con un 49,8 % de los votos frente al 48,6 % de Biden, que ha ido recortando terreno en las últimas horas.
PENSILVANIA
En el vital estado de Pensilvania, con el 75 % del escrutinio, Trump tiene una ventaja de algo más de 600.000 votos, pero más de un millón de votos por correo quedan por incorporar al recuento final.
GEORGIA
Con el 94 % escrutado, Trump lidera el recuento con un 50,5 % del voto, mientras Biden acumula el 48,3 %, aunque todavía quedan por contar las zonas más demócratas del estado, especialmente los condados de la ciudad de Atlanta y las zonas residenciales que la rodean.
NEVADA
Con un 83 % escrutado, Biden lidera el recuento con un 49,3 % de los cotos frente a Trump, que acumula 48,7 %, apenas 8.000 votos. Las autoridades electorales del estado avisaron de que no comunicarán más resultados electorales hasta las 09.00 hora local (17.00 GMT) del jueves.
La participación en las elecciones presidenciales en Estados Unidos y cuyo resultado aún se desconoce puede ser la más alta de las registradas en los últimos cien años, según informan medios locales. El portal Edison Research estima que se han emitido más de 157 millones de votos, lo que representa una tasa de participación del 65,7 % entre los votantes que pueden ejercer el derecho al sufragio. Esta cifra supera en más de cinco puntos a la registrada en las presidenciales del 2016, cifrada en el 60,1 % y en las que resultó ganador el republicano Trump.
Hasta el momento, Biden aventaja a Trump por 227 delegados frente a 213. El recuento de votos de las elecciones presidenciales estadounidenses podría alargarse hasta el próximo viernes, según pronostican los expertos, ya que calculan que en algunos estados como en Pensilvania «tardarán días en contar todas las papeletas». Todas las miradas están fijas ahora en los estados bisagra de Pensilvania, con 20 delegados en el Colegio Electoral; Michigan, con 16; Wisconsin, con 10; Carolina del Norte, con 15; Georgia, con 16; y Nevada, con 6; a los que se suman los 3 compromisarios en juego de Alaska y 1 de Maine.
El Colegio Electoral es un órgano integrado por 538 delegados distribuidos en función de la población de cada uno de los estados. El candidato ganador en cada uno de esos estados, aunque sea por un solo voto, se lleva todos sus compromisarios; y el aspirante que llega a 270 gana las elecciones.
La Comisión Europea ha evitado valorar las elecciones presidenciales en Estados Unidos, asegurando que el proceso «sigue en marcha» y que toca esperar a que las autoridades norteamericanas proclamen los resultados. De voz de su portavoz principal, Eric Mamer, el Ejecutivo europeo ha pedido paciencia ante un proceso democrático que aún no ha terminado, puesto que el recuento sigue abierto, y del que espera conocer resultados oficiales en «el tiempo debido».
Tanto el presidente, Donald Trump, como el candidato demócrata, Joe Biden, aún mantienen intactas sus opciones de alzarse con la victoria con un buen puñado de estados aún sin dirimir debido al retraso en el recuento ante el elevado número de votos emitidos por correo y de forma anticipada para estas elecciones.
En estos momentos, las proyecciones de los principales medios de comunicación sitúan a Biden más cerca de alcanzar la cifra mágica de los 270 delegados en el Colegio Electoral, el organismo que en última instancia es el encargado de elegir al presidente en Estados Unidos. Así, el demócrata cuenta con una estimación de entre 238 y 224 compromisarios, según los medios, mientras que el presidente se haría con 213 representantes, un dato que parece unánime en todas las proyecciones.
La inesperada resistencia electoral del presidente de EE.UU., Donald Trump, llegó también al Congreso donde, a falta de conocerse los resultados finales, los republicanos parecen haber salvado el Senado y reducido su desventaja en la Cámara Baja, informa Efe. Aunque los resultados no son definitivos, los republicanos están ante un inesperado escenario en el que, con el control del Senado, pueden seguir apoyando el rumbo que Trump marca para Estados Unidos o bloquear las iniciativas que promueva Biden, en caso de que el demócrata llegue a la Presidencia.
El líder de Vox, Santiago Abascal, cree que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, «puede sentirse ganador» de los comicios «por seguir en pie contra todos», a falta de conocer el resultado de algunos estados decisivos, y ha celebrado la derrota del candidato demócrata, Joe Biden, en Florida. Cuando aún no se conoce el desenlace de las elecciones estadounidenses, Abascal ha publicado un comentario en su cuenta oficial de Twitter confirmando su apoyo a Trump para un segundo mandato en la Casa Blanca.
Las redes sociales Twitter y Facebook y la plataforma de vídeo YouTube han tomado medidas en las últimas horas para evitar la desinformación sobre los resultados de las elecciones presidenciales de Estados Unidos, restringiendo las publicaciones que dan como ganador a un candidato de forma prematura. Durante este periodo de incertidumbre, YouTube ha eliminado «vídeos en directo que violan las normas de la comunidad», como ha anunciado la plataforma en Twitter, respondiendo a usuarios que denunciaban la presencia de vídeos con miles de visualizaciones que daban resultados electorales falsos.
La compañía de Mark Zuckerberg ha añadido una notificación en Facebook e Instagram que recuerda a los usuarios que «los votos aún se están contando» y que por tanto aún no hay un vencedor oficial. Twitter, por su parte, también ha tomado medidas y ha etiquetado una publicación de Trump que aseguraba que sus rivales estaban «intentando robar las elecciones» y pedía que parasen los recuentos. Facebook ha tomado las mismas medidas. «Hemos colocado una advertencia en un tuit de Donald Trump por hacer una afirmación potencialmente engañosa sobre unas elecciones», ha anunciado Twitter a través de su cuenta de soporte.
El primer ministro esloveno, el populista de derechas Janez Jansa, ha dicho este miércoles que resulta «bastante claro» que ha sido reelegido para un segundo mandato el presidente de EE.UU., Donald Trump, cuya esposa, Melania, es originaria de Eslovenia. «Está bastante claro que el pueblo americano ha elegido a Donald Trump y a Mike Pence por otros cuatro años», escribe Jansa en un mensaje de Twitter.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha logrado en Florida una de las victorias más simbólicas de la noche electoral, en parte por el respaldo que ha sabido cultivar entre una comunidad latina --especialmente la de origen cubano-- que no se inclina de forma monolítica del lado del Partido Demócrata. Trump no ha ocultado en sus actos de campaña su deseo de atraer a la comunidad hispana, considerada la mayor minoría de Estados Unidos al contar con unos 32 millones de potenciales votantes. Solo en Florida se estima que hay más de cuatro millones de latinos, una cuarta parte del total de la población. millones de latinos, una cuarta parte del total de la población.
La noche electoral en Estados Unidos ha estado marcada, en lo político, por la incertidumbre sobre el ganador de la carrera por la Casa Blanca y, a pie de calle, por las protestas que han surgido en varias ciudades del país a medida que han ido pasando las horas, si bien no se han registrado grandes incidentes.
El Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, ha llamado este miércoles a la prudencia porque considera «precipitado» declarar un ganador en el ajustado escenario electoral de Estados Unidos y ha asegurado que toca esperar a que finalice el recuento de votos. Frente a las denuncias de fraude del presidente, Donald Trump, el jefe de la diplomacia europea ha expresado su «confianza» en el sistema norteamericano y ha insistido en que se trata de una «democracia consolidada» que cuenta con unas normas que rigen el proceso electoral.
El portavoz de Unidas Podemos en el Congreso, Pablo Echenique, ha acusado al candidato republicano y actual presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de utilizar la «estrategia habitual en las ultraderechas latinoamericanas y europeas» ante el recuento del resultado electoral de los comicios presidenciales. «Lo que sí sabemos es cómo se comporta la ultraderecha cuando cree que va a perder las elecciones: Prefiere pegarle fuego a la democracia que abandonar pacíficamente el poder», ha lamentado en Twitter tras conocer que Trump quiere emprender acciones legales por el recuento electoral en Estados Unidos.
Sarah McBride hizo historia este martes en las elecciones de EE.UU. al convertirse en la primera senadora estatal abiertamente transgénero de la historia del país, tras lograr un escaño en la Cámara Alta del estado de Delaware. McBride, que desempeñará su cargo en el Senado de ese estado de la costa este de EE.UU. y no en la Cámara Alta federal, será además la funcionaria transgénero de más alto rango del país norteamericano.
La jefa de campaña del candidato demócrata, Joe Biden, acusó hoy a su rival, Donald Trump, de intentar «invalidar» los votos de millones de estadounidenses con sus denuncias de fraude, y aseguró que está preparada para un litigio. «La declaración esta noche del presidente, que intenta detener el recuento de votos debidamente emitidos, fue indignante, sin precedentes e incorrecta», dijo en un comunicado la jefa de campaña de Biden, Jen O'Malley Dillon.
El ex secretario general de la OTAN, el socialista Javier Solana, cree que si Donald Trump no obtiene los votos suficientes para revalidar la presidencia de Estados Unidos «es muy difícil que pueda pretender quedarse en la Casa Blanca», aunque no admita los resultados electorales, si bien «puede alargar mucho la situación». En una entrevista en Ràdio 4, el también exministro español ha indicado que «era de esperar» que el candidato republicano se autoproclamara vencedor antes de que acabara el escrutinio, aún en marcha.
El ministro británico de Exteriores, Dominic Raab, afirmó este miércoles que la relación entre el Reino Unido y Estados Unidos está en «gran forma» y que está seguro de que se fortalecerá aún más ya sea que gane el republicano Donald Trump o el demócrata Joe Biden las elecciones en ese país, informa Efe. Los vínculos con EE.UU. «irán cada vez mejor», afirmó Raab a la cadena Sky News, si bien no quiso pronunciarse sobre los resultados hasta que termine el recuento de los votos.
Donald Trump ha asegurado que ha «ganado» las elecciones presidenciales estadounidenses, ha denunciado que se ha producido un «importante fraude» y ha exigido que se detenga el recuento de votos que faltan por contabilizar, además de avanzar que estudia recurrir los resultados de los comicios ante el Tribunal Supremo. «Esto es un fraude para el público estadounidense. Esto es una verguenza para nuestro país. Nosotros nos estábamos preparando para ganar estas elecciones. Francamente, nosotros hemos ganado estas elecciones. Nosotros hemos ganado estas elecciones», ha proclamado el mandatario estadounidense en una comparecencia en la Casa Blanca.
Trump ha lanzado este mensaje en una declaración ante la prensa junto al vicepresidente, Mike Pence, y la primera dama, Melania Trump, cuando todavía quedan millones de votos por contabilizar y el recuento aún no ha terminado.
Trump, ha asegurado este miércoles que está obteniendo la victoria provisional en las elecciones a la Casa Blanca. «Vamos muy por delante pero están intentando robar las elecciones. Nunca se lo permitiremos», ha asegurado el presidente a través de su cuenta de Twitter. En el mismo mensaje, Trump ha proclamado que «no se pueden emitir votos después de que hayan cerrado las urnas», en lo que parece tratarse de una nueva queja sobre el sistema de votación, no refrendada hasta el momento por tribunal alguno.
En ese momento, Twitter ha efectuado un aviso de amonestación al contenido del mensaje: «Alguna parte o todo el contenido compartido en este Tweet ha sido objetado y puede ser engañoso respecto de cómo participar en una elección u otro proceso cívico».
La ministra de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, Arancha González Laya, ha pedido este miércoles «calma» antes de pronunciarse sobre la votación tan «ajustada» en las elecciones presidenciales de los Estados Unidos, aunque ha dejado claro que España se entenderá con «quien salga» elegido. En una entrevista en la Cadena SER, recogida por Europa Press, Laya ha recordado que «Europa no vota» en estos comicios y que la obligación desde «Madrid, Bruselas y Berlín» es entenderse con Donald Trump o con Joe Biden, sean cuales sean los resultados finales.
El candidato demócrata a la Presidencia de EE.UU., Joe Biden, arrebató Arizona, uno de los estados clave en las elecciones del martes, al actual presidente, Donald Trump, que venció aquí en el 2016, según proyecciones de los grandes medios estadounidenses. Con este resultado proyectado por la cadena Fox News, la emisora NPR y el portal Politico, Biden suma 11 delegados más y se sitúa con 236 compromisarios en el Colegio Electoral, frente a los 213 que ha sumado Trump en su objetivo común de llegar a los 270 que dan la victoria.
El Congreso de EE.UU. contará a partir de enero con la primera activista de Black Lives Matter que llega a legisladora a nivel federal, según confirmaron este miércoles las proyecciones de los medios. Se trata de la demócrata Cori Bush, una enfermera de 44 años que hizo además historia como la primera mujer negra que representa al estado de Misuri en el Congreso, y se enmarca en el ala izquierdista del Partido Demócrata.
El presidente de EE.UU., Donald Trump, declaró este miércoles que ha ganado las elecciones a pesar de que continúa el recuento en varios estados clave, y aseguró que recurrirá al Tribunal Supremo para denunciar un presunto «fraude» en su contra.
«Este es un fraude al pueblo estadounidense (...). Hemos ganado estas elecciones», afirmó Trump desde la Casa Blanca.
Poco antes de denunciar el intento de «robo» de las elecciones por parte de los demócratas, Trump anunció que comparecería, además de proclamar su victoria. Está previsto que lo haga en unos minutos.
El principal índice de la Bolsa de Tokio, el Nikkei, subió un 1,72 % este miércoles y cerró en su mejor nivel en ocho meses y medio, animada por la subida de los futuros de EE.UU. en medio del recuento de votos de sus elecciones presidenciales.
El Nikkei, que agrupa a los 225 títulos más representativos del mercado, avanzó 399,75 puntos, hasta 23.695,23 enteros.
El congresista republicano Adam Kinzinger, que ha sido reelegido para el cargo, ha reprochado a Trump el tuit en el que acusa a los demócratas de tratar de robar las elecciones. «Stop. Punto final. Los votos serán contados y ganarás o perderás. Y Estados Unidos lo aceptará. La paciencia es una virtud», replicó el republicano en la misma red.
La balanza de las elecciones presidenciales de Estados Unidos está pendiente de inclinarse a uno u otro lado dependiendo de los resultados en algunos de los estados más comprometidos, como Wisconsin, Michigan o Pensilvania, en los que Trump parece tomar ventaja, pero en algunos de ellos no se espera un desenlace inmediato.
Biden se ha mostrado fuerte en los estados de la costa oeste y en el noreste del país, pero Trump ha vuelto a repetir su dominio en los agrícolas del medio oeste y en el sur, como en las elecciones que le llevaron a la presidencia en el 2016 frente a Hillary Clinton.
Oregón se convirtió este martes en el primer territorio de Estados Unidos que aprueba despenalizar la posesión de todas las drogas para uso personal, una medida con la que busca evitar los encarcelamientos masivos de drogodependientes.
El estado de Oregón, al norte de California, fue el primer territorio que despenalizó la marihuana en 1973 y con la nueva normativa, aprobada en las urnas, multará con 100 dólares a quienes sean sorprendidos en posesión de pequeñas cantidades de «drogas duras» y ofrecerá cursos de desintoxicación como alternativa a la vía penal.
La iniciativa recibió el beneplácito de los votantes en las elecciones del martes, en las que además de elegir al presidente de Estados Unidos, los ciudadanos se pronunciaron sobre propuestas locales y estatales.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ganó en el estado clave de Texas, según proyecciones de la NBC, Fox News y Politico.
Con los 38 delegados de Texas en el Colegio Electoral, Trump acorta la ventaja de su rival, Joe Biden, en el recuento con 223 del demócrata frente a 213 del mandatario, en su objetivo de llegar a 270 compromisarios, según la agencia Efe.
El cierre de las últimas urnas en las Islas Aleutianas de Alaska a las 06.00 GMT (7.00 hora española) del miércoles puso fin a la jornada electoral en Estados Unidos, en unos comicios muy reñidos en que los resultados definitivos podrían tardar días en conocerse.
Alaska, que tiene dos franjas horarias, es el último estado en cerrar los colegios electorales, y se espera que sus tres compromisarios del Colegio Electoral vayan a parar a manos del presidente y aspirante republicano a la reelección, Donald Trump.
Según las últimas proyecciones de los principales medios, el candidato demócrata Joe Biden acumula 223 compromisarios, mientras que Trump lleva acumulados 175, en la carrera hasta los 270 que aseguren la victoria en las elecciones presidenciales, recoge Efe.
Alexandria Ocasio-Cortes, Rashida Tlaib, Ayanna Pressley e Ihlan Omar, consideradas parte del «escuadrón» progresista de mujeres demócratas, han renovado en las elecciones de este martes sus escaños en el Congreso estadounidense tras vencer a sus oponentes republicanos en los diferentes estados a los que representan, según las predicciones de los medios del país.
Tras horas de silencio, Trump ha vuelto a usar su cuenta de Twitter para responder a la intervención de su rival. El aspirante a la reelección ha reiterado las acusaciones de intentos de fraude: «Estamos a lo GRANDE, pero están tratando de ROBAR las elecciones. Nunca les dejaremos hacerlo. ¡No se pueden emitir votos después de que las urnas están cerradas!»
Poco después, Twitter ha hecho una objeción a la publicación y ha advertido que el mensaje puede ser engañoso.
Trump y Biden han obtenido dos importantes victorias electorales, según revelan las proyecciones de los últimos minutos, al hacerse con la victoria respectiva en los estados de Iowa y Minesota.
El mandatario norteamericano obtiene por Iowa los seis votos electorales que corresponden al estado mientras que Biden ha recibido 10 votos por Minesota, de acuerdo con las estimaciones de CNN y Fox News, que recoge Europa Press.
El candidato demócrata a la Presidencia de Estados Unidos, Joe Biden, pidió «mantener la fe» y se mostró «optimista», pese a que los resultados poco después de la medianoche no dejan claro si se impondrá al presidente, Donald Trump, según recoge Efe.
En un encuentro con simpatizantes en el exterior del Chase Center de Wilmington (Delaware), señaló que es optimista sobre poder ganar Wisconsin y Michigan, aunque «puede llevar tiempo» declarar su victoria, sobre todo, por los retrasos en Pensilvania.
El resultado en Pensilvania puede ser decisivo en los comicios, pero no se resolverá en breve. Hay más de dos millones de votos por correo. Por eso, el fiscal general del estado, el demócrata Josh Shapiro, ha recomendado a los ciudadanos a través de su cuenta en Twitter que se lo tomen con calma y «duerman un poco».
Biden aventaja al presidente Trump por 223 delegados a 137 en el Colegio Electoral (538 en total), según las proyecciones de los medios estadounidenses. Quien logre 270, gana.
TRUMP (137):
- Alabama (9),
- Arkansas (6),
- Carolina del Sur (9),
- Dakota del Norte (3),
- Dakota del Sur (3),
- Kansas (6),
- Kentucky (8),
- Idaho (4),
- Indiana (11),
- Luisiana (8),
- Misisipi (6),
- Misuri (10),
- Nebraska-estado (2),
- Nebraska-distrito 1 (1),
- Nebraska-distrito 3 (1),
- Ohio (18),
- Oklahoma (7),
- Tennessee (11),
- Utah (6),
- Virginia Occidental (5)
- y Wyoming (3).
BIDEN(223):
- California (55),
- Colorado (9),
- Connecticut (7),
- Delaware (3),
- Distrito de Columbia (3),
- Hawai (4),
- Illinois (20),
- Maryland (10),
- Massachusetts (11),
- Minesota (10),
- Nueva Jersey (14),
- Nueva York (29),
- Nuevo Hampshire (4),
- Nuevo México (5),
- Oregón (7),
- Rhode Island (4),
- Vermont (3),
- Virginia (13)
- y Washington (12)
Todos los colegios electorales en el archipiélago de Hawái cerraron a las 05:00 GMT (6.00 hora española) del miércoles, lo que finiquita prácticamente la jornada electoral en Estados Unidos únicamente a falta de que terminen las votaciones dentro de una hora en Alaska, que también ha cerrado parte de sus colegios en algunas zonas de su territorio.
Hawái es considerado uno de los estados más seguros para los demócratas, por lo que se espera que los cuatro compromisarios al Colegio Electoral que otorga el archipiélago caigan del lado de Joe Biden, que ya suma un total de 209 según las proyecciones de los principales medios estadounidenses.
Por su parte, el presidente y aspirante republicano a la reelección, Donald Trump, acumula 118 compromisarios, con el objetivo de llegar a los 270 que dan la victoria, según las proyecciones de los principales medios.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha obtenido la victoria en Ohio, considerado otro de los estados clave para su reelección junto a Florida, en el que también ha ganado, según las estimaciones de la cadena Fox News y NBC News.
Ohio otorga al presidente norteamericano 18 votos electorales, tal como ya consiguió en las elecciones de hace cuatro años.
La victoria en ambos estados mejora significativamente las opciones de Trump para conseguir un nuevo mandato al frente del país gracias a la incorporación de 47 votos electorales entre ambos estados, cruciales para conseguir los 270 necesarios para ganar las elecciones, según señala Europa Press.
Los puertorriqueños se declararon este martes a favor de que la isla sea un estado de Estados Unidos, con un 52,34 % de los votos, según adelanta Efe.
Así lo informó la Comisión Estatal de Elecciones (CEE) en su página web con el 86,26 por ciento de los colegios escrutados.
Un 47,66 % votó en contra en una consulta que no es vinculante.
Arizona era uno de los estados de resultados dudosos, según las encuestas. La nada sospechosa Fox News, la cadena favorita de Donald Trump, otorga la victoria en este estado y sus 11 representantes a Joe Biden:
Florida ha concluido el escrutinio del voto y se han confirmado los resultados que daban la victoria a Trump, que se lleva 29 compromisarios del Colegio Electoral:
Con el 42 % escrutado, Trump tiene una ventaja significativa en Pensilvania (20): 56,6 % frente a 42 %.
Con similar recuento (43 %), Míchigan (16) se inclina también por el candidato republicano: 54,7 % frente a 43,5 %.
Otro estado clave con resultados dudosos en las encuestas, Wisconsin (10), da al presidente el 50,8 % de los votos frente al 47,5 % de Biden con un 50 % escrutado.
Con el 84 % escrutado, Texas (38 votos) se inclina por Trump con el 51,7 % de los votos frente al 47 % de Biden.
En Ohio (18), la diferencia es aun mayor, con el 85 % escrutado: 53,1 % frente a 45,5 %.
En Carolina del Norte (15), donde se han escrutado el 95 % de los votos, la victoria es para Trump con el 50 % de los sufragios frente al 48,7 %.
La policía ha tenido que intervenir para sofocar una escaramuza entre personas congregadas ante la Casa Blanca, según cuenta Europa Press. Gurpos de partidarios y detractores de Trump se están manifestando ante la residencia oficial del presidente.
Los 15 compromisarios de Carolina del Norte, otro de los estados bisagra, son una de las grandes batallas de la noche. Con el 85 % del voto escrutado, Biden lograba en 49,7 % de los votos frente al 49,1 % de Trump, según The New York Times.
TRUMP (98):
- Nebraska (5),
- Kansas (6),
- Alabama (9),
- Arkansas (6),
- Carolina del Sur (9),
- Dakota del Norte (3),
- Dakota del Sur (3),
- Kentucky (8),
- Indiana (11),
- Luisiana (8),
- Misisipi (6),
- Oklahoma (7),
- Tennessee (11),
- Virginia Occidental (5)
- y Wyoming (3).
BIDEN (131):
- Nuevo México (5),
- Colorado (9),
- Connecticut (7),
- Delaware (3),
- Distrito de Columbia (3),
- Illinois (20),
- Maryland (10),
- Massachusetts (11),
- Nueva Jersey (14),
- Nueva York (29),
- Rhode Island (4),
- Vermont (3)
- y Virginia (13).
La empresaria republicana Marjorie Taylor Greene se ha convertido este miércoles en la primera simpatizante del movimiento conspiratorio QAnon en obtener un escaño a la Cámara Baja del Congreso de Estados Unidos, gracias a su victoria en las elecciones de su distrito en el nortoeste de Georgia, según Europa Press.
Taylor Green, a quien Trump ha concedido su apoyo explícito a lo largo de la campaña electoral, ha obtenido la victoria después de que su oponente demócrata, Kevin Van Ausdal, se retirara citando motivos personales.
The Washington Post dice que la campaña de Biden es pesimista sobre Florida (29 compromisarios) y optimista sobre los resultados de Ohio, donde se juegan 18 votos cruciales. Estas son algunas claves para entender la importancia de este estado:
El Partido Nuevo Progresista (PNP), actualmente en el Gobierno puertorriqueño, con un 44 % de los votos escrutados, lidera los votos preliminares en la carrera por la gobernación, representante de Puerto Rico en EE.UU., y la alcaldía de la capital, tras las elecciones celebradas este martes en la isla, seguido muy de cerca por el Partido Popular Democrático (PPD), en la oposición.
La consulta -no vinculante y la sexta que se celebra en la historia de la isla- sobre el SÍ o NO a ser un estado de Estados Unidos o seguir como Estado Libre Asociado (ELA), tiende al SI con 245.647 votos y 216.314, para el NO.
La activista transgénero Sarah McBride, de 30 años, ha ganado este martes la carrera al Senado en el estado de Delaware, según proyecciones de medios estadounidenses, por lo que se convierte en la primera persona que se identifica como transgénero en ocupar un escaño en la Cámara Alta de un estado norteamericano.
«Lo hemos logrado. Hemos ganado las elecciones generales», ha celebrado McBride a través de su cuenta de Twitter, una victoria que espera «muestre a los niños de la comunidad LGTBQ que nuestra democracia es lo suficientemente grande para ellos también».
Por último, ha añadido que «mientras Delaware continua enfrentando la crisis del covid-19, es hora de ponerse a trabajar para invertir en las políticas que marcarán la diferencia en nuestras familias trabajadoras».
Así está por el momento el escenario electoral de los comicios. El ganador necesita 270 compromisarios de los 538 que conforman el Colegio Electoral:
TRUMP (89):
- Alabama (9),
- Arkansas (6),
- Carolina del Sur (9),
- Dakota del Norte (3),
- Dakota del Sur (3),
- Kentucky (8),
- Indiana (11),
- Luisiana (8),
- Misisipi (6),
- Oklahoma (7),
- Tennessee (11),
- Virginia Occidental (5)
- y Wyoming (3).
BIDEN (117):
- Connecticut (7),
- Delaware (3),
- Distrito de Columbia (3),
- Illinois (20), Maryland (10),
- Massachusetts (11),
- Nueva Jersey (14),
- Nueva York (29),
- Rhode Island (4),
- Vermont (3)
- y Virginia (13).
Biden, lidera con un 50,5 % de los votos las elecciones en Texas, frente al 48,1 % para el actual presidente, Donald Trump, con poco más del 60 % de sufragios escrutado. El resultado es muy provisional y hacer efectiva la víctoria demócrata, muy difícil. El último candidato liberal en hacerlo fue el expresidente Jimmy Carter (1977-1981) hace casi medio siglo, recuerda Efe.
Trump, por su parte, parece que se llevará Florida, cuando se ha escrutado más del 90 % del voto. Este estado es imprescindible para mantener las opciones del presidente a la reelección.
El candidato demócrata a la Casa Blanca se ha adjudicado el estado de Nueva York, mientras que el presidente, Donald Trump, en otros cinco estados, según las proyecciones de los principales medios estadounidenses.
Con estos nuevos estados Biden mantiene su ventaja sobre Trump en el recuento con 117 compromisarios en el Colegio Electoral frente a 89 en su objetivo de llegar a los 270 que dan la victoria, según recoge Efe.
Texas, con 38 compromisarios, es uno de los estados más codiciados y también uno de los más polarizados. Como en otros muchos puntos del país, hoy se han repetido las imágenes de confrontación en las calles entre seguidores de uno y otro partido.
Trump y Biden están virtualmente empatados con el 86 % de los centros electorales ya contabilizados en Florida, un estado que el republicano necesita ganar si quiere tener claras opciones de repetir mandato, según recoge la agencia Efe.
Trump tiene el 49,8 % de los votos, o 5.017.813 de sufragios, mientras que Biden se hace hasta ahora con 4.952.187votos o el 49,2 %, según datos de la cadena MSNBC.
Estos resultados parciales ya incluyen buen parte de los votos en el condado de Miami-Dade, el mayor del estado y donde tiene un gran peso el voto cubanoestadounidense, mayoritariamente favorable a Trump.
El republicano Mitch McConnell, líder de la mayoría en el Senado, ha logrado la reelección en Kentucky frente a la demócrata Amy McGrath.
Trump suma Carolina del Sur (9), Oklahoma (7), Tennessee (11), Mississippi (6) y Alabama (9), según Associated Press.
Biden gana Rhode Island (7), Nueva Jersey (14), Massachusetts (11), Maryland (10), Illinois (20), Delaware (3) y Connecticut (4).
Con las proyecciones difundidas hasta ahora, Biden se adelanta con 84 compromisarios frente a 66 del republicano.
Biden suma los 13 de Virginia y Trump 5 de Virginia Occidental, según las proyecciones de los grandes medios, que hasta ahora dan ventaja al republicano: 24 (Virginia Occidental, Indiana y Kentucky) frente a 16 (Virginia y Vermont).
Tal como apuntaban los sondeos, el candidato demócrata suma los 13 votos electorales de Virginia, según recoge la agencia AP.
Once estados de EE.UU. cerraron este martes parte o la totalidad de sus colegios electorales, incluidos casi todos los de cuatro estados claves: Florida, Georgia, Carolina del Norte y Ohio.
A las 19.30 horas de la costa este (01:30 hora española), cerraron las urnas en todo Ohio, Carolina del Norte y Virginia Occidental, además de algunos colegios más en Florida y Nuevo Hampshire.
Media hora antes habían cerrado los primeros colegios electorales en Florida y Nuevo Hampshire, ademas de la totalidad de los centros de votación ubicados en otros cuatro estados: Vermont, Virginia, Carolina del Sur y Georgia, según recoge Efe.
Medios como el Washington Post atribuyen a Trump, como estaba previsto, la victoria y los once votos electorales en Indiana. Otros, como el New York Times, dan por buenos los resultados en Vermont, a favor de Biden, (3 votos electorales) y en Kentucky, para Trump (8 votos electorales). El umbral de la presidencia se sitúa por encima de los 270.
Antes de cerrar todos su actos de campaña, Joe Biden aseguró en Delaware que Estados Unidos «necesita restaurar la decencia y el honor de nuestro sistema o se derrumbará».
El candidato y favorito de las encuestas volvió a insistir en que Donald Trump no va a poder clamar victoria esta noche sin que se cuenten todos los votos en un caso de estrechos márgenes.
«Los presidentes no deciden qué votos se cuentan y los que no. Lo determinan los votantes. No importa lo que diga o haga los votos se van a contar», aseguró Biden antes de recluirse con su familia en la que puede ser una larga noche.
El candidato demócrata, Joe Biden, ha regresado ya a su cuartel general de Wilmington, Delaware, para esperar al cierre de los colegios y los primeros resultados. Lo ha hecho, según informa EFE, después de haber pasado la mañana en diferentes actos con votantes. Biden ha centrado la jornada en buscar apoyos Pensilvania, estado que el demócrata trata como la piedra angular de su victoria.
El FBI ha anunciado que investiga una serie de llamadas para desinformar a los votantes e instarles a que no saliesen de casa en plena jornada electoral. En algunos casos, se les decía a los votantes que acudiesen a las urnas el miércoles para evitar las colas, cuando este martes es el último día para poder hacerlo.
Según la Agencia de Ciberseguridad y Seguridad de Infraestructuras del país, se trata de una acción que supone «intimidación del votante» y «supresión del voto», aunque recordaron que se trata de una práctica habitual.
Según cifras del Washington Post, se han hecho unas 10 millones de llamadas de este tipo por todo EE.UU. en los últimos días, aunque comenzaron en verano.
El expresidente de Estados Unidos Barack Obama ha alabado este martes la profesionalidad del candidato demócrata a la Casa Blanca, Joe Biden, cuando era su número dos y ha asegurado que hacía de él un «mejor presidente».
En un mensaje difundido a través de su cuenta de Twitter, Obama ha recordado que «durante ocho años», Biden era «el último en abandonar la sala cuando tenía que enfrentarse a una decisión difícil». Así ha transmitido su apoyo al exvicepresidente y ha pedido el voto para los demócratas.
Roberto Blanco, natural de Ribeira, asegura que no ha vivido una situación similar a la que atraviesa el país en estos momentos: «El espíritu nacional es bastante distinto al de hace cuatro años». Él es uno de los gallegos expectantes por lo que pueda suceder este martes en los comicios presidenciales de Estados Unidos.
En Texas, la posibilidad de votar desde el coche, como si de un restaurante de autoservicio se tratase, fue habilitada para facilitar la participación de personas en riesgo o con problemas para hacerlo normalmente debido a la pandemia del coronavirus.
En un centro propiedad del condado de Travis, cuya capital es Austin, los carteles en español de «Vote desde su auto» estaban colocados encima de varios conos de esa calle cercana al Capitolio estatal.
Pese a que la afluencia a ese centro era baja, una de las participantes comentó a Efe que este tipo de votación «ha llegado para quedarse» en un país donde el servicio en formato «drive-through», es decir, cuando el cliente o usuario está en su vehículo, es habitual en todo el territorio.
Esta opción, sin embargo, no ha sido bien vista por todos los habitantes de Texas. Sin ir más lejos, un juez federal estadounidense volvió a frenar este lunes una petición de los republicanos para que se anularan casi 127.000 votos emitidos por anticipado en Texas, a través del voto desde el vehiculo, después de un fallo similar del Supremo de ese estado.
Estados Unidos es la nación del mundo con más casos de la covid-19 con más de 9,3 contagios y 232.000 fallecidos, de acuerdo a los datos de la Universidad Johns Hopkins
Más de 102 millones de personas ya habían ejercido su derecho al sufragio, de hecho, antes incluso de la apertura de las urnas en la jornada electoral, mediante las modalidades de voto anticipado y voto por correo. Esto supone el 72,8 % de la participación total del 2016, que fue de 137 millones de electores. Algunos estados como Hawái, Washington, Montana o Texas habían ya superado el número de votos de hace cuatro años a media tarde.
En estas elecciones, casi todas las miradas se dirigen a los candidatos, pero hay otros detalles a tener en cuenta. Este martes se eligen 35 de los 100 miembros de la Cámara Alta, crucial para desarrollar el programa político, entre otro aspectos clave.
El mundo contiene la respiración hasta que se haga oficial el resultado de los comicios presidenciales en Estados Unidos. ¿Qué países y organismos apoyan a cada candidato? ¿Cómo pueden influir estos comicios en otros puntos del planeta?
Amarillo podría ser una ciudad cualquiera de la América profunda. Situada en el noroeste de Texas, dos cosas la convierten en una ciudad única: la fortificada planta de Pantex, la única de Estados Unidos en la que se ensamblan y desmantelan las armas atómicas, y el Cadillac Ranch, una surrealista atracción turística compuesta por diez coches semienterrados y llenos de grafitis.
Amarillo es territorio de Donald Trump. No en vano, la ciudad linda con el condado que más le votó en este estado, que tradicionalmente ha sido republicano. No obstante, en estas elecciones podría dar un vuelco. Y Charles Kempf y Rusty Donaldson han intentado con todas sus fuerzas que así sea.
Florida, uno de los estados clave en estos comicios llega a esta jornada con un récord histórico de más de 9 millones de votos adelantados. También lo hace con un virtual empate entre Donald Trump y Jon Biden. Los resultados de este reñido estado, que en 2016 ganó Trump con unos 110.000 votos más que la demócrata Hillary Clinton, son una incógnita, con cerca de 2 millones de votantes independientes y una alta población hispana dividida entre los dos partidos tradicionales.
«He escuchado que lo estamos haciendo muy bien en Florida y que lo estamos haciendo muy bien en Arizona. Lo estamos haciendo increíblemente bien en Texas. Lo estamos haciendo, creo que lo estamos haciendo, estoy oyendo que lo estamos haciendo bien en todas partes», dijo Trump al personal de su campaña durante una visita a su sede en Arlington .
Trump alabó las filas de votantes en algunos centros y predijo que va a gobernar cuatro años más. Además, elogió la labor de los trabajadores de su campaña y bromeó con que «alguna de estas personas será algún día presidente». El mandatario agregó que no está pensando «ni en el discurso de concesión (de la derrota) ni en el de aceptación» de la victoria en los comicios. Aun así, el presidente reconoció: «Perder nunca es fácil, no para mí, no lo es».
El candidato demócrata arrasa entre los famosos. Tiene aliados en figuras tan influyentes como Lady Gaga, Tom Hanks o Jane Fonda. Pero también Trump tiene sus seguidores entre las estrellas. 50 Cent, Kid Rock o Kirstie Alley son algunos de los apoyos del actual presidente.
El exvicepresidente de Obama, Joe Biden, ha regresado ahora como candidato inesperadamente, y aspira a atraer el voto moderado de los republicanos hastiados de Trump. Aprovecha, además, su imagen de hombre tranquilo, algo que ya ha servido a Donald Trump para sus burlas. «Joe el Somnoliento», le llama el magnate.
El actual presidente estadounidense, Donald Trump, exprime como nadie la indignación de una clase media vapuleada por la globalización y las élites. El magnate encierra, incluso en sus salidas de tono, certeros diagnósticos del sentimiento general de muchos estadounidenses.
El aspirante demócrata a la Casa Blanca, Joe Biden, aventaja al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que se presenta a la reelección, en 7,2 puntos de cara a los comicios de este martes, según el promedio de sondeos de RealClearPolitics.
De acuerdo a esos datos, Biden va por delante con una media de 2,3 puntos en los estados clave para las elecciones. Solamente en Carolina del Norte tiene Trump una pequeña ventaja de 0,2 puntos, mientras que en el resto las lidera el demócrata: en Florida, el que fuera vicepresidente de Barack Obama (2009-2017) encabeza los sondeos en 2,3 puntos; en Pensilvania, en 1,2; en Michigan en 4,2; en Wisconsin en 6,7; y en Arizona en 0,9.
RealClearPolitics apunta que Biden lograría 216 delegados, frente a 125 de Trump y habría 197 en juego todavía.
El candidato demócrata a la presidencia de Estados Unidos, Joe Biden, regresó este martes a la casa de su niñez en Scranton y en el salón, detrás de un cuadro, escribió: «Desde este hogar a la Casa Blanca con la gracia de Dios».
Biden firmó esa frase con su nombre y acabó con la fecha de hoy: el 3 de noviembre de 2020, el día en el que EE.UU. decide entre él y el actual presidente y candidato republicano, Donald Trump.
«Acabo de firmar detrás de un cuadro en el salón», dijo Biden a la prensa al salir de la vivienda, de tres pisos y que en el jardín lucía unos carteles a favor de su candidatura y de la senadora Kamala Harris, que podría convertirse en la primera mujer en alcanzar la Vicepresidencia.
El secretario interino de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Chad Wolf, ha descartado que «actores extranjeros» puedan poner en tela de juicio los resultados de las elecciones presidenciales de este martes en el país norteamericano.
«No existen indicios de que actores extranjeros hayan tenido éxito a la hora de comprometer el proceso electoral o de manipular votos en estos comicios», ha aseverado durante una rueda de prensa llevada a cabo de forma telemática.
La preocupación ante la posibilidad de que un tercer país intervenga en las elecciones ha crecido desde 2016, cuando hackers rusos filtraron miles de correos electrónicos de la campaña demócrata en beneficio del que luego sería el inquilino de la Casa Blanca, Donald Trump.
El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, lanzó este martes una velada crítica a la gestión de la covid-19 por parte de la Administración del presidente estadounidense, Donald Trump, al afirmar que la elección presidencial de hoy puede cambiar la «trayectoria» de la pandemia en Estados Unidos.
En una entrevista radiofónica, Trudeau matizó que, aún así, «nada va a pasar de forma rápida y necesitamos seguir teniendo mucho cuidado y colocar la seguridad de los canadienses como la prioridad en todas nuestras decisiones con respecto a la frontera».
Las declaraciones de Trudeau se producen cuando millones de estadounidenses se disponen a votar hoy en las elecciones generales para conceder otros cuatro años de Presidencia a Trump o colocar en la Casa Blanca al candidato del Partido Demócrata, Joe Biden.
La gestión de la pandemia en Estados Unidos se ha convertido en uno de los principales temas de la campaña electoral, con Trump afirmando en repetidas ocasiones que la enfermedad está siendo controlada y remitiendo en el país a pesar de que los datos señalan el aumento de las infecciones. Mientras que, por su parte, Biden siempre ha afirmado que si se hace con la Presidencia tomará medidas más estrictas contra la pandemia, en la que Estados Unidos lidera como país con más infecciones detectadas, 9,3 millones de casos, y muertes, 231.599 a causa de la enfermedad.
Además de elegir a su presidente para los próximos cuatro años, los estadounidenses también deciden la composición de gran parte del Congreso, una decena de gobernadores y un buen número de iniciativas populares. Estos serán los ejes de la disputada noche electoral.
Biden lidera la intención de voto de los hispanos en Arizona, Nevada y Texas, pero no logra despegar en el estado del sol. La ventaja allí entre Biden y Donald Trump se reduce a cinco puntos: 48 % frente a un 43 % en intención de voto, muy por detrás del 62 % del apoyo total que recibió Hillary Clinton en el 2016 y que no le sirvió para hacerse con el estado.
La mayoría de estados están decididos antes de las elecciones ya sea por los márgenes que indican las encuestas o por su histórico electoral. Es el caso de California para los demócratas o Tennessee para los republicanos. Pero la suma de los estados decididos por lado y lado no llega a los 270.
Es ahí dónde entran los estados clave, un selecto club de apenas una decena que fluctúan elección tras elección, aunque no siempre son los mismos, en los que los candidatos dedican todos sus esfuerzos durante la campaña y en los que todos los ojos están puestos en la noche electoral.
Son estos:
Florida. Florida es el estado clave por excelencia. En 2016 votó por Trump, en 2008 y 2012 por Barack Obama, en 2004 y 2000 por George Bush hijo, en 1996 por Bill Clinton o en 1992 y 1988 por George Bush padre. En el 2000, de hecho, tras un recuento que duró semanas, entregó la Casa Blanca a Bush por unos 500 votos.Trump huye de Washington siempre que puede con destino Florida. Cuenta con la migración latinoamericana más derechista y con los pensionados en busca del sol. Los recuentos -como el de Bush- suelen ser de infarto y el ganador se lleva 29 compromisarios, el premio grande entre los estados clave.
Pensilvania / Michigan / Wisconsin. Estos tres estados eran un seguro de vida para los demócratas gracias al voto afroamericano urbano y a la clase trabajadora blanca. Hasta 2016, Wisconsin había votado demócrata en las siete anteriores elecciones presidenciales, mientras que Michigan y Pensilvania en seis. Trump, sin embargo, apostó fuerte en 2016 por los tres (cerrando campaña en Michigan), apeló al voto rural y a la clase trabajadora blanca desengañada por el cierre de industrias y los ganó por un irrisorio margen combinado de 80.000 votos, sumando un total de 46 compromisarios que allanaron su sorpresivo camino a la Casa Blanca.
Minesota / Nuevo Hampshire. Con características parecidas a los tres anteriores aunque aún más demócrata si cabe, Minesota fue el cuarto estado que Trump se puso entre ceja y ceja conquistar en 2016. Por poco, pero con Minesota y sus 10 compromisarios no pudo. Otro estado que los demócratas salvaron por los pelos fue Nuevo Hampshire, donde un 94 % de votantes blancos y con peso rural es terreno abonado para Trump, aunque solo entrega 4 compromisarios.
Texas / Arizona / Georgia. La otra cara de la moneda. Estados que parecían garantías para los republicanos, pero que los cambios demográficos (una gran migración desde estados más progresistas combinada con la movilización del voto joven y de minorías) hacen nada descabellado que los demócratas puedan hacerse con ellos. Arizona con sus 11 compromisarios parece un hecho, Georgia y sus 16 se vaticina como posible, mientras que la todopoderosa Texas y sus 38 es todavía un sueño para Biden o, de confirmarse, una pesadilla para Trump.
Carolina del Norte. Aunque se inclina hacia la derecha, Carolina del Norte votó por Obama en 2008 o por Jimmy Carter en 1976. En 2016 optó sin mucho entusiasmo por Trump y una alianza entre los afroamericanos y los votantes moderados a favor de Biden pondría en peligro sus 15 compromisarios para el presidente.
Nevada. Cada vez más teñida de azul, Nevada ha votado demócrata en cinco de las últimas siete elecciones a la Casa Blanca. Aunque todavía se la considera un estado clave, es posible que abandone pronto este selecto club.
Ohio. Es el termómetro de Estados Unidos. Ha votado siempre por el ganador en las 14 últimas contiendas presidenciales. Del demócrata Lyndon B. Johnson en 1964 a Trump en 2016. Aunque como dice el dicho, las estadísticas están para romperlas.
Iowa. Tras fluctuar entre los dos partidos por más de un siglo y cuando parecía que los demócratas estaban inclinando de su lado la balanza, llegó Trump y ganó Iowa con un margen de 10 puntos. Sus granjeros, sin embargo, son de los más afectados por la guerra comercial con China y eso le puede pasar factura al presidente.
Maine / Nebraska. Maine y Nebraska son los únicos dos estados que no dan todos sus compromisarios al candidato más votado, sino que los dividen por distritos. Maine es demócrata, pero su segundo distrito rural ya votó por Trump en 2016. Con Nebraska pasa lo contrario: no hay duda de que es republicana, pero el distrito urbano de Omaha ha votado demócrata en el pasado. Son un solo compromisario por distrito, pero pueden decidir la elección si hay un (no tan improbable) empate a 269.
Ha llegado el día en el que los estadounidenses deciden si ellos (y el mundo) tienen cuatro años más de Trump o si es la hora de un viraje hacia la moderación de Joe Biden. Queremos saber la opinión de nuestros lectores: ¿crees que las encuestas acertarán y Joe Biden se alzará con la victoria o que, por el contrario, Trump vuelve a vencer una vez más a los sondeos y se sentará una vez más al frente del Despacho Oval? Vota y cuéntanos aquí tu opinión.
La incertidumbre sobrevuela este día histórico donde se decide el futuro de Estados Unidos. Los sondeos dan una leve ventaja a Joe Biden, pero los republicanos no se fían. El síndrome postraumático de la derrota de Hillary Clinton de hace cuatro años mantiene a todos los estadounidenses alerta.
Aquí te desgranamos cómo van ambos en las encuestas y cuáles son las posibilidades de ganar de cada uno de los candidatos.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se mostró este martes confiado en su victoria durante la jornada electoral e insistió en que no se declarará vencedor prematuramente, como han augurado algunos medios de comunicación.
Trump inició la jornada con una entrevista telefónica con el programa de televisión Fox&Friends, de la cadena conservadora Fox, en la que dijo que tiene una «firme posibilidad de ganar» y estar en la Casa Blanca cuatro años más, pese a que las encuestas dan una leve ventaja a su oponente demócrata, el exvicepresidente Joe Biden.
El gobernante se expresó satisfecho con la gran afluencia de seguidores que han asistido a sus actos de campaña en los últimos días electorales y dijo sentirse «muy bien».
Dirigiéndose a los indecisos que aún no han salido hoy a votar les recordó que la economía del país iba muy bien hasta la llegada del coronavirus en el primer trimestre del año.
«Construimos la mejor economía del mundo. Fue horriblemente interrumpida por algo que nunca debería haber sucedido», apuntó.
Defendió su gestión de la pandemia, que ha ocasionado más de 231.000 muertes en el país, y señaló que se salvaron numerosas vidas con el cierre de la economía a principios de año.
Insistió en sus críticas a su oponente demócrata y apuntó que, de ganar las elecciones, Biden no será capaz de evitar que el ala más radical de su partido se haga con el mando.
La cita con las urnas en Estados Unidos es un evento tan fascinante como confuso. Más aún en un momento tan marcado por la pandemia de coronavirus. Aquí te contamos las claves para no perderte en esta noche tan importante para el país norteamericano.
La primera dama de EE.UU., Melania Trump, votó este martes en Palm Beach, la ciudad del sureste de Florida a la que ella y su esposo el presidente Donald Trump, trasladaron su residencia particular en 2019.
Melania, con un vestido estampado sin mangas y el pelo recogido en un moño bajo, no reveló su voto, como sí lo hizo el candidato republicano horas antes.
De toda elección tiene que salir un ganador y un perdedor así que lo mismo cabe esperar de las elecciones de este 3 de noviembre en Estados Unidos. Sin embargo, el camino hasta llegar a conocer quién será el inquilino de la Casa Blanca en los cuatro siguientes años, Donald Trump o Joe Biden, podría ser mucho más accidentado en esta ocasión.
Aunque a priori solo cabe esperar dos posibles escenarios una vez que se cierren las urnas, una victoria del actual presidente o la elección del candidato demócrata, lo cierto es que en estas presidenciales se dan todos los ingredientes para que la consecución de uno de estos dos resultados se prolongue en el tiempo o incluso para que emerja una tercera vía.
Si se cumplen los pronósticos y lo que vaticinan los sondeos, Biden debería ser quien se lleve el gato al agua. El escenario más fácil sería que el demócrata obtuviera los 270 compromisarios del Colegio Electoral que necesita rápidamente, sin necesidad de que se conocieran los resultados de todos los estados, en particular aquellos que están más reñidos, los llamados swing states.
En una circunstancia de este tipo, a Trump no le quedaría a priori otra opción que reconocer su derrota y llamar a Biden para felicitarle, como han hecho durante la historia del país todos los perdedores antes de que el vencedor pregonara públicamente su victoria. Sin embargo, el carácter del actual mandatario hace temer que lo que debería ser un gesto automático en su caso no llegue con la rapidez esperada.
Su admisión de derrota podría tardar aún más en llegar si, como se teme, el resultado en algunos estados clave se demora o no es tan claro como cabría esperar. A ello va a contribuir en estas elecciones a buen seguro el elevado número de votantes por correo y anticipados que ha habido. Casi 100 millones han votado por adelantado, un dato que representa el 72,3 por ciento de los que votaron en 2016.
Los primeros colegios electorales de EE.UU. abrieron este martes a las 6 de la mañana, hora local (12 de la mañana en España) para dar comienzo a una jornada histórica en la que el país decide entre el actual presidente y candidato republicano, Donald Trump, o su rival, el demócrata Joe Biden.
Ocho de los 50 estados de EE.UU. (Connecticut, Indiana, Kentucky, Maine, Nuevo Hampshire, Nuevo Jersey, Nueva York y Virginia) comenzaron a votar a las 6.00 de la mañana en hora local, mientras que algunos electores pudieron depositar su papeleta una hora antes en Vermont, donde los centros electorales abren entre las 5 y las 10 de la mañana.