Las principales celebraciones gastronómicas de la zona promocionan los productos del mar y de la tierra A ponerse a dieta. Más vale tener unos kilos de menos y la ropa algo floja porque lo que se avecina en Barbanza es una tragantona con letras mayúsculas. Si Galicia es conocida extramuros por su gastronomía, esta comarca no iba a ser una excepción, sobre todo si se tiene en cuenta la variedad y calidad de los productos que abundan en estas costas. El percebe de Aguiño, la xouba de Rianxo y el pulpo del Son son objeto de exaltación en unas fiestas que cada año cobran más pujanza. Y las carnes no van a la zaga de crustáceos, peces y moluscos: el lechón de Carnota y la ternera de Mazaricos son manjares dignos de hincarles el diente.
ABDÓN DORCA